La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) condenó la “expansión ilegal de asentamientos”, tras el anuncio israelí de ampliar con 800 viviendas las colonias en el territorio ocupado de Cisjordania.
“Denunciamos duramente los planes del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y del ministro de Defensa, Avigdor Lieberman, de construir 560 casas en el asentamiento ilegal de Maalé Adumim y viviendas en los asentamientos ilegales de Ramot, Guiló y Har Homá”, indicó la responsable del departamento de Cultura e Información de la OLP, Hanán Ashrawi, en un comunicado emitido esta madrugada.
Ashrawi, miembro del Comité Ejecutivo de la Organización, añadió que “aislando Jerusalén de su entorno palestino y limpiando étnicamente la ciudad ocupada de su población originaria, el Gobierno israelí se inclina hacia la destrucción de la viabilidad, integridad y contigüidad territorial de un futuro Estado palestino con Jerusalén Este como su capital”.
Medios locales informaron ayer del anuncio del Gobierno israelí de la salida a concurso público de 800 nuevas viviendas en asentamientos judíos en territorio palestino ocupado.
Netanyahu comunicó la ampliación durante la reunión de su gabinete celebrada el domingo.
De acuerdo a los medios, la decisión se produce en respuesta a la escalada de violencia de la última semana, con dos israelíes muertos y seis heridos, y tras presiones de miembros del gabinete de seguridad reunido de urgencia el sábado para analizar esos ataques cometidos por palestinos.
La organización israelí Shalom Ajshav (Paz Ahora, en hebreo) condenó igualmente la decisión y señaló que “la construcción de asentamientos pone en peligro tanto la posibilidad de paz y los dos estados, como la seguridad de los ciudadanos israelíes”.
“Nuevas construcciones en los asentamientos no impedirán las próximas víctimas sino que reforzarán el extremismo en ambas partes. La verdadera respuesta al terrorismo es acabar con la ocupación y alcanzar un acuerdo negociado”, concluye la ONG en un comunicado.