La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Nanosatélite ecuatoriano no colisionó con residuos pero se desconoce su estado

EFE

Quito —

0

El Pegaso, el primer nanosatélite ecuatoriano lanzado al espacio en abril, no colisionó frontalmente con los restos de un cohete ruso, pero se desconoce si funciona, dijo hoy a Efe el director de la Agencia Civil Espacial Ecuatoriana (EXA), Ronnie Náder.

“No hubo una colisión frontal, directa, pero sabíamos que el cohete llevaba fragmentos”, dijo Nader al añadir que hacia las 10.10 hora local (15.10 GMT) se podría saber algo aunque adelantó que será “difícil” pues su paso será “bien lejano” de la estación terrestre desde donde se vigila.

Recordó que en la programación de la semana no se contemplaban emisiones del Pegaso el miércoles ni el jueves pues el paso era lejano, por lo que sólo mañana, viernes, se podría conocer su estado.

El miércoles el “Joint Space Operations Center” alertó a la EXA de la posibilidad de la colisión y hoy la avisó de que no hubo colisión directa en el cruce entre los restos del cohete ruso y el satélite ecuatoriano que estaba previsto para las 05.38 GMT.

“Sé que está entero, sé que está en órbita pero no sé si funciona todavía”, dijo Nader, el primer astronauta ecuatoriano que ya había señalado que “no es la primera vez que Pegaso se va a encontrar con estas cosas” porque hay “muchísima” basura en el espacio.

El nanosatélite Pegaso, puesto en órbita el 26 de abril y cuya señal de vídeo se capta desde el 16 de mayo, ha logrado enviar imágenes de zonas geográficas de Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.

El satélite, durante el enlace y envío de imágenes, también transmite sonidos en código morse que estudiantes pueden descodificar gracias a programas establecidos para ello en el afán de EXA de despertar el interés por lo aeroespacial.

Pegaso, un pequeño cubo de 2,1 kilos de peso, fue enviado al espacio en un cohete no tripulado LM2D lanzado desde el centro espacial de Jiuquan, situado en la provincia china de Gansu.

En la elaboración del nanosatélite ecuatoriano, que tardó en construirse un año, y su gemelo, Krysaor, que se lanzará en agosto próximo desde Rusia, EXA y varias empresas privadas invirtieron 80.000 dólares (62.000 euros).

El Estado ecuatoriano aportó unos 700.000 dólares (542.000 euros) para el lanzamiento, seguros, logística y pruebas de certificación de ambos satélites.