La sesión de investidura de Pedro Sánchez comenzará el 2 de marzo
La primera sesión de la investidura de Pedro Sánchez será el 2 de marzo. Es la fecha que han determinado el candidato del PSOE y el presidente del Congreso, Patxi López, en una reunión celebrada a primera hora de esta mañana en las dependencias de la Cámara Baja. El debate será el miércoles y la primera votación de la investidura será el jueves 3 de marzo, según ha explicado López, con lo que la segunda votación será el sábado 5 de marzo.
Para salir investido en la primera votación, Sánchez necesita mayoría absoluta, un resultado improbable. Si no lo logra, 48 después de ese Pleno se tiene que celebrar otro en el que debe obtener mayoría simple -más síes que noes- para situarse en Moncloa. En el caso de que no lo consiga, se abre un periodo de dos meses para que pueda haber un presidente. El rey podría hacer el encargo a distintos candidatos. Si en ese plazo ninguno consigue la mayoría para ser presidente, se disolverían las Cortes y 54 días después se repetirían las elecciones, según establece la ley electoral. Con este calendario, la disolución de las cámaras sería el 3 de mayo y la celebración de los comicios, el 26 de junio.
“El 2 de marzo se cumple un mes exacto”, ha dicho López sobre el tiempo que va a tener Sánchez para negociar con el resto de formaciones desde que recibió el encargo del rey de formar Gobierno. Según ha expresado, al candidato socialista “le ha parecido razonable” el planteamiento que ha hecho el presidente del Congreso, que ha comunicado al resto de fuerzas con presencia en la Mesa del Congreso la propuesta que ha acordado con Sánchez.
Es al presidente del Congreso a quien corresponde convocar el Pleno de la investidura. López se comprometió en la reunión de la Mesa del Congreso del pasado martes a “intentar” llevar una fecha concreta para la investidura. Ese compromiso se produjo después de que el PP exigiera que se adelantara la sesión al 22 de febrero en un intento por presionar al candidato socialista en las negociaciones. Podemos también pidió que la investidura fuera “cuanto antes”. Todas las formaciones con representación en la Mesa coincidieron en la necesidad de fijar una fecha determinada para limitar la “incertidumbre”. Desde que recibió el encargo del rey, Sánchez pidió entre tres semanas y un mes para poder negociar con el resto de partidos.
El PSOE quería retrasar lo máximo posible la fecha de la investidura para tener mayor margen para las negociaciones. En Ferraz manejaban que la sesión pudiera celebrarse en la segunda semana de marzo. Pero ese calendario habría provocado que, en el caso de que ningún candidato sacara adelante la investidura, las elecciones se retrasaran hasta el primer domingo del mes de julio.
Los plazos se han complicado para los socialistas porque, una vez que Sánchez alcance un posible acuerdo para llegar a Moncloa, debe someterlo al visto bueno de la militancia. Ese referéndum requiere un mínimo de cuatro días desde que el candidato del PSOE llegue al pacto con el resto de fuerzas, según el calendario que aprobó la dirección socialista el pasado jueves.
En esos cuatro días, los afiliados tendrán dos para votar exclusivamente online y otro para hacerlo a través de Internet y en urna en las agrupaciones del partido. Al día siguiente de la jornada de votación -que previsiblemente será en el fin de semana del 27 y el 28, aunque Ferraz descartó el segundo para “respetar” el Día de Andalucía- se celebrará una reunión del Comité Federal para que ratifique el resultado de la consulta.