Bruselas, 14 oct (EFE).- El líder opositor ruso Alexei Navalni, un colectivo de mujeres afganas represaliadas por los talibanes y la expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez son los finalistas a la edición de 2021 del premio Sájarov a la libertad de conciencia que otorga cada año la Eurocámara.
Las comisiones de Asuntos Exteriores, Derechos Humanos y Desarrollo seleccionaron este jueves a los tres nominados con más apoyos antes del voto final entre los presidentes de los grupos políticos, que se celebrará el próximo jueves en Estrasburgo.
La ceremonia de entrega del premio será el próximo mes de diciembre durante el pleno parlamentario que se celebra en la misma ciudad francesa.
Por el camino se quedaron la activista saharaui Sultana Jaya, bajo arresto domiciliario desde el 19 de noviembre de 2020 sin orden judicial en su contra, y la ONG Global Witness, un movimiento en defensa de los activistas medioambientales.
El grupo socialdemócrata en la Eurocámara y parte de los Verdes defienden la candidatura de un colectivo de mujeres afganas prominentes, “víctimas y luchadoras” al mismo tiempo tras la toma talibán de Kabul el pasado agosto, procedentes de campos como la política, la enseñanza, el periodismo o el activismo.
Desde las filas populares y liberales, por su parte, han propuesto al líder opositor ruso Alexei Navalni, envenenado hace un año y condenado en febrero pasado a dos años y medio de cárcel tras su regreso a Rusia y cuya formación no ha podido participar en las recientes elecciones legislativas en el país.
El grupo conservador promoverá la candidatura de la expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez, encarcelada en este país dentro de un proceso iniciado en su contra a instancias del oficialismo, que la acusa de delitos como conspiración, terrorismo y sedición por el supuesto golpe de Estado de 2019, cuando Evo Morales salió de la presidencia.
El Parlamento Europeo concede desde 1988 el premio Sájarov, un galardón nombrado en honor al físico soviético y disidente político Andréi Sájarov que reconoce a individuos y organizaciones excepcionales en su defensa de los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Dotado con 50.000 euros, desde entonces lo han recibido personalidades como el líder sudafricano Nelson Mandela, la joven activista paquistaní Malala Yousafzai, la plataforma española ¡Basta Ya! y opositores al régimen cubano como las Damas de Blanco o Guillermo Fariñas.