La portada de mañana
Acceder
Feijóo confía en que los jueces tumben a Sánchez tras asumir "los números"
Una visión errónea de la situación económica lleva a un freno del consumo
OPINIÓN | La jeta y chulería de Ábalos la paga la izquierda, por Antonio Maestre

El PSOE no modificará la autodeterminación de género en sus enmiendas a la ley trans

La dirección del PSOE y el Gobierno trabajan estos días al más alto nivel el detalle de las enmiendas que se presentarán a la conocida como ‘ley trans’. Según ha podido confirmar este periódico, los socialistas no plantearán en ninguna de esas enmiendas que se modifique el derecho de autodeterminación de género, uno de los puntos que había suscitado las críticas de una parte del propio PSOE y del movimiento feminista. 

Tal y como recoge el texto que fue aprobado por el Consejo de Ministros, por tanto, desde los 16 años cualquier persona trans podrá cambiar la mención registral del sexo en el registro sin necesidad, como hasta ahora, de someterse a tratamientos de terapia. A partir de la aprobación de la ley el proceso consistirá en acudir a registro, realizar la solicitud y en un plazo máximo de 4 meses tendrá que estar resuelta. 

Las enmiendas parlamentarias del PSOE estarán enfocadas principalmente al artículo 65 del anteproyecto, concretamente el que menciona la aplicación de la ley de violencia de género, puesto que la mayor preocupación en las filas socialistas tiene que ver con la equiparación de otras formas de violencia con la violencia de género. 

El PSOE ha acelerado en los últimos días la negociación interna de las enmiendas que va a presentar ante la presión del Ministerio de Igualdad y la profunda herida que le está generando a Pedro Sánchez en el partido. La división presiona a Sánchez en dos direcciones: por un lado, los partidarios de la ley trans, que abogaban por sacarla adelante tal y como está y que han ganado la partida frente a un importante sector del feminismo del propio partido, que rechaza la autodeterminación de género.

El enquistamiento por la ley trans es el más profundo que atraviesa Sánchez desde que recuperó la secretaría general del PSOE en 2017 y ha llegado a tal punto que hay denuncias cruzadas ante la Comisión de Ética y Garantías por posicionamientos de distintos dirigentes, entre ellos Carmen Calvo y el secretario de Políticas LGTBI, Víctor Gutiérrez, relativas a este asunto.

En los trabajos previos sobre la ley, se planteó la posibilidad de introducir elementos como testigos para el cambio registral del sexo, que finalmente se descartaron. En la cúpula socialista también chirriaba lo relacionado con los menores. Pero quedará en los mismos términos, de acuerdo a las conversaciones que por ahora han mantenido los responsables del grupo parlamentario con Moncloa. De esta forma, para los menores de 16 años y hasta los 14 años será necesario el consentimiento paterno, de menos de 14 años y hasta los 12, se podrá iniciar el cambio con un proceso de jurisdicción voluntaria que emprenderán los padres y madres o tutores legales.

La idea ahora es que se concreten pronto esas enmiendas y que se cierre un acuerdo cuanto antes entre los grupos parlamentarios y los socios de coalición del Ejecutivo, desbloqueándose por tanto los trámites parlamentarios para la aprobación de la ley que, de esta forma, podría ver la luz verde antes de final de año, como pretendían en Unidas Podemos y el Ministerio de Igualdad.