PSOE, PP y Coalición Canaria, los partidos más beneficiados por los sistemas electorales autonómicos desde 2018

Raúl Sánchez

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La victoria de Moreno Bonilla en las elecciones autonómicas de Andalucía en 2022 se recuerda por la mayoría absoluta de los populares que les permitirá gobernar en solitario hasta 2026. Sin embargo, esta mayoría en el parlamento andaluz no existe en los votos.

En esas elecciones, los populares consiguieron el 53% de los escaños con solo el 43% de las papeletas: una prima en escaños de casi 10 puntos.

¿Es este caso la tónica o la excepción de las leyes electorales autonómicas? ¿Se repiten estos casos más en unas comunidades que en otras? Para descubrir cuáles son los sistemas electorales regionales más injustos, elDiario.es ha analizado los resultados electorales de las 182 elecciones autonómicas que se han celebrado en democracia. Para medir cómo de injusto es cada sistema electoral, hemos calculado las diferencias entre el porcentaje de escaños y el porcentaje de votos obtenido por todos los partidos que se presentaron en cada elección.

Los datos, obtenidos del archivo histórico electoral de la Generalitat Valenciana, incluyen solo los partidos que obtuvieron escaño o que sumaron más del 3% de los votos en esos comicios. ¿Qué candidaturas se han llevado las mayores primas en las últimas elecciones?

PSOE, PP y Coalición Canaria son los partidos más beneficiados por los sistemas autonómicos en el último ciclo electoral, iniciado en 2018. Una situación que coincide con que habitualmente han sido los partidos más votados en las elecciones a las que se han presentado. Pero las distorsiones se han repetido durante años.

En las autonómicas de Canarias en 2015, Coalición Canaria fue tercera fuerza en votos (por detrás de PSOE y PP) y, sin embargo, fue la primera en número de escaños. En Galicia, el PP lleva cuatro legislaturas seguidas gobernando con mayoría absoluta (desde 2009) aunque en ninguna de las cuatro elecciones ha sumado más del 50% de los votos.

Al otro lado de la baraja, Izquierda Unida, Podemos y Ciudadanos repiten casi siempre entre los más perjudicados. Los morados se quedaron sin un solo escaño en los comicios autonómicos de Castilla-La Mancha (2019), Galicia (2020) y Cantabria (2019) con el 7%, 4% y 3,4% de los votos, respectivamente. Pero no están solos. El 6% de los votantes que se decidieron por Ciudadanos en Canarias en 2015 se quedaron sin representación. Tampoco el 5% que votaron por Vox en Extremadura en 2019.

Esta distancia entre partidos sobrerrepresentados e infrarrepresentados en los parlamentos regionales se agudiza más en unas autonomías que en otras. Por ejemplo, Murcia, Castilla-La Mancha, Canarias y Castilla y León son las comunidades que más distorsionan la conversión de votos en escaños. En estas autonomías, la diferencia media entre el porcentaje de escaños y de votos de cada candidatura está por encima de los 3 puntos, como se ve en el siguiente gráfico.

¿Por qué algunos sistemas electorales autonómicos distorsionan más que otros los votos que se depositan en las urnas? A diferencia de unas elecciones generales, que utiliza la misma ley electoral para todo el territorio nacional, cada comunidad utiliza su propio sistema.

Por un lado, la fórmula de d'Hondt para hacer el reparto de escaños es uno de los elementos comunes que tienen todos los sistemas electorales autonómicos. Este método tiende a favorecer a los partidos más votados en la asignación de asientos parlamentarios frente a otros sistemas similares como Sainte-Laguë.

Es decir, en todas las comunidades los partidos más votados suelen ser los más beneficiados por el sistema electoral. Madrid es uno de los ejemplos más claros: a pesar de que reparte 135 escaños (en 2021, 136) en una única circunscripción, la relación entre porcentaje de voto y diputados no es exacta y en todas los comicios hay partidos más beneficiados que otros.

