Pedro Sánchez exigirá a Rajoy una cuestión de confianza si fracasa en los presupuestos y no convoca elecciones

Pedro Sánchez sube el tono contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. El líder socialista cree que tendrá que convocar elecciones en el caso de que los Presupuestos Generales del Estado no salgan adelante en el Congreso, pero este lunes la dirección del PSOE va un paso más allá: exige una cuestión de confianza al presidente si fracasa en la votación de las cuentas para 2018 y no adelanta las elecciones.

“Vivimos en una democracia parlamentaria –ha expresado Sánchez–. Si no puede presentar su principal ley tiene como obligación constitucional y para con la ciudadanía” convocar elecciones, según Sánchez, que considera que el siguiente paso si se niega debería ser “someterse a una cuestión de confianza”.

“Si la pierde, el señor Rajoy no tendrá ninguna excusa para no anticipar las elecciones”, ha sentenciado Sánchez. La cuestión de confianza depende de la voluntad del Gobierno, es decir, no la puede forzar la oposición.

“Es el presidente del gobierno quien tiene que ejercer sus responsabilidades, pasan por aprobar los presupuestos generales y no jugar a trampear con reales decretos leyes para prorrogar los presupuestos que ya han sido prorrogados”, ha dicho Sánchez. “Si no cuenta con la confianza de su socio de gobierno debe someterse a la cuestión de confianza”, ha afirmado el secretario general del PSOE, que considera, no obstante, que debería ser el propio Rajoy el que convocara elecciones.

“La realidad parlamentaria es la que es”

A pesar de que Sánchez ha dicho que la convocatoria de elecciones está “tasada” en la Constitución a partir de la cuestión de confianza, si el presidente no la supera, ha de presentar su dimisión ante el rey y, en ese momento, se activaría el procedimiento para una nueva investidura.

Sánchez lleva meses desechando la posibilidad de presentar una moción de censura contra Rajoy en el Congreso. Preguntado sobre su negativa a usar ese mecanismo para desbancar al presidente y que, en este caso, no dependería del Gobierno, Sánchez ha contestado con un escueto: “¿Porque los números no dan?”. “Lo importante es decir las cosas como son y no engañar a la ciudadanía. La realidad parlamentaria es la que es”, ha argumentado después.

Aunque inicialmente Sánchez ha asegurado que no descarta nada, ha insistido en que no va a coger ningún “atajo” y que no será presidente “a cualquier precio”. El líder socialista pone el énfasis en la necesidad de “una mayoría parlamentaria distinta para que pudiera gobernar este país”.

“Haremos una propuesta de gobierno seria, rigurosa y solvente para que los ciudadanos, cuando llegue el momento de las urnas, confíen”, ha dejado claro Sánchez sobre su intención de llegar a Moncloa exclusivamente a través de elecciones.

El líder socialista descarta apoyarse en los grupos independentistas para llegar a Moncloa, por lo que la única hipótesis que baraja para hacerlo es contar con el respaldo de Unidos Podemos y de Ciudadanos, que se demostró imposible hace dos años. Los socialistas ven ahora a Albert Rivera más alejado.

Sánchez redobla de esta forma la presión sobre el Gobierno y Ciudadanos, el socio de Rajoy que la dirección socialista considera debe retratarse. El secretario general sigue ignorando las encuestas que pronostican una importante subida de Ciudadanos.

“Queda mucho camino, ha aseverado Sánchez. ”Lo único que le puedo decir sobre estudios demoscópicos es que esto va a ser que hay dos derechas y una izquierda que son las que van a competir en las próximas elecciones generales“, ha dicho el líder socialista, que da a Pablo Iglesias por amortizado.

Acuerdo con Merkel: “Deseo que sea bueno para Europa”

Preguntado por el acuerdo que el SPD –partido de la familia del PSOE en Alemania– ha alcanzado con Angela Merkel, Sánchez ha mostrado su “respeto” hacia la decisión que ha ratificado el 66% de la militancia socialista alemana.

“Lo único que espero es que ese acuerdo sea bueno para Europa”, ha expresado Sánchez sobre la gran coalición que se mantiene así en Alemania.

Sobre el descalabro del partido democrático italiano, Sánchez ha cargado contra Mateo Renzi por la campaña desarrollada y ha acusado al su homólogo italiano de “negarse a presentarse como una izquierda”.