El largo debate finalizó con la intervención de los numerosos grupos que integran el Grupo Mixto, que se tuvieron que repartir el tiempo, al igual que la Izquierda Plural.
El portavoz de Amaiur, Miquel Errekondo, no solo cargó contra Rajoy por el caso Bárcenas sino que aprovechó para lanzar sus proclamas independentistas para Euskadi. Antes, denunció las mentiras de Rajoy y aseguró que “el sistema político está en manos de ladrones de guante blanco con licencia para robar” que confunden “el estado de Derecho con el estado de cohecho”. Errekondo también sacó a ‘pasear’ el caso Gal, y los indultos a Barrionuevo o del exgeneral de la guardia civil Rodríguez Galindo, liberados, dijo, por este “Estado corrupto”.
Alfred Bosch, de ERC, ironizó sobre la posibilidad de que Rajoy sea “un marciano” si no se enteró de los fechorías que hacía Bárcenas, y, si las sabía, opinó que entonces es “cómplice” de sus delitos.
La portavoz del BNG, Olaia Fernández, acusó al presidente de acudir al pleno “a la defensiva, sin argumentos creíbles y negando la mayor”. Para la portavoz gallega, Rajoy ya no está “legitimado” para seguir exigiendo “austeridad y sacrificios a los ciudadanos” por lo que le pidió que se vaya y “de paso, que disuelva el PP”.
Pedro Quevedo, en nombre de Coalición Canaria, también arremetió contra el presidente al que le dijo que había perdido casi toda su “credibilidad”, afirmando que algunos de sus argumentos “ofenden la inteligencia de los ciudadanos” y son “un insulto para los que lo están pasando mal”.
Joan Baldoví, representante de Compromís-Equo, opinó que Bárcenas ha “abierto las alcantarillas del PP” porque se siente “abandonado” por Rajoy y su propio partido, pidiendo también su dimisión inmediata, al igual que hizo después la portavoz de Geroa-Bai, Uxue Barkos, para la Bárcenas es “solo la punta del iceberg” de la corrupción que cree que hay en el PP.
En defensa, o mejor dicho, en el ‘no ataque’ a Rajoy, se situaron, por el contrario, los portavoces de Foro Asturias, Enrique Álvarez Sostres, y de UPN, Carlos Salvador. El asturiano se limitó a hablar de su comunidad sin entrar a fondo en el debate sobre el extesorero. Y Salvador deseó que “las graves acusaciones” que ha lanzado Bárcenas sobre el presidente del Gobierno queden al final “en insidias sin fundamento”.Dirigiéndose a Rubalcaba, Salvador le reprochó su “doble moral y vara de medir” en los casos de corrupción que afectan al PSOE. El portavoz de UPN apoyó la continuidad del presidente porque “un capitán no abandona el barco en plena tormenta ni lo deja a la deriva”, lo que mereció los agradecimientos de Rajoy.