Primera aparición de los fichajes estrella de Pedro Sánchez ante los militantes del PSOE. Zaida Cantera e Irene Lozano han asistido al acto de presentación de los candidatos socialistas para el 20D apenas tres días después de que se conociera la llegada de la exdiputada de UPyD a las filas socialistas. Una entrada que no ha sentado bien en muchos sectores del partido, pero que el candidato a la Moncloa ha reivindicado: “En un momento en que dirigentes del PP dimiten o se avergüenzan, nosotros abrimos nuestro partido a independientes no indiferentes”.
“El PSOE es un enorme cauce por el que tiene que correr esta energía de distinta procedencia”, ha continuado Sánchez a quien en ese momento han interrumpido los aplausos de militantes que han acudido en autobuses desde distintos puntos de España al acto de presentación de los dirigentes que encabezarán las papeletas del PSOE en toda España. No obstante, Ferraz ha dejado fuera de la foto a la exdiputada de UPyD, que no ha subido al escenario con el resto de miembros que integrarán la lista por Madrid. Lozano ha admitido que dejó en manos de la dirección su ubicación y que dijo que le daba lo mismo figurar o no en la foto. Ferraz justifica que se ha quedado con el grupo de expertos.
Varios dirigentes han admitido que no ha sentado bien la llegada de Lozano. “El malestar ha sido por las formas no por el qué”, ha dicho la presidenta del partido, Micaela Navarro, a su llegada al mitin. Sin embargo, la poderosa federación andaluza se ha quejado de que Lozano se haya integrado en las listas tras sus “insultos” a Andalucía y a “miles de socialistas”. También Guillermo Fernández Vara ha exigido a la exdirigente de UPyD que pida “disculpas” por sus palabras sobre el PSOE. Lozano ha evitado a hacerlo y se ha limitado a decir que ha sido “beligerante con la corrupción como muchos socialistas”.
Ante esas críticas, Sánchez ha reivindicado también el pasado de su partido: “Las mejores páginas de la historia de España se han escrito con puño y letra socialista”, ha exclamado durante su discurso en el que le han interrumpido reiteradamente con aplausos. “Somos herederos del compromiso de miles de hombres y mujeres comprometidos -ha añadido-. No hemos avanzado a hombros de gigantes, hemos avanzado a hombros de miles de hombres y mujeres que se respetaron como nosotros nos respetamos con ganas de cambio”.
Hasta ahí la polémica por las listas. Mariluz Rodríguez, a quien Lozano ha desplazado del número cuatro por Madrid al uno por Guadalajara sí ha asistido este domingo, a pesar de que la maniobra ejecutada en la Comisión Federal de Listas no le ha sentado nada bien. La secretaria de Empleo de la ejecutiva federal no fue este sábado a la reunión del Comité Federal en el que se aprobaron definitivamente las candidaturas.
Sánchez repite estrategia americana
El candidato socialista ha vuelto a repetir parte de la escenificación de su presentación como candidato a la Moncloa, cuando apareció con una gran bandera de España detrás y se subió al escenario con su esposa. Gestos inéditos hasta entonces en el PSOE, inspirados en el marketing político americano, que fueron rechazados por un importante sector del socialismo. Lejos de evitar la bandera, Ferraz ha repetido la jugada repartiendo cientos de banderas de España -también de la UE y del partido- entre los militantes que han acudido a vitorear a su líder.
“Demos una calurosa bienvenida a Begoña Gómez y al futuro presidente del Gobierno, Pedro Sánchez”, ha anunciado el animador que conducía el acto. El candidato socialista ha entrado en el polideportivo entonces cogido de la mano de su esposa. Juntos han saludado a los asistentes y se han sentado para escuchar a Sara Hernández y Ángel Gabilondo, que ha recomendado a Sánchez no perderse: “Lo peor no es perder, es perdernos”, ha expresado.
Sánchez ha elegido el polideportivo Magariños, del club de baloncesto Estudiantes donde jugaba el secretario general, para la presentación de sus candidatos. Así ha comenzado su discurso: “Aquí di mis primeros pasos como jugador y aprendí el valor de formar parte de un equipo, de una gran familia. Aprendí que en el baloncesto, como la política como la vida misma, el equipo siempre está por encima del individuo”, ha advertido.
Solo dos presidentes le acompañan
Solo dos presidentes autonómicos, Emiliano García-Page y Javier Fernández, han acudido al acto de presentación de las candidaturas en el que ha habido muchas ausencias, incluidas las de barones regionales de peso. Solo los de Murcia, Ceuta y Melilla se han desplazado a Madrid.
Tras reivindicar el pasado y a los independientes, Sánchez ha cargado contra las políticas del PP. “El adversario de los socialistas no es otro que la injusticia de una sociedad en la que cada día más jóvenes, más mujeres, más mayores y más niños son condenados a la pobreza, a la exclusión y a la marginación -ha enfatizado-. Nos mueven las ganas de cambiar un Gobierno que asfixia con impuestos a los autónomos, a los pequeños empresarios y a la clase media trabajadora, mientras perdona los fraudes millonarios con amnistías vergonzantes”.
“La derecha ha utilizado esta crisis para imponer su ideología, la más extrema. La de la competitividad mediante los salarios bajos, la precariedad de los empleos y los recortes del gasto social”, ha reprochado Sánchez, que ha acusado al PP de poner a sonar las “trompetas de la propaganda”.
También ha defendido la propuesta de reforma de la constitución para “blindar los derechos sociales frente a los recortes” así como para convertir a España en un Estado federal y ha avisado: “No vamos a modificar la Constitución bajo la amenaza de los secesionistas, pero tampoco vamos a renunciar a mejorarla porque nos amenazan los secesionistas”.
El candidato del PSOE ha dedicado la última parte de su discurso a apelar a la “limpieza de las instituciones”: “Este país no podrá pasar la página de la corrupción hasta que el PP de Bárcenas, de Rato, de Granados, y de Rajoy, no pase a la oposición para renovarse y regenerarse. El PP debe perder las elecciones del 20 de diciembre, también por regeneración y limpieza democrática”. “Soy un político limpio que dirige un partido limpio y aspira a gobernar un gobierno limpio. Y quien se cruce en este propósito, ya sabe lo que le espera: tarjeta roja directa”, ha exclamado entre los vítores de los asistentes.