La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha evitado explicar por qué el Partido Popular ha sacado del programa de la la Convención Nacional que celebra este fin de semana en Valladolid los temas polémicos que dividen al partido, como el aborto. Preguntada si no sería el foro adecuado para debatir este tema que ha despertado críticas en el seno del partido, la vicepresidenta se ha escudado en su presencia tras la mesa de la rueda de prensa del Consejo de Ministros para evitar dar una respuesta.
Sáenz de Santamaría ha manifestado que debe “mantener la neutralidad en cuanto a los actos de los partidos” y ha emplazado a los periodistas a preguntar estas cuestiones a “los distintos miembros del Partido Popular que allí estemos”. Ni el aborto, ni la vuelta de la religión gracias a la LOMCE, la pobreza infantil, los desahucios, la violencia de género o la pobreza energética tienen cabida en el programa que el PP ha elaborado para la convención que arranca este viernes.
Sáenz de Santamaría ha demostrado sentirse incómoda con la ley que ha impulsado Alberto Ruiz-Gallardón y que ha eliminado el aborto como un derecho de las mujeres. Numerosos dirigentes del PP, como José Antonio Monago o Cristina Cifuentes, han rechazado el texto mientras otros se han mostrado prudentes ante la reforma, que está a la espera del pronunciamiento del Consejo de Estado y que aún no ha llegado al Parlamento. El propio Mariano Rajoy admitió que el anteproyecto de ley sufrirá cambios para encontrar el consenso. En la misma línea se pronunció el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, al señalar que el debate parlamentario concluiría con la introducción de “mejoras” al texto.
“Apoyo solidario” a Gallardón
Toda la oposición y las organizaciones feministas han rechazado la reforma. Incluso las encuestas determinan que la postura del PP respecto al aborto le debilita electoralmente. Ante esta situación, la vicepresidenta también se ha puesto de perfil y ha evitado defender rotundamente el proyecto de su compañero en el Consejo de Ministros. Sáenz de Santamaría se ha limitado a decir que la polémica iniciativa impulsada por Gallardón tiene “el apoyo del presidente y nuestro apoyo solidario”.
Consciente del rechazo social e incluso interno que ha provocado la restricción del derecho, la vicepresidenta ha apuntado que, ante los asuntos de “esta naturaleza”, los dirigentes del Ejecutivo deben ser “muy conscientes” de las “opiniones y de las sensibilidades” que hay sobre un tema controvertido como es la interrupción voluntaria del embarazo.
El aborto sí estará presente
El intento de la dirección del Partido Popular de evitar los asuntos problemáticos durante la convención parece que no servirá en el caso del aborto: hay convocadas hasta seis manifestaciones para hacer llegar las protestas ciudadanas al cónclave en el que se reunirán 2.500 miembros del partido, casi todos elegidos a dedo por Génova.
De hecho, el 'Tren de la libertad' que ha salido de Gijón con destino Madrid, hará una parada en Valladolid para protestar ante el auditorio Miguel Delibes. Allí se juntarán con manifestantes locales y los procedentes de Euskadi. Al día siguiente, los sindicatos y colectivos feministas que han organizado la iniciativa partirán hacia Madrid, donde harán extensiva su protesta este sábado. A la cita asistirán incluso mujeres de Francia.