Estabilidad frente al caos del multipartidismo. Ese es el leit motiv de la campaña de Pedro Sánchez ante la repetición electoral de la que culpa al resto de partidos. Así lo ha hecho también en una entrevista en inglés concedida a la cadena CNN aprovechando su viaje a Nueva York y en la que ha definido como “extrema izquierda” a Unidas Podemos, la coalición que hasta hace nada calificaba como “socio preferente”. “Contamos con un frente formado por distintos partidos políticos que van desde la derecha hasta la extrema izquierda y que están bloqueando la formación del Gobierno”, expresa el presidente en funciones.
El líder socialista se muestra convencido de que los españoles le reforzarán en su nuevo paso por las urnas porque contarán con nuevos datos: “Tendrán más información sobre todos los partidos y sus estrategias”. Sánchez se refiere concretamente a Ciudadanos y a Unidas Podemos. “Por ejemplo, antes de las elecciones de abril, no sabían que los liberales iban a bloquear y a crear más inestabilidad en nuestro sistema político”, dice en referencia al partido de Albert Rivera.
Sánchez también cree que Pablo Iglesias será castigado en las urnas por el fracaso de la investidura: “Los españoles sabrán definitivamente que la extrema izquierda, por cuarta vez en los últimos cuatro años, ha rechazado la formación de un gobierno progresista”. Además, defiende su negativa a negociar una coalición tras el rechazo a la oferta que hizo en julio y su defensa de una colaboración “con el Gobierno socialdemócrata desde fuera”.
“Esa es la tercera vía que propuse a la extrema izquierda en España”, reitera el presidente en funciones, que en una rueda de prensa también en Nueva York situó a Unidas Podemos “en el pasado” y defendió la opción de Íñigo Errejón como nuevo impulsor de ese espacio político. En el PSOE son conscientes de que Más País les robará votos, pero consideran que mantendrán su tendencia al alza –creen que perjudica más a Unidas Podemos– y que además tras las elecciones, será más fácil llegar a un entendimiento con la nueva plataforma.
“En mi país, tenemos una extrema izquierda que, en cuatro ocasiones, rechazó la formación de un gobierno progresista en estos cuatro años, a nivel nacional. Y por otra parte, tenemos a los llamados liberales que han abrazado la extrema derecha en distintos gobiernos a nivel regional y municipal. Pero que también bloquea, junto con la extrema izquierda, y la extrema derecha y los partidos de derecha, la formación de un gobierno nacional”, resume Sánchez en la entrevista cuya transcripción traducida ha difundido la Secretaría de Estado de Comunicación.
El secretario general del PSOE sostiene que las elecciones del 10 de noviembre son una “enorme oportunidad para que los españoles dejen atrás todo este periodo de inestabilidad e inicien un nuevo periodo de estabilidad”. Ese es el eje de su precampaña, situarse como el único capaz de darle a España un Gobierno estable, con el fin de recuperar votantes de centro que fueron capitalizados por Ciudadanos.
Preguntado por la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco en otra entrevista para CNN en castellano, Sánchez aprovecha para reivindicar los valores de la Segunda República que, a su juicio, “representa” desde la restauración de la democracia la monarquía parlamentaria. “Es bueno que empecemos a reivindicar esa España republicana, una España que defendió derechos y libertades que desgraciadamente fueron mancillados por la dictadura franquista, y que luego posteriormente fueron recuperados hace cuarenta años con la Constitución española y con la monarquía parlamentaria que representa el rey Felipe VI en la actualidad”.
Sobre el Brexit, Sánchez asegura que España está preparada para los posibles efectos adversos de una salida del Reino Unido de la UE sin acuerdo y que los “perjuicios” no serían “mayores que en otros países de la Unión Europea”. Ahora bien, se muestra abierto a “ampliar el plazo [que expira el 31 de octubre] para que el Gobierno y el Parlamento británicos puedan encontrar una salida”. “Pero, por el momento, la posición de la Unión Europea es la de atenerse al acuerdo que alcanzamos con el Gobierno británico, que no fue nada fácil”.