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Opinión - ¿Misiles para qué? Por José Enrique de Ayala

Pedro Sánchez acusa a los poderes financieros y al grupo Prisa de presionar para mantener a Rajoy

Pedro Sánchez ha reaparecido en Salvados (La Sexta) tras renunciar a su acta de diputado para evitar votar en la investidura de Mariano Rajoy. Preparado para comenzar una campaña con la que aspira a volver a dirigir el partido, el exsecretario general del PSOE ha cargado con dureza contra los poderes mediáticos y empresariales a quienes ha acusado de ejercer presiones para que en España gobernara de nuevo la derecha.

El exlíder socialista ha acusado especialmente al periódico El País y también a los sectores empresarial y financiero –de los que ha evitado especificar más nombres que el de César Alierta, expresidente de Telefónica– de trabajar para evitar un gobierno progresista: “Ha habido determinados medios de comunicación que me han dicho que si hubiera entendimiento con Podemos ellos lo criticarían. El País ha sido uno de ellos. Una de las explicaciones por las que la línea editorial haya sido tan abusiva e incluso insultante en lo personal ha sido por que pudiera haber un entendimiento entre las dos izquierdas”.

“Me reuní con los responsables de El País y me dijeron que o Rajoy o la línea editorial de El País no iba a ayudar para que hubiera un gobierno progresista liderado por el Partido Socialista”, ha revelado Sánchez, que ha asegurado que en ese encuentro no estaba Juan Luis Cebrián, sino los responsables del periódico. “Era difícil, pero nos lo pusieron mucho más difícil”, ha dicho sobre los medios que solo daban la alternativa de Rajoy o terceras elecciones. Sánchez defendía un gobierno con Podemos y ha reconocido que hubo “conversaciones” con los independentistas, pese al rechazo interno que causaba esa posibilidad.

También se ha quejado de la línea editorial de La Sexta, cadena en la que se emitió la entrevista. Tras reconocer la profesionalidad de los periodistas estrella de la cadena, como José Antonio García Ferreras, Ana Pastor o el propio Jordi Évole, ha admitido que no se ha “sentido identificado” con la línea editorial y ha considerado que tenía el sentido de evitar asentar su liderazgo.

Sobre los empresarios que, según Sánchez, pusieron trabas a que llegara a Moncloa, solo ha mencionado al expresidente de Telefónica. “César Alierta y otras personas han trabajado por que hubiera un Gobierno conservador en este país”, ha subrayado.

“Rajoy me convenció del no es no”

Como ya hizo en una entrevista en eldiario.es, Sánchez ha reconocido que tuvo “dudas” sobre la abstención para evitar otros comicios: “Rajoy me convenció del no es no”. El exlíder del PSOE ha señalado que el presidente le dijo que no solo necesitaría el apoyo de los socialistas en la investidura sino también para garantizarle la gobernabilidad. Eso, ha explicado, le convenció para mantener el rechazo a Rajoy.

“El país no tiene oposición”, ha declarado Sánchez, que ha lamentado que el PSOE, con la abstención, ha quedado en “tierra de nadie”, aunque ha mostrado su respeto hacia los “compañeros” que se abstuvieron este sábado.

“Me decepcionó Antonio Hernando”

Sánchez admitió que está “decepcionado” con Antonio Hernando, quien ha defendido el viraje del PSOE en el debate de investidura: “Me decepcionó Antonio Hernando defendiendo la abstención. Participó conmigo diseñando la estrategia del 'no es no', y por eso me tocó personalmente. Ha sido una decepción personal que Antonio Hernando siga como portavoz”. El número tres por Madrid ha sido uno de los principales colaboradores de Sánchez desde que se hizo con el poder del PSOE.

Sánchez ha insistido en que tiene la voluntad de presentarse al próximo congreso en el que se renovará el liderazgo, aunque ha asegurado que dependerá de lo que le digan los militantes en la andadura que pretende comenzar en los próximos días. “Tengo ganas, voluntad y fuerza de volver a serlo”, ha explicado. “No estoy muerto”. Ha comentado que ahora tiene más tablas que cuando llegó a Ferraz hace dos años.

