Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Rajoy reivindica volver a la legislación de 1985 sobre el aborto

EFE/eldiario.es

Madrid —

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reivindicado en el Congreso la propuesta de Alberto Ruiz-Gallardón de volver a la ley del aborto de 1985. El presidente ha defendido que es un derecho del PP reformar la ley conforme a la de hace casi 20 años pero ha matizado que contiene “algunas modificaciones”.

Rajoy ha ofrecido ese diálogo en respuesta a una pregunta de Alfredo Pérez Rubalcaba en la sesión de control al Gobierno en el pleno del Congreso y que ha supuesto su primer cara a cara parlamentario sobre este asunto, en el que el secretario general del PSOE ha advertido de que se pretende discriminar a las mujeres con recursos de las que no los tienen y “sacrificar su libertad por un puñado de votos de la extrema derecha”.

El jefe del Ejecutivo ha recordado a Rubalcaba que la ley en vigor fue aprobada en 2010 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero sin que fuera previamente en el programa electoral socialista y sustituyó a la que se puso en marcha en 1985 también por otro Ejecutivo del PSOE.

Esa ley de 1985 ha recordado que fue ratificada por el Tribunal Constitucional y que el PP optó por no modificarla durante el Gobierno de José María Aznar “en aras del consenso”. Rajoy ha recordado que su partido llevaba la modificación de la ley actual en su programa electoral con el fin de volver “en lo sustancial” a la ley de 1985.

Tras recordar a Rubalcaba que estuvo en el Gobierno durante muchos años con la ley de 1985 vigente y señalar que los socialistas parecían estar “muy cómodos con ella”, se ha preguntado por qué esa norma impulsada por el PSOE era buena entonces y no lo es ahora cuando la plantea el PP.

“Me parece que tiene usted una vara de medir bastante extraña”, ha reprochado Rajoy a Rubalcaba, a quien ha pedido que no se crea en posesión de la verdad porque, de hecho, cree que “ha tenido dos verdades”, la que defendió en 1985 y la que defiende desde 2010.

Por ello, ha interpretado que todos los reproches que le ha realizado por defender la primera de esas leyes se los ha hecho Rubalcaba a sí mismo durante veinticinco años.

“Esta ley (la reforma planteada) es la de 1985 con algunas modificaciones, como que la mujer no tendrá reproche penal nunca, una menor de edad tendrá que contar con el conocimiento de sus padres y se establece la necesidad de ofrecer un asesoramiento social y clínico acerca de las alternativas y sus consecuencias”, ha explicado.

Aunque ha reiterado a Rubalcaba su oferta de diálogo y de acuerdo, le ha advertido de que no está dispuesto a que él pretenda prohibir al PP presentar un proyecto de ley porque está legitimado para ello por las urnas.

El líder del PSOE ha recordado que en materia de interrupción del embarazo hay dos modelos, plazos y supuestos, y la diferencia entre ambos es que en el primero de ellos decide la mujer y, en el segundo, alguien decide por ella.

Para él, la ley vigente ha homologado España a Europa, no ha planteado ningún tipo de dificultad social y ha propiciado una disminución de los abortos en España.

Tras reprochar a Rajoy que ahora pretenda retroceder “a una ley más restrictiva que la de 1985”, ha señalado que ésta funcionó durante veinticinco años pero fue modificada para dar seguridad jurídica a las mujeres, adecuar la ley al cambio social en España y recoger algunas sugerencias como la de la Organización Mundial de la Salud.

“Ahora quieren separarnos de Europa, aunque hay mujeres a las que se va a acercar a Europa, aquellas que tengan recursos para moverse a algunos países y seguir utilizando una ley de plazos”, ha subrayado.

Tras esa reflexión, Rubalcaba ha llegado a la conclusión de que el Gobierno discrimina: “Si tienes dinero, plazos; si no, supuestos. Si tienes dinero, decides tú; si no, alguien decide por ti. Y si te dicen que no, tienes que apechugar con un embarazo indeseado o ir a la clandestinidad y jugártela”.

Por ello, ha pedido a Rajoy que no prive a las mujeres españolas de su libertad de decidir y no imponga “una moral de algunos al conjunto de los ciudadanos”.