Pedro Sánchez se hace con una victoria histórica y recupera la secretaría general del PSOE tras su dimisión hace ocho meses. Con el 98,59% de los votos escrutados, Sánchez aventaja a Susana Díaz en diez puntos que se han mantenido durante todo el recuento. La presidenta andaluza ha felicitado al ganador de las primarias al filo de las 21 horas, cuando el resultado era claro.
Con el 98,59% de los votos escrutados, Sánchez alcanza un 50,21% de los votos frente al 39,93% de la presidenta andaluza, a quien ha ido aventajando en el recuento desde el principio: cuando el escrutinio estaba en el 50% Sánchez adelantaba a Díaz por ocho puntos (48%-40%). Patxi López se queda con un 9,86% de los sufragios.
El exdiputado consigue un resultado histórico al imponerse a la líder de la federación andaluza, la más poderosa del PSOE, que le ha dado allí su apoyo mayoritario, aunque Sánchez ha logrado un respaldo del 30%. También ha conseguido derrotar a los principales barones también estaban del lado de Díaz.
Sánchez ha vencido en casi todos los territorios, excepto en Andalucía y Aragón, con más del 70% escrutado en todos ellos.
Plebiscito de la abstención
El madrileño se hace de nuevo con el control del PSOE tras ocho meses apartado desde que dimitió al perder una votación en el Comité Federal en el que planteó precisamente un congreso para dirimir el liderazgo vinculado a la gobernabilidad. Él quería seguir adelante en su intento por llegar a Moncloa o ir a terceras elecciones frente a los barones más poderosos del PSOE, que comenzaron a abrir la puerta a la abstención.
La tesis de permitir el gobierno de Mariano Rajoy se decidió de forma mayoritaria en ese órgano y Sánchez renunció a su escaño. Ese mismo día anunció su intención de reconquistar el liderazgo del partido y oficializó su candidatura unos meses después. Desde entonces, ha estado convencido de que se impondría frente a quienes apoyaron la abstención “y dejaron el PSOE en tierra de nadie”.
Una militancia más movilizada que nunca le ha dado el apoyo mayoritario en lo que él planteó como un plebiscito entre su proyecto y el de los que favorecieron que el PP siguiera en el poder.
El líder socialista está a punto de celebrar su segunda victoria en unas primarias tres años después de vencer a Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias. En aquella ocasión el escenario era completamente distinto: era él quien contaba con el respaldo de los principales dirigentes del PSOE.
Militantes que apoyaban al exsecretario general se han acercado a la sede socialista en la calle Ferraz al grito de “se nota, se siente, Pedro presidente” y “sí es sí”, que ha sido el lema de la campaña.
Sánchez, que ha prometido dejar atrás “el PSOE de los notables”, tendrá que gestionar ahora ese resultado. Le queda por delante componer una ejecutiva en la que deberá integrar a los equipos de sus rivales para conseguir el respaldo a los órganos de dirección en el congreso del mes de junio, donde los 'aparatos' tendrán bastante peso en delegados.