Sánchez ha aprovechado su reaparición para lanzar un mensaje a Susana Díaz, a quien ha retado a presentarse al congreso si lo que quiere es liderar el PSOE: “Una organización no puede estar pendiente y sufriendo la agenda personal de un dirigente”.

“Susana tiene que hacer una reflexión sobre el papel histórico que siempre ha jugado el PSOE andaluz”, ha advertido, antes de recordar que Manuel Chaves se puso al servicio de José Luis Rodríguez Zapatero en el año 2000 a pesar de que había apoyado a José Bono. “Susana tiene que hacer una reflexión sobre que es necesario que el PSOE andaluz tiene que ser un factor de estabilización”, ha reiterado antes de insinuar que la presidenta andaluza no lo ha sido durante su mandato: “Susana lo dijo claramente en una entrevista, dijo que no compartía la estrategia y que teníamos dos estrategias completamente distintas”.

Sobre Felipe González: “No nos reconocemos en él”

Sánchez niega haberse sentido un títere de la presidenta andaluza. “Si lo pensó, se equivocó”, ha dicho. Aunque ha reconocido que mantuvo una reunión con Zapatero, Díaz, Ximo Puig y Tomás Gómez en la preparación de su candidatura para la secretaría general, ha negado que pactara con ellos no presentarse a las primarias para la presidencia del Gobierno.

Sobre Felipe González, Sánchez no ha dudado en responder “no” a la pregunta de Évole de si es “un dios” todavía en el PSOE. “No nos reconocemos en él muchos militantes”, ha dicho, aunque asegura que sí en quien era el presidente en 1982. “Felipe en mis zapatos hace 30 años también se hubiera mantenido en el ‘no es no’”, ha apostillado.

“Me equivoqué cuando llamé a Podemos populista”

También ha reconocido errores durante su tiempo en Ferraz. Así, ha admitido que se equivocó en su primer Comité Federal, a mediados de septiembre de 2014, cuando calificó a Podemos de “populista”. “No supe entender el movimiento que había detrás de Pablo Iglesias. El PSOE tiene que mirar de tú a tú y trabajar codo con codo con Podemos”.

Además, ha calificado de “error” el haber aceptado la imposición de los barones tras el 20D de no poder gobernar con el apoyo, ni siquiera la abstención, de las fuerzas independentistas.

En esa misma línea, ha considerado que se equivocó al pactar solo con Ciudadanos en su intento por llegar a Moncloa: “Cometí un error: firmar sólo con Ciudadanos y no con Podemos. Entonces todos jugaban a las segundas elecciones”

Así se ha pronunciado Sánchez en su primera entrevista tras dimitir como secretario general del PSOE y renunciar a su acta de diputado para evitar abstenerse en la investidura de Mariano Rajoy o mantener su no desobedeciendo al Comité Federal. De hecho, al comenzar el programa, Sánchez ha acusado a la gestora de haberle colocado en una “situación imposible” al rechazar la propuesta de que solo 11 diputados se abstuvieran.

Sánchez exige que la gestora convoque cuanto antes ese cónclave porque considera que su mandato ya ha concluido y que la única potestad que tiene en este momento es la de convocar un congreso extraordinario, tal y como establecen los estatutos del partido. Sin embargo, la dirección provisional que preside Javier Fernández no tiene previsto poner una fecha inmediata al congreso sino postergarlo unos meses.

En la entrevista, Sánchez ha revelado que ha recibido mensajes de políticos de otros partidos, como Manuela Carmena, Pablo Iglesias, Albert Rivera o Alberto Ruiz Gallardón. También ha asegurado que ha habido dirigentes del PSOE que no le han escrito desde el 1 de octubre, cuando dimitió: “Me ha sorprendido para mal”, ha lamentado.