Tras la polémica generada, el PP y el PSOE han decidido dar un paso atrás en algunos de los puntos que conformaban su criticado acuerdo contra el terrorismo. Por la vía de la autoenmienda parlamentaria, los dos principales partidos han modificado la redacción del artículo 573 bis del Código Penal para despejar las dudas que, según la redacción inicial, parecían indicar que un escrache podría ser perseguido penalmente como terrorismo.
En el primer texto pactado por ambas formaciones, el Código Penal aumentaba las penas a los delitos de desórdenes públicos sin aclarar su naturaleza. La ambigüedad de esa redacción daba a entender que cualquier desorden público o intimidación de un cargo político podría ser considerado como terrorismo.
Ahora ambas formaciones han reaccionado a las críticas y a través de una modificación parlamentaria plantean que solo será terrorismo un desorden impulsado por un grupo terrorista o por alguno de sus miembros.
Las dos formaciones han conseguido llegar al acuerdo que matiza lo que Rajoy y Pedro Sánchez firmaron en Moncloa. El entendimiento final entre los dos principales partidos se ha alcanzado al límite del plazo marcado por el Congreso para presentar enmiendas. Al PP y al PSOE solo les han sobrado una decena de minutos para llegar a tiempo al registro de la Cámara, donde se registran este tipo de iniciativas.