Pablo Cambronero deja Ciudadanos y pasará a integrarse en el Grupo Mixto del Congreso de los Diputados. “Es la decisión más difícil que he tomado. He pedido integrarme en el Grupo Mixto del Congreso para defender el programa electoral que firmé. No me integro en ningún grupo político, haré lo que prometí hacer. Gracias a Ciudadanos por haberme dado tanto este tiempo”, ha dicho Cambronero en su cuenta de Twitter.
La renuncia del diputado nacional se suma a otras bajas importantes en el partido tras la moción de Murcia y el anuncio de elecciones anticipadas en la Comunidad de Madrid.
De este modo, el grupo parlamentario de Ciudadanos se queda con nueve escaños en la Cámara Baja.
“Mi único objetivo es defender todo aquello que siempre he defendido en libertad, y es lo que voy a hacer el tiempo que me quede en política. Firmé un compromiso con un programa electoral, y ese contrato no lo voy a incumplir”, dice en un escrito que él mismo ha compartido. “No puedo pertenecer a un partido, mejor dicho, ponerme a las órdenes de una dirección de partido que en plena pandemia dedica su tiempo a realizar estas estrategias o pactos que no comparto -en referencia a la moción de censura en Murcia-. No puedo justificar ni defender algo en lo que no creo. Si veo corrupción, denuncio y me aparto”, explica sobre su decisión.
El Grupo Mixto del Congreso cuenta actualmente con nueve diputados de siete partidos políticos distintos: UPN, la CUP, Coalición Canaria, Nueva Canarias, Foro Asturias, Partido Regionalista Cántabro (PRC) y Teruel Existe.
Ciudadanos ha exigido al diputado que devuelva su acta. “Tras conocer la renuncia del diputado de Ciudadanos, Pablo Cambronero, la formación naranja exige al exdiputado que entregue su acta por coherencia personal y respeto a los principios éticos, así como en cumplimiento de lo establecido en el artículo 10.3 de los Estatutos y del compromiso asumido en su Carta Ética y Financiera, documentos que recogen el compromiso de dejar el acta si causan baja en el partido por cualquier motivo”, ha indicado el partido a través de un breve comunicado.
“El grupo parlamentario de Ciudadanos en el Congreso seguirá trabajando y defendiendo su proyecto para velar siempre por el interés general de los españoles, hacer política útil e impulsar reformas que consigan que en nuestro país triunfen la unión y la concordia frente a la división y el enfrentamiento”, concluyen en su nota.
Los primeros en reaccionar a la dimisión de Cambronero han sido Ignacio Aguado y Edmundo Bal. El primero ha dicho en Twitter que es evidente que su partido “esta sufriendo un ataque por tierra, mar y aire”. “Pretenden aniquilar el centro político para entregar España a la polarización y los bandos. La libertad, la honestidad y el sentido común ni se compran ni se venden. Se defienden. ¡Vamos Ciudadanos”, ha dicho el exvicepresidente de la Comunidad de Madrid.
Edmundo Bal ha sido más crítico en declaraciones a la SER: “Teodoro García Egea ha organizado jornadas de puertas abiertas para los tránsfugas, las condiciones se pactan en oscuros despachos y reservados de restaurantes”.
Este martes dos diputados de la Asamblea de Madrid, Sergio Brabezo y Marta Marbán, se dieron de baja como afiliados del partido. Brabezo criticó “la deriva insensata” del partido y también que, según su opinión, Arrimadas haya cerrado en falso la crisis del partido “sin ninguna autocrítica”. Marbán anunció que abandona Ciudadanos porque no se “identifica” con lo que esta pasando en el partido. “Lo que no se comprende no se defiende”, manifestó.
Fran Hervías, que hasta ahora ocupaba un escaño en el Senado y había llegado a ser número 3 del partido en la etapa de Rivera, anunció el pasado fin de semana que dejaba su escaño y el partido, y fichaba por el Partido Popular alegando que “es el único proyecto que puede ganar a Sánchez”.
Otra de las renuncias fue la del coordinador de Ciudadanos en Valencia, Toni Cantó, que dejó todos sus cargos en el partido y criticó a la dirección por no asumir lo ocurrido en Murcia. Cantó aseguró que iba a retomar su carrera como actor.
Esta cadena de movimientos en el seno del partido de Inés Arrimadas se ha producido tras el intento fallido de sacar a López Miras del Gobierno de Murcia a través de una moción de censura en la Región, que fue dinamitada por los tres diputados tránsfugas de Ciudadanos, que primero firmaron la moción y luego acordaron con el PP tumbar la maniobra de su propio partido junto al PSOE. Los tres exdiputados de Ciudadanos, Valle Miguélez, Francisco Álvarez e Isabel Franco, forman hoy parte del Gobierno de López Miras.