El Partido Popular cuenta con Rita Barberá y acaba de confiarle un puesto de responsabilidad en dos comisiones de vital importancia para la vida parlamentaria. La exalcaldesa de Valencia será vocal en la Comisión Constitucional y ocupará el mismo puesto en la Comisión de Economía.
Barberá ya ocupó esos cargos en la anterior legislatura en la que, además, formó parte de la Diputación Permanente. Sobre esta segunda decisión, el PP prefiere ahora esperar a que el Supremo decida si abre investigación contra la exalcaldesa de Valencia antes de volver a garantizarle el aforamiento ante los tribunales, aún en escenario de disolución de las cámaras.
El PP hará efectivos los nombramientos para Barberá en la reunión de la Junta de Portavoces prevista para este martes. El PP, sabedor de que la polémica acompaña a cualquier decisión sobre la exalcaldesa, ha decidido congelar otra decisión importante: la elaboración del listado de senadores que seguirán aforados aún cuando se convoquen nuevas elecciones.
“Hemos decidido no constituir la Diputación Permanente porque no tiene ninguna urgencia ahora”, asegura una fuente del grupo popular en el Senado. “Tomaremos la decisión cuando se clarifiquen las cosas”.
Rita Barberá espera que esta semana el Tribunal Supremo se posicione sobre la querella de la Fiscalía que pide la apertura de una investigación contra ella por la supuesta financiación irregular del PP en Valencia. Fuentes jurídicas consultadas por eldiario.es aseguran que en los próximos días el alto tribunal decidirá si admite a trámite la petición de la Fiscalía contra la veterana política del PP.
Mientras tanto, Barberá tendrá nuevas tareas en el Senado pero seguirá sin saber si su grupo confía lo suficiente en ella como para volver a incluirla en el reducido grupo de senadores que forman parte de la Diputación Permanente.
Con esa decisión en el congelador, el PP se prepara para hacer que el Senado empiece a trabajar a pleno rendimiento. Para el próximo día 27 está previsto que se convoque el primer pleno de la legislatura y en octubre es previsible que se celebren otras dos sesiones.
Barberá ha mantenido hasta el momento una posición discreta y alejada de sus compañeros para apartar al PP de la polémica que la persigue. Con sus nuevas responsabilidades en el Senado, la exalcaldesa de Valencia tendrá que participar de las reuniones previstas para constituir las comisiones de las que formará parte.
En el grupo popular del Senado preocupa y mucho la cuestión Barberá. Así lo asegura a eldiario.es uno de sus máximos dirigentes: “Lo de Rita no es un tema fácil”.