Venezuela vuelve a ser un tema de debate en la política española. El PP ha conseguido los apoyos suficientes para promover en el Congreso una iniciativa no legislativa que instará al Gobierno a reconocer a Edmundo González como presidente electo del país latinoamericano. “Es un imperativo estratégico sobre todo después de la operación organizada por la dictadura y facilitada por Zapatero y el gobierno de España”, ha lanzado desde la tribuna la diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo para defender la proposición de su partido.
La iniciativa, que se ha debatido esta tarde, fue impulsada por el PP antes de que el Gobierno concediera el asilo al opositor venezolano, que llegó a España el domingo. El texto insta al Ejecutivo a que reconozca a González Urrutia como “legítimo ganador de las elecciones presidenciales” del 28 de julio. Con el apoyo anunciado del PNV, de UPN, Vox, PP y también de Coalición Canaria, la proposición saldrá adelante si no ocurre ningún imprevisto con 177 votos cuando se vote el miércoles en la Cámara Baja.
“Este reconocimiento se basa en la reiterada negativa de las autoridades electorales venezolanas a publicar los resultados en tiempo y forma, la publicación por parte de la oposición del 83.5% de las actas verificables que demuestran un categórico resultado electoral, y los pronunciamientos oficiales de instituciones internacionales como el Centro Carter, Naciones Unidas, y el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Seguridad”, dice la proposición no de ley.
Desde la tribuna, Álvarez de Toledo ha pronunciado un encendido discurso para explicar los diez motivos que fundamentan su exigencia. Entre ellos, ha defendido que la soberanía del pueblo “es sagrada” y que la “voluntad popular es el único punto de partida legítimo para una transición”.
Tras los comicios de Venezuela, el 28 de julio, el Consejo Nacional Electoral anunció con el 80% escrutado de los votos que Nicolás Maduro había vencido con un 51% por un 43% de la Plataforma Unitaria Democrática que lideraba González. No obstante, casi de inmediato la oposición denunció un fraude y publicó a los pocos días una recopilación de las actas de las mesas electorales que colocaban a González Urrutia como vencedor con el 67% de los votos.
Desde entonces, países del entorno como Brasil, Colombia, México o Chile han abierto vías de diálogo para una solución pacífica del conflicto entre Gobierno y oposición, entre pedidos al ejecutivo de Maduro para que publique las actas oficiales del recuento electoral, algo que no ha hecho por el momento. La Unión Europea y España han reclamado lo mismo, pero no han ido tan lejos como pide el PP, un paso que solo han dado algunos países como la Argentina de Javier Milei, Ecuador o Panamá.
“De Europa se espera mínima coherencia. [El ministro de Exteriores José Manuel] Albares reunió a sus colegas y decretó que no había ganado ni Maduro ni la oposición”, ha reprochado la diputada del PP durante el debate, que ha criticado que el Gobierno haya intentado buscar un punto medio. “Reconocer la victoria de González es tan urgente como defender la integridad terrritorial de Ucrania”, ha llegado a decir.
“España tiene una responsabilidad histórica y moral. Fuimos madre patria y hoy somos nación hermana y bisagra con Europa. Queremos para los venezolanos lo mismo que para nosotros: democracia y libertad”, ha insistido.
La iniciativa forma parte de la estrategia del PP de usar la actualidad en Venezuela para atacar al Gobierno. El partido pide desde hace semanas que el Ejecutivo reconozca al opositor como ganador de las elecciones del 28 de julio. Este domingo, tras conocerse que España había concedido el asilo a González Urrutia, el vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, criticó la medida humanitaria. “No es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura”, dijo.
Mientras se sucedía el debate en el hemiciclo, cientos de personas se han congregado a las afueras del Congreso en solidaridad con Venezuela, convocados en la tarde del lunes por la líder opositora María Corina Machado, entre gitos de “Venezuela, libertad” y “Se ve, se siente Edmundo presidente”. La hija de Edmundo González, Carolina, y el exalcalde de Caracas y exdiputado venezolano, también asilado en España, Antonio Ledezma, han seguido el debate desde la tribuna de invitados de la Cámara Alta.
Después de que se tratara el punto en el Congreso, varios diputados del PP han acompañado a la Plaza de las Cortes al opositor Leopoldo López y a Carolina González, que ha leído un comunicado de su padre. “Nuestra lucha durará hasta lograr los objetivos. No desmayen no les defraudaré”, ha prometido. Informa Carmen Quintela.
El PNV da su apoyo a la proposición
El apoyo del PNV es clave para que la votación de esta iniciativa salga mañana adelante. El PP conseguirá esta victoria parlamentaria después de convencer a los nacionalistas vascos y a Coalición Canaria, además del apoyo que se daba por descontado de Vox y UPN.
