Pedro Quevedo (marzo, 1956) es el diputado de Nueva Canarias, perteneciente al Grupo Mixto del Congreso, que acaba de ser elegido presidente de la Comisión de Investigación sobre la supuesta financiación ilegal del PP.
El pasado jueves estaba en Las Palmas, donde reside, desconectado de todo mientras los portavoces de los grupos parlamentarios se encontraban en una carrera frenética para cerrar los nombres de las presidencias de las comisiones de investigación que se tenían que constituir esa misma tarde: la de financiación del PP y la del expolio de las cajas de ahorro, que recayó en Ana Oramas, su antigua compañera de grupo en Coalición Canaria.
Su nombre fue propuesto a ultima hora de la mañana por el PP y el PSOE -partido con el que Nueva Canarias concurrió conjuntamente a las elecciones generales- para desbloquear la situación que mantenían los grupos con vetos cruzados a sus respectivos candidatos.
El diputado, cuyo voto es oro para el Gobierno de Rajoy ya que de él depende que salgan adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE), asegura que aceptó el cargo por “responsabilidad”, aunque a regañadientes. Ahora pide a los partidos que eviten “montar circos” para no convertir la comisión en un “espectáculo”.
Mientras Oramas ha sugerido que algunos trabajos de la comisión de cajas que ella preside sean “a puerta cerrada”, Quevedo asegura que como presidente de la comisión Bárcenas, él defenderá que se desarrolle “con la máxima transparencia”.
Prácticamente toda la oposición está dispuesta a llamar ya a Rajoy a declarar en la comisión que usted preside. ¿Si el PP pide esperar a que testifique en el caso Gürtel, se esperará?
Nos reuniremos el miércoles después del Pleno para ordenar las cosas. Vamos a escuchar a todo el mundo y trataremos de funcionar con un criterio de racionalidad. Yo le aseguro que me tengo que aprender este oficio de presidente de comisión porque nunca había tenido una experiencia igual. Pero le adelanto que yo siempre he defendido que el presidente del Gobierno tiene que dar explicaciones.
Ana Oramas ha sugerido que algunos trabajos de la comisión de cajas sean a puerta cerrada. ¿Usted es partidario de que su comisión, con todas las comparecencias, se realice a puerta abierta?
No tengo criterio claro sobre todo el proceso hasta el próximo miércoles por carecer de experiencia en esto, como le digo. Pero defenderé, como siempre, la máxima transparencia.
¿No habrá vetos?
A mí me parece que los vetos son inaceptables siempre y en esto también.
El jueves fue un día intenso. ¿Qué le pareció todo el lío que se montó en el Congreso durante la negociación de las dos comisiones de investigación?
Bueno, la verdad es que yo lo viví en diferido, porque no estaba allí.
Cierto, precisamente eso aumentó la confusión. ¿Quién le propuso que fuera el candidato para la presidencia de la Comisión de Investigación de la financiación ilegal del PP?
Yo recibí a mediodía una primera llamada de Joan Baldoví, el portavoz del Grupo Mixto, con el que tengo una buena amistad, que es el que me informa de la situación. Me explicó: “Mira, Pedro, aquí hay una situación de bloqueo y, en fin, Xuclá [Jordi Xuclà, portavoz del PDeCat, que era la persona propuesta en un principio para presidir la comisión] está dispuesto a ceder su puesto en la comisión. ¿Tú cómo lo verías?. Lo que tú decidas, sabes que cuentas con apoyos”. Yo me resistí todo lo que pude porque no me apetecía nada pero al final dije que sí.
¿Si no le apetecía, qué le hizo aceptar?
Bueno, es que después me llama Antonio Hernando [portavoz del PSOE] y me lo pide él formalmente. Me dice, “te pedimos que des un paso adelante porque es la única manera de desbloquear esto y a nosotros nos parece que tú eres la persona que podría solucionar la situación”. Es evidente que nosotros tenemos una buena relación con el Partido Socialista. Pero a eso se unió que había ya esa petición también de una parte, creo que sustancial, del Grupo Mixto. Así que al final digo que sí a asumir esa responsabilidad pero, vuelvo a repetir, con bastantes pocas ganas y poco entusiasmo, la verdad.
¿No le llamó el portavoz del PP ni habló usted con alguien del Grupo Popular?
No, hombre, no. Eso no hubiese sido una buena idea.
Fuentes del PSOE explicaron que la propuesta de su nombre partió del PP, y que ellos la apoyaban puesto que Nueva Canarias ha sido socio electoral del partido socialista.
