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PSOE, Podemos y Ciudadanos enfrían el escenario de una mesa a tres para echar a Rajoy

Apenas unas horas han durado las expectativas sobre la mesa de coordinación parlamentaria anunciada este domingo por Pedro Sánchez y que se presentó como el primer paso para acabar con el Gobierno de Mariano Rajoy.  

Ciudadanos no tiene intención de sumarse a la propuesta, Podemos pide más concreción y el propio PSOE echa agua en ese vino: “No esperen ustedes ninguna liturgia especial en esos encuentros”, aseguraba Óscar Puente en su primera rueda de prensa como portavoz en Ferraz. 

En Podemos ha sido Pablo Echenique el encargado de las primeras reacciones. El secretario de organización de esa formación ha asegurado que “hay muy poca gente en nuestro país que vea a Ciudadanos como una fuerza del cambio”.  Pedro Sánchez dice estar dentro de esa “poca gente” y asegura que trabajará para conseguir que Iglesias y Rivera superen sus diferencias.

En Ciudadanos tampoco hay entusiasmo. Su portavoz, Ines Arrimadas, se preguntaba este lunes si esa mesa está pensada para “destruir todo lo que hay”. En la formación de Rivera no quieren volver a aquellos primeros meses de 2016, en los que Sánchez hacía números para llegar a la Moncloa buscando el apoyo de Ciudadanos y Podemos. Ha pasado el tiempo y la empatía ya no es la misma. Según Arrimadas, en el PSOE no hay un plan: “Hay que tener un proyecto de futuro para todos los españoles y está claro que el PSOE ni lo ha tenido ni lo tendrá”.

El excepticismo no es ajeno al propio PSOE. En su grupo parlamentario no ven tan claros que los primeros pasos hacia La Moncloa se estén caminando sobre ese anuncio: “Es imposible convencer al socio de Rajoy para que entre en una mesa que tiene como objetivo cargarse a Rajoy”, asegura un diputado sin cargos de responsabilidad en la nueva dirección socialista.  

Con este panorama de enroque infinito todas las miradas se vuelven una vez más a los partidos independentistas. Esta vez el PSOE ha sido claro cuando se le ha preguntado si estas formaciones tendrán sitio en la mesa de Sánchez. Según Óscar Puente, “El PSOE no se plantea sustentar una alternativa de Gobierno en ellos”.

En ERC están dispuestos a empujar un cambio de Gobierno, siempre que el derecho a decidir esté sobre la mesa. En declaraciones a eldiario.es, Joan Tardá asegura: “Estamos dispuestos a explicar al PSOE las veces que haga falta por qué la mayoría del pueblo de Catalunya quiere votar. Diálogo todo, pero dejando clara nuestra posición con respecto al referendum”.  

La propuesta del nuevo líder socialista parece condenada a una nueva secuencia de bloqueo retransmitida en prime time. Pedro Sánchez insistirá este martes en su plan de encontrar una mayoría alternativa a Rajoy y así lo trasladará en la reunión de su grupo parlamentario. 

En nuevo líder del PSOE es el primero en la historia que no es diputado. Las negociaciones y reuniones servirán a Sánchez para dejarse ver por el Congreso por lo menos hasta que llegue el verano.