Pedro Sánchez da al PSOE la consigna de facilitar gobiernos progresistas. El secretario general ha comparecido cuando los resultados estaban prácticamente escrutados para reivindicarse como la “alternativa” al PP y el principal partido de la izquierda. Consciente de que en numerosos municipios y comunidades autónomas necesitará el apoyo de otras fuerzas para gobernar, el líder socialista ha dejado claro que su partido no será un inconveniente para propiciar el cambio a la izquierda: “Tenemos la responsabilidad de articular gobiernos progresistas”, ha expresado Sánchez, que ha dejado claro que los socialistas asumirán su “responsabilidad”.
En el PSOE se han tomado como una victoria la debacle que ha sufrido el PP, que pierde casi todas las mayorías absolutas. Ese resultado permitirá a los socialistas gobernar gracias a pactos a los que llegue con formaciones de izquierdas, fundamentalmente con Podemos. Pero el PSOE también tendrá que dar su apoyo a esos mismos partidos para desbancar a la derecha. Por ejemplo, en la capital tendrá que votar a favor de Manuela Carmena para evitar que Esperanza Aguirre sea alcaldesa.
El secretario general ha dejado claro que no será un impedimento para la formación de gobiernos progresistas. “Nuestra responsabilidad es articular gobiernos progresistas en el conjunto de las comunidades autónomas y ayuntamientos para un cambio seguro, que es con lo que nos hemos presentado los socialistas a estas elecciones”, ha sentenciado.
No obstante, ha aprovechado para recordar que el PSOE sigue siendo la primera fuerza de izquierdas “de manera clara y rotunda”. El partido, que pierde dos puntos y 700.000 votos respecto a las elecciones de 2011, ha conseguido frenar la caída al mejorar el porcentaje de sufragios de las europeas. “Nuestra organización, con la renovación de su proyecto, de su equipo y de sus candidaturas, ha recuperado casi dos millones de votos”, ha afirmado respecto a los comicios celebrados hace un año.
Los socialistas lograrán, además, aumentar su poder institucional. “Vamos a ser la primera fuerza en algunas comunidades y la segunda en la mayoría de las demás con opciones del cambio y el progreso que han votado los españoles”, ha asegurado Sánchez, rodeado de varios miembros de la dirección federal y de militantes que, finalmente, se han acercado a la sede de Ferraz.