Su portavoz, Aitor Esteban, había anunciado por la mañana que apoyaría la moción porque ante la situación de Venezuela “no hay matices”. El diputado ha reconocido que este asunto se utiliza habitualmente “como ariete” en el Congreso, para “lanzarse dardos” y para “pelear” entre los dos grandes partidos y ha admitido también que suele ser el partido de la oposición el que lidera esa estrategia. No obstante, ha avanzado que su formación dará los votos para que el texto salga adelante porque “a nadie le queda duda a la vista de las actas que se han publicado de la victoria de la oposición”. “Maduro no ha hecho nada por demostrar lo contrario”, ha añadido.
El portavoz de los nacionalistas vascos ha señalado que apoyará el conjunto del texto, “si todo ocurre con normalidad”. “Siempre hay alguno que puede echar un tronco a la corriente”, ha dicho para avisar al PP de que se ciña a lo propuesto y no haga discursos “zafios” o “rebase determinadas líneas”, mirando más a la política interna, ha dicho, “que a la restauración de la democracia en Venezuela”.
El Gobierno afea al PP su iniciativa
El Gobierno, por su parte, ha afeado al Partido Popular que haya impulsado en el Congreso una iniciativa para el reconocimiento de González como presidente legítimo de Venezuela. “Esa propuesta tiene un objetivo claro: dividir. Y se salta la posición de todos los países de la Unión Europea”, ha dicho la ministra portavoz, Pilar Alegría.
La ministra ha insistido en que la postura del Gobierno sigue siendo la de “solicitar todas las actas, exigir transparencia”. “Lo que hacemos es apostar porque la democracia avance en Venezuela y atender a una solicitud de asilo humanitario”, ha planteado en referencia a la acogida al líder opositor en España.
El PSOE de hecho ha presentado una enmienda a la iniciativa del PP que, de facto, da la vuelta al sentido original del texto. En la modificación que proponen los socialistas, se insta al Gobierno a seguir trabajando en el seno de la Unión Europea para mantener una “posición común” y analizar en ese marco si el reconocimiento de González puede contribuir a una solución política en Venezuela o no.
También incluyen en ese texto un punto para que el Congreso apoye la concesión del asilo al opositor venezolano “por motivos políticos y humanitarios” y para que “se garanticen sus derechos políticos y su libertad de expresión”. Por último, el PSOE añade un punto que dificulta todavía más si cabe que el PP acabe apoyando esa nueva redacción: “Reconocer toda labor de mediación del presidente Zapatero para permitir la liberación de presos políticos y para tender puentes entre Gobierno y oposición e instar al Gobierno a facilitarla”.
El PP no aceptará la enmienda y el texto se votará en sus términos. La diputada socialista Cristina Narbona, que ha defendido la posición del PSOE en la tribuna, ha criticado la hipocresía del principal partido de la oposición al usar Venezuela, ha dicho, para sus intereses políticos en España. La portavoz ha recordado que en los Gobiernos de Pedro Sánchez España ha recibido a 125.000 venezolanos que ha solicitado asilo mientras que solo 125 lo hicieron durante el mandato de Mariano Rajoy.
“Señora Álvarez de Toledo. No es bueno generar expectativas falsas. No puede engañar a los venezolanos que nos acompañan haciendo creer que el simple reconocimiento hace desaparecer por encanto a Maduro. Ojalá fuera así. Tenemos la experiencia que vivimos con el señor [Juan] Guaidó, al que reconocimos sin ninguna utilidad”, ha dicho, para pedir por último no “instrumentalizar” a los venezolanos.
También Sumar ha señalado al PP sus incoherencias. “¿Condenó el PP con esta vehemencia el golpe de estado en Bolivia? ¿Condenó el asalto a las hordas bolsonaristas en Brasilia en 2023? Recuerdo las chanzas mientras se prendía fuego al palacio de Planalto”, ha dicho el portavoz del grupo plurinacional Gerardo Pisarello.
Un camino parecido ha seguido el portavoz de ERC, Gabriel Rufián. “2019. El PP dice que el PSOE se abraza al comunismo bolivariano. Almeida llama 'caudillo populista' a Sánchez. Noviembre de 2023, Hazte Oír pasea un autobús que dice 'Sánchez Dictador. Ayuso dice que el sanchismo es chavismo. Septiembre de 2024 Abascal dice que Sánchez es un tirano que debe acabar en el banquillo. ¿Por qué el líder de una dictadura chavista viene a exiliarse a otra dictadura chavista?”, se ha preguntado.
El portavoz de Podemos Javier Sánchez Serna ha criticado al PP por exhortar al Congreso a defender la democracia cuando “jaleó golpes de Estado en Perú y en Bolivia”. “Quieren hacer una operación Juan Guaidó 2.0. No vamos a ser ingenuos para sumarnos a las campañas de la derecha internacional que buscan que Venezuela vuelva a arder”, ha dicho.