Podemos ha lanzado la carrera para Vistalegre 2. El secretario general del partido, Pablo Iglesias, ha propuesto este lunes que la II Asamblea Ciudadana estatal se celebre el fin de semana del 10, 11 y 12 de febrero. A la vez que el Congreso del Partido Popular. La decisión final sobre la fecha depende del Consejo Ciudadano Estatal (CCE), que se ha convocado para el 17 de diciembre. Además, un referéndum entre los inscritos resolverá el sistema de primarias que se empleará tanto para definir las líneas estratégicas y políticas como para elegir a la próxima dirección estatal.
Iglesias ha comparecido en la habitual rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Coordinación. Acompañado de su secretario de Organización, Pablo Echenique, el líder del partido ha explicado la elección de la fecha como una fórmula para que los españoles “comparen ambos proyectos antagónicos”, en referencia al Partido Popular.
Iglesias también ha encargado a Echenique que redacte una propuesta para modificar el sistema de votación de Podemos, una de las críticas más recurrentes desde la fundación del partido. El referéndum entre los inscritos se celebrará los días 18, 19 y 20 de diciembre y preguntará tanto por el sistema de elección de la dirección (sistema mayoritario, como el actual, o alguno más proporcional tipo Dowdall o Borda) como por si se votarán de forma conjunta los documentos y las listas o por separado, como se ha hecho hasta ahora en Podemos.
“Es un clamor que el sistema [de votación] no cuenta con consenso”, ha asegurado Iglesias. “Debemos tener uno diferente con mayor proporcionalidad y que salvaguarde la representación de las minorías, algo que por desgracia no pasó en el primer Vistalegre y que debe pasar”. El secretario general ha reconocido que la decisión que se tomó en el otoño de 2014, cuando el llamado equipo promotor apostó por un sistema mayoritario, no fue adecuada.
Iglesias ha apostado en la rueda de prensa por una votación conjunta de documentos y listas. “Las cuestiones políticas no deberían estar separadas de la gente. Si hay listas es porque hay proyectos distintos”, ha apuntado. Casi inmediatamente, Íñigo Errejón ha apostado en Twitter por una votación separada
El anuncio de Iglesias coincide con el lanzamiento por parte de Anticapitalistas del manifiesto “Por una marea del cambio, por un Podemos en movimiento” en el que plantean sus primeras propuestas para el cónclave que definirá el futuro del partido.
Anticapitalistas ha sido identificada como la “corriente crítica” desde la fundación de Podemos. Pero este lunes Iglesias ha aumentado la nómina de “críticos” en el partido al calificar como tal a su número dos, Íñigo Errejón.
“Yo les plantee”, a Errejón y a Urbán, “que si quieren dar el paso me parecería bien y sería síntoma de grandeza”, ha informado Iglesias. El secretario general ha explicado que ambos declinaron la oferta, lo que supone una “enorme responsabilidad” para él ya que nadie disputará el liderazgo del partido.
Iglesias cree que su obligación es intentar que se produzca el mayor consenso en la organización. Pero no descarta que finalmente haya proyectos enfrentados. “Es bueno que después de debatir por abajo haya acuerdo. Tengo el apoyo de todos, incluso de compañeros de corrientes críticas y mi obligación es integrarles”, ha apuntado. Si no es posible, “también será una buena noticia”.
Vistalegre 2 parte con tres grandes proyectos que en los próximos meses buscarán fórmulas para integrarse o, en caso contrario, dirimir en las urnas qué prefieren los más de 400.000 inscritos del partido.
Además del de anticapis, Pablo Iglesias y su número dos, Íñigo Errejón, difieren en el modelo de partido que debe salir de Vistalegre 2 pero sobre todo en los objetivos políticos a medio y largo plazo que debe plantearse Podemos.
El secretario general aspira a que Podemos lidere “un bloque histórico” que aúne de alguna forma sin definir de momento a todas las “fuerzas del cambio”, donde incluye a IU, Equo pero también a los sujetos políticos gallego y catalán. Iglesias quiere que Podemos aparezca como la única oposición (de ahí la elección de la fecha), pero no desde el Parlamento en solitario, sino principalmente desde la sociedad.
Errejón, por contra, apela a la independencia de un Podemos que pueda pactar, o no, con otros partidos en las convocatorias electorales y en función de las circunstancias. El secretario político cree que el debate que debe darse en la Asamblea es el de cómo ampliar los “márgenes” del partido, cómo ser “culturalmente dirigentes”.
“Esa va a ser la discusión de ideas fundamental. La discusión tiene que ver con qué dirección toma Podemos, no con quién la dirige”, aseguraba a mediados de noviembre Errejón, que ha descartado dar la batalla por el liderazgo del partido.