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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

La Policía cierra sin castigo la investigación al mando que invitó a Billy el Niño a su comisaría

La presencia del policía jubilado Antonio González Pacheco, conocido como Billy el Niño, en una celebración que tuvo lugar en la comisaría del distrito madrileño de Ciudad Lineal no tendrá consecuencias disciplinarias para el mando que cursó la invitación. La información reservada abierta al comisario José Manuel Mariscal de Gante, a raíz de que se publicara la noticia, ha sido archivada de plano sin llegar siquiera a abrirse un expediente, han revelado a eldiario.es fuentes policiales.

La fotografía de Billy el Niño en la celebración del último Día de la Policía de la comisaría de Ciudad Lineal, el 4 de octubre de 2018, provocó un escándalo. De inmediato, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ordenó la apertura de una investigación, de la que se encargaría la Jefatura Superior de Madrid. Su servicio de Régimen Disciplinario abrió una información reservada y la archivó al poco, al considerar que la actuación de Mariscal de Gante no encaja en ninguna de las faltas recogidas en el Reglamento de la Policía.

Por tanto, la investigación preliminar se quedó en eso, en una información reservada abierta y cerrada casi de inmediato. Los indicios de falta disciplinaria hubieran obligado a abrir un expediente que debería haber concluido con una propuesta de sanción o de archivo. Mariscal de Gante no pudo ser cesado por Grande-Marlaska porque su destino al frente del distrito de Ciudad Lineal responde al concurso general de méritos y no es de libre designación.

El ministro había dado instrucciones al director general de la Policía, Francisco Pardo, quien a su vez ordenó la apertura de la información reservada a la Jefatura Superior de Madrid, que encabeza el comisario Jorge Manuel Martí, un nombramiento del anterior Gobierno. Mariscal de Gante incluyó a Billy el Niño en las invitaciones a la celebración de los Ángeles Custodios en su comisaría al igual que hizo con otros mandos jubilados, según explicaron en su momento desde la Dirección General del Cuerpo.

Izquierda Unida solicitó la comparecencia de Grande-Marlaska “de forma urgente” en el Congreso para explicar lo sucedido. El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, exigió por su parte que el comisario Mariscal de Gante fuera cesado de inmediato. El ministro del Interior abogó dos días después por que el expediente se tramitara “conforme a las normas del procedimiento” y decidir entonces “lo que oportunamente” resolviera la investigación interna.

Un policía de la transición

José Manuel Mariscal de Gante tiene 63 años, por lo que le quedan dos para jubilarse. Ingresó en el Cuerpo durante la transición, en julio de 1979, pero no se convirtió en comisario hasta hace tres años. Antes de hacerse cargo del distrito de Ciudad Lineal, uno de los más grandes de Madrid, estuvo al frente de la Policía en Ibiza. El comisario es hermano de Margarita Mariscal de Gante, ministra de Justicia con José María Aznar y actualmente consejera del Tribunal de Cuentas por designación del Senado en el Departamento Segundo, que se encarga de enjuiciar los posibles incumplimientos de los órganos fiscalizados.

A cinco semanas de las elecciones generales, el Gobierno no ha encontrado la fórmula para retirar las condecoraciones, algunas pensionadas, que recibió estando en activo Billy el Niño. Ante la presión de Podemos, Pedro Sánchez anunció en octubre pasado, poco después de la visita del presunto torturador a la comisaría de Ciudad Lineal, que el Gobierno trabajaba “de manera intensa” para introducir los cambios legales que permitieran la retirada de la medalla lo antes posible y con seguridad jurídica.

El policía tampoco ha pagado en los tribunales las brutales torturas que describen sus víctimas. El recurso a la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad que recogían las querellas presentadas en Argentina naufragaron en la Audiencia Nacional. Cuando el juez Pablo Ruz llamó a declarar a González Pacheco en diciembre de 2013, la Policía le reservó una estancia del tribunal especial hasta que el juez le llamara. A la salida, un veterano miembro de la Comisaría General del Poder Judicial, le acompañó a la salida, le abrió la y le dio una palmada antes de que Billy el Niño se introdujera en un coche camuflado de la Policía para abandonar el lugar rápidamente.

eldiario.es publicó recientemente el historial del policía franquista y las recompensas económicas que recibía por la detención de presuntos terroristas o simples activistas estudiantiles. Era en el marco de esas operaciones en las que se producían las torturas que denuncian las víctimas.