El recién nombrado responsable de comunicación del PP, Pablo Casado, ha variado su discurso sobre las imputaciones en función de a quién afecten. Mientras que los conservadores atacan al PSOE por la imputación de Manuel Chaves y José Antonio Griñán en el caso de los ERE, Casado justifica que el número tres del PP solo está citado a declarar “en calidad de imputado”. Es la misma situación a la que se enfrentaron los expresidentes andaluces ante el Tribunal Supremo.
“Hay que cumplir con la palabra dada”. Son las palabras de Casado, el 18 de febrero en RTVE, sobre la imputación de Chaves y Griñán asegurando que “tanto Sánchez como Díaz dijeron que en cuanto hubiera una imputación en estas personas no les temblaría el pulso para exigirles que abandonaran el escaño”.
“No es una imputación, sino una citación en calidad de imputado”. Es la declaración que Casado ha utilizado esta mañana sobre la imputación del nuevo responsable de Organización del PP, Fernando Martínez-Maíllo, en el 'Caso Caja España' por la presunta concesión irregular de créditos al entonces presidente de la entidad, Santos Llamas. “Hay que diferenciar entre la imputación de algún delito y una calificación procesal entre la que declaras ante un juez”, ha precisado en La Sexta.
Ha insistido en que Chaves y Griñán “están imputados”, pese a que el Supremo no les ha atribuido ningún dlito concreto. Según el dirigente del PP, lo que ocurre con Maíllo “es distinto” porque “a Martínez-Maíllo se le llama en calidad de imputado” porque “es la calificación que tenía antes del procedimiento de nulidad”. Casado ha explicado que el nuevo número tres del PP ha estado “imputado, desimputado y ahora se ha solicitado la nulidad de esa imputación”.
La polémica ha saltado después de que Mariano Rajoy anunciara cambios los mínimos en el Gobierno entre los que se encuentra el nombramiento de Fernando Martínez-Maíllo como número tres del PP.