Rajoy niega que busque amordazar las protestas: “Es garantizar la libertad”
El anteproyecto de ley de seguridad, renombrada por la oposición como “de la patada en la boca” ha protagonizado la sesión de control cuando el Gobierno de Mariano Rajoy cumple dos años. Joan Coscubiela y Alfredo Pérez Rubalcaba han reprochado al presidente en el Congreso que trate de “amordazar a los ciudadanos” como respuesta a las protestas en la calle contra sus políticas. Rajoy lo ha negado tajante. Él prefiere decir que busca “garantizar la libertad”.
Primero el de Izquierda Plural y luego el socialista, ambos han incidido en que dos años después hay más desigualdad y pobreza extrema que afectan gravemente a los parados sin ingresos y también a los hogares en los que solo entra un sueldo, como en el caso de las madres que mantienen a sus hijos solas. “Es especialmente cruel con los más débiles porque pretende que las víctimas se conformen y, si se movilizan, les amenazan”, le ha reprochado Coscubiela.
La respuesta de Rajoy a esas críticas ha sido la misma: “Según ustedes no hay nada que funcione bien en España y no me aportan ideas”. El presidente ha asegurado que sabe que la gente “lo está pasando mal” pero “el sistema funciona”. Después, en declaraciones en los pasillos tras el Pleno, ha transmitido su agradecimiento a los ciudadanos que viven “momentos de dificultad” y ha prometido que todo irá “un poco mejor”. Sus promesas de mejora de la situación económica no han convencido a la oposición, que denuncia la necesidad urgente de los ciudadanos más pobres que no tienen tiempo para “cuentos de la lechera”.
La foto de la cola del paro
La destrucción de un millón de puestos de trabajo ha hecho que a Rajoy se le volviera a recordar en el debate la ya famosa portada de El Mundo en la que aseguró “Cuando gobierne, bajará el paro”. Rubalcaba le ha echado en cara que no se atreva ahora a hacerse una nueva foto ante la oficina de empleo: “Habría más parados pero usted los quiere calladitos y adormecidos, no vaya a ser que le recuerden sus promesas incumplidas”.
Las memorias publicadas por el exministro Pedro Solbes han servido para que el Gobierno atice al PSOE con ellas. La vicepresidenta ha aconsejado a Soraya Rodríguez que se las lea. “Al menos nosotros no decimos que no nos enteramos de la crisis porque no llegaron los papeles de Solbes”, se ha burlado Sáenz de Santamaría. A cambio, la socialista ha recomendado a la número dos de Rajoy que se preocupe de “coordinar a los ministros para evitar espectáculos” como el protagonizado por José Ignacio Wert a cuenta de las becas Erasmus.