Pedro Sánchez aspira a intentar la investidura con un PSOE dividido
“Me pone enfermo. Se muestra otra vez que estamos muy divididos y que el Comité Federal fue tenso”. Así, enfadado, responde un miembro de la Ejecutiva del PSOE sobre la filtración de las intervenciones a puerta cerrada de algunos dirigentes territoriales durante el Comité Federal celebrado el pasado sábado y que ha publicado la Cadena SER. Las fuentes consultadas por eldiario.es coinciden en que el hecho de que las grabaciones vean la luz es perjudicial para el partido, pero existen distintas versiones sobre a quién beneficia o quién pierde más por su publicación a apenas 48 horas de que Pedro Sánchez se reúna con el rey que, según piensan en el Ferraz, le encargará intentar formar gobierno.
En las grabaciones se escucha a los dirigentes más críticos con la actual dirección socialista atacar con dureza a Podemos pero también al propio partido. Fue el caso de Susana Díaz, que mostró sus dudas sobre Pablo Iglesias y recordó a Pedro Sánchez que su candidatura ha cosechado el peor resultado de la historia. También el presidente asturiano, Javier Fernández, tuvo una intervención dura y llegó a decir, pocos días antes de que Sánchez acuda a Zarzuela convencido de que Felipe VI le encargará intentar sacar adelante su investidura, que tiene que pensar que “habrá elecciones”, es decir, que el PSOE no tendrá éxito para llegar a un acuerdo.
Ferraz ha salido al paso de la filtración a través de un comunicado en el que “lamenta” que se haya producido puesto que “contraviene” las normas del partido y sirve para “limitar la libertad de expresión” de los dirigentes durante el debate interno. Fuentes oficiales de la dirección evitan señalar quién ha podido llevar a cabo la maniobra, pero admiten que tiene una “intencionalidad”: “Mostrar un partido dividido y meter presión a Pedro Sánchez”.
“Se graban determinadas cuestiones para sesgar la información que quieren dar. Se corre el riesgo de sesgar las cosas pero algunos quieren dar esa visión”, expresa “preocupado” un miembro de la dirección, que asegura -sin mencionar directamente a los barones- que les interesa dar la “imagen de división”. Es la opinión compartida por fuentes oficiales, que destacan que no se han filtrado las intervenciones de aquellos que hablan, por ejemplo, “a favor de la consulta” a la militancia de los posibles pactos que alcance Sánchez en su camino hacia Moncloa. Miquel Iceta, Luis Tudanca o Idoia Mendía lo hicieron.
Enfado de los críticos: lo filtró Ferraz
Ese es precisamente el argumento del sector más crítico para apuntar a Ferraz como responsable de la filtración. Pero le dan la vuelta. “¿A quién perjudica?”, se pregunta un dirigente, convencido de que la publicación de esas intervenciones daña la imagen de los barones y que su difusión sale de la dirección. “La imagen que se trasmite es que hay dos 'PSOEs' y que ellos son los únicos de izquierdas”, dice en referencia a los fieles a Sánchez.
En las filas socialistas se ha producido a lo largo del lunes especulaciones sobre quién ha podido realizar la grabación. Algunas fuentes sostienen que el ruido que se escucha durante alguna de las intervenciones procede de fuera de donde se produce ese sonido. Otras fuentes creen que se ha podido grabar con un móvil la señal del circuito interno que retransmite la reunión.
En lo que coinciden todas las fuentes consultadas es en que la filtración evidencia la división en la que está sumido el PSOE y en que supone una pérdida de confianza a la hora de expresarse en los órganos internos. Eduardo Madina -uno de los miembros del Comité Federal de los que se ha publicado parte de su discurso- se refirió al iniciarlo a la filtración, apenas un mes antes, que publicó Antena 3: “La última vez intervine casi en abierto porque mi intervención terminó en manos de Gloria Lomana. Espero que hoy no pase”, expresó. Pero volvió a pasar.
“Es una barbaridad. El Comité Federal es secreto. Una cosa es contárselo a los periodistas y otra cosa es grabarlo”, expresa un dirigente madrileño, que coincide en que Sánchez sale ganando con la filtración porque “tiene que crear el discurso de que los malos son los otros”. “No beneficia a nadie porque perjudica al partido”, insisten fuentes oficiales de Ferraz. “Hay espacios en los que debes tener libertad, no estar condicionado por lo que pueda pensar la gente fuera”, reflexiona un dirigente, que considera que ese precepto era “sagrado” hasta ahora.
“Si se evita hacer una votación para no mostrar imagen de división es absurdo que se lance hacia fuera así”, agrega un miembro de la Ejecutiva en referencia a la decisión de Sánchez de recular en su intención de retrasar lo máximo posible el 39º Congreso ordinario, en el que se decidirá si sigue al frente del PSOE. La dirección admite que cedió al adelantar cerca de un mes el cónclave, como pedían las federaciones díscolas, para evitar una votación. Desde el sector más crítico sostienen que la dirección cedió porque “los números no le salían” y tenían posibilidades de perderla.