El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, dará vía libre a los 'barones' territoriales de su partido para que entablen los pactos que hagan posible gobernar en las comunidades y ayuntamientos tras las elecciones del 24 de mayo.
Sánchez ha transmitido esta directriz durante una conversación informal con periodistas en el autobús de campaña del PSOE de camino al mitin en la localidad madrileña de Fuenlabrada. El líder socialista no es partidario de sellar “pactos generales” que puedan condicionar las alternativas para gobernar que se puedan dar tras las urnas.
Por ello, se inclina por dar margen a las distintas federaciones para que puedan llegar a acuerdos “puntuales” en función de los resultados y de las particularidades de cada territorio, según ha explicado el dirigente socialista, con la única salvedad de que no llegará a acuerdos de gobierno con PP y con Bildu.
Esta postura supone autorizar acercamientos y eventuales alianzas con Ciudadanos o con Podemos, las dos fuerzas que, previsiblemente, van a ser la llave de muchos gobiernos autonómicos y locales, de acuerdo con las encuestas.
Sánchez cree que es preciso “gestionar la realidad” y asumir que el escenario que se abrirá tras el 24M ante la entrada en las instituciones de nuevos partidos obligará al diálogo y a un nueva cultura de pactos.
La estrategia flexible de alianzas se formalizará en el Comité Federal, el máximo órgano del PSOE entre congresos, que se convocará después del 24 de mayo.
No obstante, en la práctica ya se está desarrollando, como en el caso de Andalucía, donde la presidenta en funciones, Susana Díaz, ha determinado por sí misma su política de acercamientos, pese a que aún no ha logrado un compromiso de investidura.
En relación con Andalucía, Sánchez emplazó ayer, sábado, a Podemos y Ciudadanos a “perder la virginidad” y facilitar la gobernabilidad en Andalucía, en vez de primer sus intereses partidistas. “En política, hay que mojarse, decidir, y perder la virginidad y, aunque las decisiones cuesten votos”, dijo Sánchez en una entrevista en La Sexta.
Las únicas líneas rojas que la Ejecutiva federal ha trazado en materia de acuerdos es que no pactará con el PP en ninguna institución, ni tampoco con Bildu en el País Vasco o Navarra mientras que la izquierda abertzale no condene lo que representó ETA.
También en Asturias, Sánchez afirmó el pasado viernes que no pactará con Foro Asturias, la fuerza que lidera Francisco Álvarez-Cascos, por representar valores parecidos a los del PP.
Aunque la última encuesta del CIS solo da la victoria al PSOE en Extremadura y Asturias, en Ferraz están convencidos de que obtendrán un buen resultado en buena parte de las regiones y ayuntamientos que le permitirá tener opciones de gobierno apoyándose en otros partidos.
El PSOE estará dispuesto a negociar con aquellos partidos que estén de acuerdo con ejes esenciales de su programa como la regeneración democrática, la defensa de las políticas públicas y la recuperación económica en beneficio de las clases medias y trabajadoras.