El próximo martes, cuando empiece la sesión de investidura, Mariano Rajoy será el único protagonista ya que el debate empezará a las cuatro de la tarde, con el discurso del candidato, y se suspenderá hasta el día siguiente a las 9.00 horas. Ana Pastor acaba de anunciar cómo se ordenará la sesión y ha decidido que el presidente en funciones centre todo el protagonismo y que el líder socialista pronuncie su intervención el miércoles. En el intento de investidura de Pedro Sánchez, la decisión del entonces presidente del Congreso, Patxi López, fue la misma. El PP lo consideró “una cacicada”.
Eso le costó duras críticas por parte del PP. Rafael Hernando protestó y aseguró que el presidente de la Cámara sólo buscaba que Sánchez pudiera “hacer un monólogo” sin que nadie le pudiera contestar y le acusó de saltarse el Reglamento del Congreso en su propio beneficio.
Hernando cargó especialmente contra López, a quien acusó de trabajar para favorecer a su candidato y de establecer un sistema de debate “sin precedentes”. “Es evidente que Sánchez quiere soltar su discurso, descansar, y afrontar a la oposición al día siguiente, con las ideas repasadas”, dijo el portavoz del PP.
Pastor ha justificado su decisión en que así, el resto de grupos parlamentarios tendrá tiempo para “analizar las propuestas del candidato”. Preguntada por si se arrepiente de las críticas que su partido dedicó entonces al socialista, Pastor ha tratado de escurrirse. “Yo ya sé que se me recuerda en ocasiones que soy la presidenta y en otras se me pregunta por lo que hace el grupo del que yo formo parte, pero voy a dejar a los grupos que expliquen lo que tengan que explicar”.