En algunas comunidades, como Madrid o Canarias, las barreras electorales también son clave en los resultados electorales. Por ejemplo, si Podemos en Madrid no supera el 5% de los votos, no entrará en el reparto de escaños. En Canarias, Ciudadanos se quedó fuera del reparto de escaños en 2015 ya que no superó la barrera del 6% de los votos en todo el archipiélago o el 30% en la isla. El nuevo sistema electoral que se utilizó en las elecciones de 2019 redujo este obstáculo al 4% de los votos en toda Canarias y el 15% insular y el partido naranja pudo entrar en el parlamento.

Una de las principales causas de las distorsiones entre votos y escaños en cada autonomía está en el número de circunscripciones (cada una de las divisiones territoriales que elige diputados) y su tamaño. Es decir, las comunidades que reparten muchos diputados en una única circunscripción tienden a ser más proporcionales que las que reparten pocos diputados en muchas provincias o islas.

Precisamente, son Canarias y las Castillas las comunidades que eligen menos diputados en cada circunscripción. ¿Por qué es clave? Porque es mucho más difícil que los terceros, cuartos o quintos partidos consigan escaño en zonas que reparten 3, 4 o 5 diputados.

Muchas veces, estas circunscripciones más pequeñas suelen elegir más diputados que los que les corresponden por población. Esta distorsión a favor de las zonas y regiones menos pobladas se repite en prácticamente todos los sistemas electorales en España y sirven para garantizar que determinadas áreas menos habitadas tengan representación parlamentaria y que las políticas públicas no se concentren exclusivamente en las grandes urbes con muchos habitantes.

Castilla-La Mancha es la comunidad con menos representantes por circunscripción. Desde la última reforma de la ley electoral manchega durante el Gobierno de Cospedal, cada una de las cinco provincias escoge de media 7 diputados de las Cortes.

¿Qué consecuencias tienen estas distorsiones? Que a veces se pueden crear mayorías parlamentarias que no existen en los votos. Además de la mayoría absoluta del PP en Andalucía, los socialistas García-Page y Fernández Vara gobiernan con mayoría absoluta en Castilla-La Mancha y Extremadura con el 44% y el 47% de los votos, respectivamente.

Desde 1980 hasta la actualidad, los sistemas electorales autonómicos han favorecido 37 mayorías absolutas de un solo partido que no existían en las urnas. Esto es, candidaturas que consiguieron mayorías para gobernar sin necesidad de pactar con otras fuerzas políticas pero que no sumaban más del 50% de los votos. De estas 37 mayorías, 16 se registraron en las últimas dos décadas.

Estos sistemas electorales serán clave en las próximas elecciones autonómicas del 28M y que podrían decantar la balanza por un Gobierno de izquierdas o derechas en alguna de las 12 comunidades que eligen a los representantes de sus parlamentos autonómicos.

Ya en 2019 dos comunidades autónomas modificaron sus sistemas electorales para reducir la distorsión entre votos y escaños: Canarias y la Región de Murcia. ¿El resultado? La representatividad mejoró mucho.

En el caso canario, la principal novedad es que se añadió una nueva circunscripción regional que escogió 9 diputados. Es decir, los canarios emitieron dos votos para elegir a sus representantes en el Parlamento de Canarias: uno por la isla y otro por toda Canarias. Esta nueva circunscripción mejoró la representatividad de las islas grandes (Tenerife y Gran Canaria), que representan el 80% de la población pero solo elegían hasta ese año el 50% de los escaños.

La Región de Murcia había sido hasta 2019 autonomía con más distorsión entre votos y escaños. Hasta 2015, en la región se repartían los escaños en cinco circunscripciones inferiores a la provincia (caso excepcional junto a Asturias) que premiaron a los partidos con más implantación en las zonas rurales. Primero PSOE y después el PP.

¿Qué cambió en las últimas elecciones? La reforma electoral aprobada por PSOE, Podemos y Ciudadanos en 2015 introdujo una circunscripción única y baja las barreras del 5% al 3%. El resultado está en los datos: fueron las elecciones con la mejor relación entre votos y escaños de la historia de la autonomía.

Entonces, ¿cuáles son los partidos que tienen todas las cartas para ser favorecidos por las leyes y el sistema electoral de cada autonomía? Busca tu comunidad autónoma y descubre cuáles han sido las candidaturas más beneficiadas y perjudicadas en todas las elecciones regionales celebradas en democracia.