Sánchez promete más impuestos a los ricos y una financiación autonómica que duplique el fondo de solidaridad

Con la legislatura varada en el Congreso por la falta de apoyo parlamentario de Junts, Pedro Sánchez ha querido mandar este miércoles un mensaje de optimismo respecto al futuro de su mandato y de su acción de Gobierno. “Hay Gobierno para largo. Si algo ha aprendido este ejecutivo es a navegar con el viento en contra. Y aprovecharemos el tiempo como siempre hemos hecho”, ha dicho durante el acto de apertura del curso político en el Instituto Cervantes.

Sin entrar al detalle, el presidente del Gobierno ha esbozado algunas de las líneas maestras en las que basará la acción del Ejecutivo durante los próximos meses. Sánchez ha anunciado, por ejemplo, reformas en materia fiscal que profundicen en un reparto más equitativo de los impuestos.

“Vamos a seguir avanzando hacia una fiscalidad más progresiva, con impuestos que graven más a quienes más tienen y orienten el modelo productivo. Pondremos en marcha nuevas acciones destinadas a acotar los privilegios desproporcionados de ciertas élites y a gravar fiscalmente a quienes ya tienen en el banco suficiente dinero para vivir cien vidas. Lo haremos, insisto, no para perjudicar a los millonarios, sino para proteger a las clases medias y trabajadoras de un sistema injusto”, ha prometido. 

El presidente no se ha referido de manera explícita al pacto fiscal alcanzado entre el PSC y ERC que implica la reforma de la financiación catalana y del conjunto de territorios, pero sí ha dedicado buena parte de su discurso a señalar las políticas fiscales de los gobiernos del PP como las verdaderas causantes de la desigualdad territorial y a prometer que la reforma, aún sin detallar, será una garantía de solidaridad interterritorial.

“La descentralización es perfectamente compatible con garantizar la solidaridad y equidad entre territorios, y con garantizar la suficiencia de recursos, siempre y cuando los gobiernos autonómicos asuman una mayor corresponsabilidad fiscal. De hecho, les aseguro, me comprometo a que con la reforma que propondremos, todas las Comunidades Autónomas del país recibirán más recursos de los que recibieron mientras gobernaba el PP”, ha asegurado. 

Sánchez ha señalado que el objetivo de esa reforma es “duplicar los recursos de la principal herramienta de solidaridad que recoge nuestra Constitución, que es el Fondo de Compensación Interterritorial”, de modo que la igualdad de recursos entre territorios quede garantizada.

El líder del Ejecutivo ha repasado durante su discurso la política financiera de su Gobierno respecto a los recursos de la Comunidades Autónomas en comparación con la última administración central del PP en manos de Mariano Rajoy. “En estos siete años, el Gobierno de España habrá transferido a las Comunidades Autónomas un total de 935 mil millones de euros; esto es, 300 mil millones más (un 32%) de lo que transfirió el Gobierno de Rajoy en el mismo lapso de tiempo. Nosotros estamos cumpliendo. El problema está en que las autonomías gobernadas por la derecha no han dedicado esos recursos a los ciudadanos. Los han dedicado a aumentar los contratos de unas pocas empresas, y a financiar sus regalos fiscales a los más ricos”, ha señalado. 

“Piensen, por ejemplo, en el caso de la Comunidad de Madrid”, ha proseguido. “Entre 2018 y 2023, la comunidad madrileña recibió casi 100.000 millones de euros del Gobierno de España. Un 21% más de lo que le transfirió el Gobierno de Rajoy. Pero, al mismo tiempo, sus recortes de impuestos, siempre dirigidos a beneficiar a las rentas más altas, redujo los ingresos de Madrid en 31.000 millones de euros. Dicho de otro modo: de cada 10 euros que el Gobierno de España le ha dado a la Comunidad de Madrid para mejorar la vida de los madrileños, el Gobierno regional ha usado 3 para hacer regalos fiscales a los ricos”, criticó.

Sánchez también refrendó la idea de que el Ministerio de Hacienda ya trabaja para presentar en el Congreso de los Diputados un proyecto de Presupuestos Generales del Estado aún en el caso de que no consiga amarrar los apoyos parlamentarios necesarios para sacarlos adelante. Y anunció que el próximo martes, el Consejo de ministros aprobará de nuevo el techo de gasto para volver a remitirlo al Parlamento. 

El presidente del Gobierno se comprometió además a volcar gran parte de la acción de su Ejecutivo a intentar paliar el grave problema de acceso a la vivienda en toda España. Y anunció que la Conferencia de Presidentes prevista para el mes de septiembre en Cantabria se centrará en la discusión de medidas estructurales dirigidas en esa dirección.

“Queremos que nuestros jóvenes se emancipen a edades más tempranas. Por eso, en los próximos meses vamos a hacer más. Impulsaremos nuevas medidas destinadas a ampliar el parque público de vivienda, perseguir la especulación, fijar un mejor equilibrio entre la actividad turística y el bienestar de los residentes, y lograr que la vivienda sea un derecho de todos y no el negocio de unos pocos”, ha planteado.

Pedro Sánchez también ha adelantado su intención de celebrar reuniones bilaterales en el Palacio de la Moncloa durante las próximas semanas con todos y cada uno de los presidentes y presidentas autonómicas.