Yo no sé si el PP se lo propuso al PSOE, pero la verdad es que me extrañaría. Porque creo que es bastante evidente que las similitudes y las proximidades de este diputado con el PP no son muchas. Pero, no lo sé, no sé si hubo otro tipo de negociación o no entre ellos. Desde luego lo que está claro es que esto, planteado cómo se planteó y por quién nos lo planteó, de alguna manera era ponerte en una tesitura.
Que estuviera usted ausente en el momento de la elección para presidente de la Mesa no impidió que se constituyera la Comisión. ¿Se forzó el reglamento?
Pues no tengo ni idea, sinceramente. Es que para empezar yo ni estaba como miembro en esa Comisión.
Con más razón. ¿No ha sido todo muy raro?
Es que a mí me cogen a lazo, vía telefónica, y de ahí todo ese lío. Por lo tanto, yo me he perdido casi todo lo demás. Y ahora la primera preocupación que tengo, te lo voy a confesar, es que esto no se convierta en un circo, que circos ya tenemos más de la cuenta. Malo sería que esto se convirtiera en un circo.
Pero también quiero que quede perfectamente claro que presidir la comisión no significa ser ni el abogado defensor de nadie ni el fiscal de nada. Se trata de intentar garantizar la imparcialidad. El papel no nos hace gracia pero vamos a asumir la responsabilidad.
¿Habló con Jordi Xuclá?
No, no he hablado con Xuclá. A mí, como ya le he dicho, todo me lo explica Baldoví. Es el que me explica que Xuclá deja de estar en la Comisión para que esté yo. Eso quiere decir que el señor Xuclá lo vio bien. Desde luego yo no fui el que le llamó para decirle, “oye, quítate de en medio”, ni mucho menos, como te puedes imaginar.
El PP argumentó que las presidencias de las comisiones de investigación tradicionalmente son para los grupos minoritarios. ¿Xuclá no era una persona idónea para el cargo? También pertenece al Grupo Mixto.
Creo que ahí ha habido un conjunto de vetos cruzados y no sé cómo le ha afectado a Xuclá o no. Y tampoco voy a estar indagando mucho en eso.
¿Cómo valora su renuncia?
De ninguna manera. Ya le preguntaré a él personalmente cuando le vea porque la cuestión no era indagar por qué esto y por qué lo otro. La cuestión era que se plantea una situación clara a la que había que dar una respuesta rápida y clara.
Pero sabrá que Ciudadanos rechazó que Xuclá fuera el presidente porque lo llamó “representante del partido de las mordidas del 3%”.
Pues no, pero yo me imaginé que habría algún veto de esa naturaleza, aunque no lo tengo ni confirmado ni hablado con Xuclá. Pero, insisto, mala cosa es convertir esto en un circo. Además, por la misma regla de tres ahora alguien le puede decir a Ciudadanos que habiendo casos de corrupción para aburrir en el PP, son ustedes los responsables de que el señor Rajoy sea presidente. Por lo tanto, creo que hay que evitar tonterías porque para tonterías, las precisas. Como entremos en esa dinámica de descalificaciones, de vetos y de convertir esto en un espectáculo, malo. Las comisiones de investigación políticas están bastante devaluadas, y más aún cuando los asuntos están judicializados. No les añadamos más leña.
Xuclá lamentó esa estigmatización y dijo que era señalarle con la X con la que los nazis marcaban a los judíos.
Pues no me extraña. Si le dijeron eso y eso es lo que ha ocurrido, pues no me extraña que dijera eso. Yo al señor Xuclá le tengo consideración y respeto.
Se ha vinculado su nombramiento con el hecho de que su voto es codiciado por el PP porque es decisivo para conseguir sacar adelante los PGE del Gobierno.
(Se ríe) Ese comentario me viene bien para dejar muy claro que no parece tener mucha relación una cosa con la otra. Hay más de 50 enmiendas planteadas por Nueva Canarias y creo que el señor Montoro va a ser bastante poco sensible a que Nueva Canarias esté o no presidiendo una comisión. Que yo sea el presidente de la comisión no creo que modifique la negociación en absoluto.
¿No va a influir?
No, porque si yo con quien hablo es con el PSOE, no creo que el PP tenga ninguna sensación de que gana algo por este asunto. Además, la distancia que nosotros mantenemos con el PP es clara. ¡Acabamos de presentar una enmienda a la totalidad a los Presupuestos! ¿Qué más hay que hacer para que esto quede claro?
