“Confiamos en que la empresa sea responsable”, ha manifestado en rueda de prensa Pedro Puy, en la que ha indicado que “una de las paradojas que se producen a veces en este mundo globalizado”, es que las grandes multinacionales “no tienen en cuenta algunos preceptos que están aceptados en la mayor parte de países occidentales”, incluida España.
Se ha referido a la convención de que “la empresa no sólo cumple un fin primario”, que es retribuir a los accionistas, sino también “una función social”.
A ello, ha sumado la “paradoja” de que estas multinacionales atienden intereses de accionistas, que en “muchos casos” son fondos de pensiones de “otros países”.
Así las cosas, ha esperado que la empresa “sea responsable” desde el punto de vista de los accionistas, pero “también desde el punto de vista de la incidencia social”. En este sentido, ha advertido de que autoexcluirse de la puja sería “algo ciertamente lamentable”.