Pedro Sánchez y Albert Rivera han mantenido este sábado una charla telefónica para abordar la situación en Cataluña. El secretario general del PSOE se ha propuesto liderar la crisis, tras ser él quien propiciara un encuentro con el presidente del Gobierno el pasado miércoles para abordar el conflicto catalán. Hoy Sánchez ha decidido hablar con el líder de Ciudadanos y también lo hará con Pablo Iglesias, después de que ambos hayan sidos recibidos por el presidente del Gobierno en la Moncloa.
Durante la conversación, que ha durado cerca de veinte minutos, han acordado “ser contundentes y claros en la defensa de la Constitución”, según han explicado a eldiario.es fuentes del partido socialista. Pedro Sánchez ha trasladado la necesidad de “abrir reformas en la próxima legislatura”. El líder del PSOE ha comunicado a Albert Rivera la propuesta de una reforma de la constitución en cuatro puntos, que se basa en los siguientes ejes: que se blinden los derechos sociales y se reconozcan otros y nuevas libertades; reformas que mejoren la calidad democrática en nuestro país; una reforma que mire a Europa, y una reforma que camine hacia la estructura federal.
Según han explicado estas mismas fuentes, respecto al conflicto catalán, Sánchez ha hablado con Rivera de “la importancia de plantear soluciones, no solo una reacción”. El líder de los socialistas tiene previsto hablar también este sábado con Pablo Iglesias, después de que tanto el líder de Podemos como el de Ciudadanos se reunieran este viernes con Mariano Rajoy. El presidente del Gobierno se ha reunido con Sánchez, Rivera e Iglesias y también lo hará con Andrés Herzog, líder de UPyD y con Alberto Garzón, aunque lo cierto es que quien dio el primer paso para que las fuerzas trataran esta situción fue Pedro Sánchez.
En un acto de partido en Cataluña celebrado también este sábado, el líder de Ciudadanos ha abogado por un pacto por España con el PP y PSOE en el que “la ruptura no se negocia”, del que dice que Podemos se autoexcluye, y ha remarcado que la unión de todos los españoles no es negociable. “Nos importa más España que nuestro partido”, ha enfatizado Rivera, y ha abogado por construir puentes en lugar de muros y a dialogar con aquellos que respetan las reglas de juego y no cuestionen la democracia y la Constitución.
Rivera también ha preguntado varias veces si aún queda alguien en el catalanismo político que no opte por la ruptura y esté “dispuesto a rectificar”, y ha criticado las propuestas de Mas y de la CUP por no respetar las leyes.