¿Es casualidad que ahora haya dos diputados canarios como presidente en estas comisiones, Ana Oramas, en la de cajas, que ha apoyado los PGE y la investidura de Rajoy, y usted, del que depende que se apruebe el texto final del proyecto cuando se debata en el Congreso?
A mí me hace bastante gracia que se haga esa interpretación. Lo que sí es verdad es que hay una tradición de que sean los grupos minoritarios los que presidan este tipo de comisiones porque eso supone que haya una mayor independencia.
Por cierto, ¿cómo van las negociaciones de las enmiendas? ¿Podría ocurrir que Pedro Quevedo terminara apoyando esos PGE?
Eso se lo diré después de las negociaciones, que no aventuro nada sencillas. Lo que hay por ahora es una enmienda a la totalidad y yo adelanto que en la hipótesis de que hubiera un acuerdo con todo lo que ha planteado Nueva Canarias con el PP, esos Presupuestos tampoco serían los de Nueva Canarias, en ninguno de los casos.
Nosotros estamos por el cambio político y estamos en posiciones radicalmente opuestas a las del PP. Lo que sí es verdad es que estamos aprovechando para hacer algo que no va a hacer nadie si no lo hacemos nosotros, que es tratar de defender los intereses de Canarias, que es una Comunidad que ha sufrido lo que no esta en los escritos por el maltrato de los últimos cinco años.
¿Cuánto va a costar su voto a esos PGE?
Bueno nosotros tenemos formuladas enmiendas en torno a los 500 millones de euros. Pero la cuestión no es si son quinientos millones o mil seiscientos, la cuestión son los contenidos. Algún gracioso dijo que ahora íbamos a pedir el AVE, pero cualquiera que analice los contenidos se dará cuenta de cuáles son nuestras preocupaciones. Ahí no hay ni una sola frivolidad. Por lo tanto, vamos a ser muy beligerantes en esto y no tenemos que dar explicaciones a nadie.
Volviendo a la negociación de las presidencias de las comisiones. Ciudadanos dice que ha sido un pasteleo.
¿Pasteleo? Hombre, mire, si no fuese porque es algo tan poco razonable sería para enfadarse. ¡Decir que esto ha sido un pasteleo! Lo que tiene que explicar Ciudadanos es por qué votaron a favor del señor Rajoy cuando había ya casos de corrupción para aburrir. Eso es lo que tenían que explicar. Pero si lo que están es en una tesis de distanciarse del PP por intereses suyos, partidarios, bueno, de acuerdo. Pero vamos a dejar las cosas ahí, porque creo que Ciudadanos no saldría bien parado de este debate. No pueden venir ahora a decir que todo en lo que no estén ellos es un pasteleo. Yo exijo un poco de rigor. Un poco de contención ayudaría bastante al prestigio de la política.
Que ha habido vetos cruzados es un hecho.
Lo que está claro es que aquí nunca va a estar todo el mundo de acuerdo con todo porque cada uno tiene sus estrategias. Lo que sí vamos a reclamar nosotros es respeto, porque si no, mal empezamos. Nueva Canarias no está para reírle a nadie las gracias, porque nosotros tenemos la trayectoria que tenemos y no vamos a aguantar que se nos acuse también a nosotros de pastelear no sé qué. Como se sabe, Nueva Canarias votó en contra del señor Rajoy y cuando hubo que pronunciarse en su día lo hicimos con absoluta contundencia.
Podemos quiso presidir la Comisión Bárcenas pero se cruzó su nombre. ¿Era más cómodo para los dos grandes partidos que Pedro Quevedo estuviera al frente de la Comisión antes que alguien de Podemos?
Pues no sé si es cómodo o no. Pero advierto de que si alguien pretende mangonear a este diputado va a tener serias dificultades, eso lo garantizo. Otra cosa es que haya aquí elementos de fractura, de tensiones y de significaciones duras, durísimas. Ese es otro tema. Por otra parte, no sé que se cree la gente que se hace desde la presidencia de una comisión. Se ordenan los debates y se trata de que sean lo más rigurosos posibles para evitar que se conviertan en un circo.
¿No hubiera sido razonable o más justo dar a los dos partidos nuevos alguna de las presidencias?
Esto es un tema de mayorías y minorías. Y el problema está en que cada uno se tiene que buscar sus acuerdos. Nosotros hemos reaccionado a esto porque se nos ha planteado y porque había una situación de bloqueo. Aquí lo justo o lo injusto está muy relacionado con lo que se consigue. Es curioso, Podemos y Ciudadanos, qué extraña unidad se ha producido ahora cuando si hubiesen estado de acuerdo antes, habríamos tenido cambio político en España.