Centenares de integrantes del colectivo Rebelión Científica se han manifestado este miércoles frente al Congreso de los Diputados dentro de la semana de protesta que se desarrolla en todo el mundo ante la pasividad de gobiernos, empresas e instituciones para luchar contra la emergencia climática. Un grupo de jóvenes ha arrojado pintura roja contra la fachada principal del Congreso y después se han sentado al otro lado de la Carrera de San Jerónimo, en la Plaza de las Cortes.
Minutos después, decenas de antidisturbios han acudido al lugar, han arrastrado a una parte de los manifestantes, que se han resistido pacíficamente a las órdenes de desalojo, para reunirlos a todos y proceder a su identificación.
Las acciones de protesta mundiales vienen precedidas de la publicación de un nuevo informe del Panel Científico de la ONU (IPCC), que advierte de la irreversibilidad del calentamiento global y de las consecuencias que provocará para todo el Planeta si no se toman medidas drásticas y urgentes: “Es ahora o nunca”. Las conclusiones son claras: hay que recortar ya y drásticamente las emisiones de CO2 porque, al ritmo actual, la costra gaseosa hará imposible limitar el calentamiento global a 1,5ºC, tal y como se han comprometido los países e indican los científicos que es el umbral tolerable.
Las acciones ocuparán toda la semana. En España ya se han producido el lunes y el martes, y este miércoles ha llegado al Congreso, donde se celebra la habitual sesión de control al Gobierno. Un par de centenares de personas se han concentrado frente a la puerta principal que flanquean los icónicos leones. Después, un grupo de ellos ha subido las escalinata y ha lanzado pintura roja contra la fachada como símbolo de la “extinción climática” a la que está condenada la humanidad si, tal y como dicen los expertos, no se ponen medios contra el calentamiento global.
Después, han trasladado la protesta a la Plaza de las Cortes, donde han coreado consignas contra la inacción de los gobiernos, las empresas y las instituciones. En ese momento, media docena de furgonetas de la Unidas Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional, han llegado con un gran despliegue de sirenas y material antidisturbios a reducir, levantar en volandas y arrastrar al último grupo de manifestantes, que se han resistido de manera pacífica, hasta encapsularlos y proceder a su identificación.
En el operativo policial han participado decenas de agentes. En el momento de la identificaciones había más antidisturbios que manifestantes. Se han producido momentos de tensión tanto con los jóvenes que protestaban como con la prensa que intentaba documentar lo que estaba ocurriendo. Unos y otros han recibido empujones y gritos pese a la ausencia absoluta de violencia más allá de la acción policial.
Una de las personas que ha participado en la protesta es profesor a la Universidad Autónoma de Madrid Jorge Riechmann, quien ha explicado a elDiario.es que más allá del sexto informe del IPPC, la humanidad arrastra “decenios en la dirección equivocada en una suerte de huida hacia adelante que concluye en una tierra inhabitable, infernal”. Este doctor en Ciencias Políticas ha lamentado que no haya manifestaciones masivas, como las que sí se produjeron antes de la pandemia provocada por el coronavirus dentro de los llamados Fridays for Future.
A la protesta se han sumado algunos diputados. El primero, el portavoz de Alianza Verde y diputado de Unidas Podemos, Juan López de Uralde. El que fuera director de Greenpeace Europa se ha sentado con uno de los grupos de manifestantes, que han aprovechado para recriminarle la pasividad que también detectan en las instituciones para atajar el problema. Entre las quejas, la poca ambición de la recientemente aprobada Ley de Cambio Climático y Transición Energética.
Después han acudido otros representantes de Unidas Podemos, como Sofía Castañón, Antón Gómez Reino o Lucía Muñoz Dalda. También el portavoz de Más País, Íñigo Errejón. A todos ellos, los manifestantes les han recriminado lo que consideran una labor poco fructífera en la consecución de los objetivos climáticos, y les han pedido que no se erijan en portavoces de la protesta, aunque ninguno ha hecho declaraciones a los medios más allá del debate mantenido entre Uralde y algunos de los activistas, que ha sido grabado por las cámaras.