El presidente del periódico La Razón, Mauricio Casals, reunió a Ignacio González y a Edmundo Rodríguez Sobrino, consejero de su mismo diario, la mañana del 18 de abril, justo un día antes de la detención de ambos, según informa ABC. Casals estuvo investigado en un primer momento dentro de la operación Lezo, pero su caso fue posteriormente sobreseído privisionalmente y sus actuaciones archivadas.
La cita se produjo en un céntrico y lujoso hotel de Madrid en el que se suele alojar Casals cuando visita la capital, próximo al Congreso de los Diputados. El juez instructor, Eloy Velasco, tras saber que iba a existir el encuentro, autorizó que los investigadores la controlaran y grabaran. De ese modo se descubrió que se llevaría a cabo en un salón de la suite de Casals.
El hecho de que tuviese lugar en un sitio privado dificultó la operación de los especialistas del Instituto Armado, que además tuvieron noticia de ella solo un día antes, siempre según cuenta ABC. Por esos motivos, pudieron instalar dispositivos de grabación, pero sin demasiada preparación y en lugares poco adecuados, por lo que los documentos de audio son de muy mala calidad. Actualmente están siendo tratados en laboratorios de la Guardia Civil para limpiar el sonido.
Tanto Casals como González y Rodríguez Sobrino fueron preguntados en su declaración judicial por esta reunión. Según ABC, el presidente de La Razón comentó con ironía que hablaron “de asuntos de hombres”. El presidente de la Comunidad de Madrid había anulado una cita médica para poder acudir al hotel.
Eloy Velasco imputó a Casals y al director de La Razón, Francisco Marhuenda, por las presiones a Cristina Cifuentes para proteger a Edmundo Rodríguez. El juez acordó días después “desinvestigar, sobreseer provisionalmente y archivar las actuaciones” contra ellos, entre otras razones, porque Cifuentes dijo en su declaraciones por escrito que no se había sentido presionada por los directivos del periódico.