“No vamos a hacer el canelo, en el Congreso vamos a hablar en castellano”. Con esta frase, el diputado vasco y portavoz de la dirección del PP, Borja Sémper, descalificó el lunes en rueda de prensa la reforma para permitir usar las lenguas autonómicas oficiales en el Congreso. Un día después, este martes, fue el encargado de fijar la posición de su partido ante este cambio del reglamento desde la tribuna de la Cámara Baja. Y lo hizo en una intervención en la que pronunció unas frases en euskera que inmediatamente después tradujo al español.
Su discurso soliviantó a algunos de sus compañeros de filas y ha tenido eco este miércoles en la prensa conservadora, que ha dirigido sus críticas contra el diputado, ante lo que el parlamentario ha tratado de defenderse. “Me he jugado la vida por ser del PP”, ha dicho en una entrevista en Onda Cero, donde participó durante años como tertuliano.
El dirigente ha reiterado, como ya hiciera tras el Pleno, que su intención era poner de relieve que en el Congreso ya se podían usar las lenguas oficiales autonómicas desde la tribuna, siempre que se hiciera de forma limitada y los oradores se auto tradujeran. “Yo creía que era brillante”, ha dicho, para asegurar que el contenido del discurso era conocido, y aceptado, por Alberto Núñez Feijóo.
“Quería evidenciar que las lenguas de los territorios no son patrimonio de los nacionalistas e independentistas”, ha sostenido a preguntas de Carlos Alsina. Sobre las críticas internas anónimas, Sémper ha señalado: “Cuando eres portavoz de una materia así, hay gente que dice que le parece mal, bien o que no lo comparte”. “Nosotros no somos el PSOE, no expulsamos a la gente”, ha dicho en varias ocasiones a lo largo de la entrevista.
Preguntado expresamente por los posibles “enemigos” que pueda tener dentro del PP, Sémper ha tirado de su historia personal en el País Vasco, donde fue amenazado por ETA: “Me siento absolutamente cómodo en el proyecto político que impulsa Feijóo. Me siento muy cómodo en el PP, que es mi casa de toda la vida. Me he jugado la vida por ser del PP. Mi vínculo es emocional, porque por ser del PP me han querido matar”.
Sémper ha anticipado además que la UE no aceptará como lenguas oficiales el catalán, el vasco o el gallego. “En la UE las lenguas oficiales son las que son oficiales en los países miembros. Es materialmente imposible, según los tratados de la UE y según los países que forman la UE, que lenguas cooficiales de una parte de los territorios sean lenguas oficiales de la UE”.
Sémper volverá a la tribuna
La dirección nacional de Feijóo respalda al dirigente y el discurso que hizo, y volverá a confiar en Sémper para defender este jueves las enmiendas del PP a la reforma del Reglamento, y ratificar el rechazo del partido a que se puedan usar el catalán, el euskera o el gallego con traductores simultáneos.
Las explicaciones de Sémper llegan tras las críticas internas y externas. Federico Jiménez Losantos, una de las voces destacadas de las mañanas conservadoras, ha utilizado la actuación del PP en el debate sobre las lenguas para pedir el “despido” de parte del núcleo duro de Génova, incluido Sémper, al que se refirió como “Borjita”, pero también de la portavoz parlamentaria Cuca Gamarra, el coordinador general, Elías Bendodo, y el vicesecretario Institucional, Esteban González Pons. Son dirigentes a los que Losantos se refiere como los ‘sorayos’, en alusión al sector supuestamente moderado que encarnaba Soraya Sáenz de Santamaría.
Durante una de sus intervenciones, el locutor afirma que ha procurado “no hacer demasiada sangre” con Sémper, pero afirma después que su intervención “exuda sorayismo, es quedar bien”. “Tú tienes que quedar bien ante tus votantes, no ante la [cadena] Ser, ante tus paisanos de Ordicia. Vuelvo a lo de siempre, a la tesis de mi libro… Es que desprecian a sus votantes”, ha afirmado Losantos antes de pedir a Feijóo un cambio de estrategia con un nuevo “equipo de oposición” que vaya “a la yugular” con Cayetana Álvarez de Toledo al frente.
También hay alusiones a la actuación de Sémper en el editorial de El Mundo. El periódico de Unidad Editorial afirma que el portavoz del PP pretendía hacer ver que esa práctica ya estaba permitida y que el euskera es también patrimonio de los no nacionalistas, pero sostiene que “lanzó un mensaje equívoco y contradictorio”.
Más contundentes se muestran otros articulistas de la prensa más conservadora. Ramón Pérez Maura firma en El Debate un artículo titulada “Borja Sémper, ese estadista”, en la que afirma que “todo lo sensato que el PP había hecho en este día” lo “derribó” Sémper cuando “rompió a hablar en vascuence”. “¿Se puede ser más incongruente?”, se pregunta Pérez Maura, que afirma que desde que Núñez Feijóo le incorporó a su equipo “éste se ha caracterizado por hacer declaraciones que molestan a su base electoral tradicional y, por lo visto el 23 de julio, no parecen cosechar nuevos votos”.
“Sería muy conveniente que explique a su electorado y a los votantes que no parece que esté seduciendo, qué sentido tuvo ayer que Gamarra empezara denunciando el uso de las lenguas que no son cooficiales en Madrid, y terminase Sémper empleando el vascuence que él mismo se tradujo al español. En ese punto, a nadie pudo sorprender que la mayoría de la Cámara rompiese a reírse… de él. Un estadista, insisto”, concluye Pérez Maura.
La intervención de Sémper “hablando en euskera en el Congreso en el momento menos indicado” también centra parte del artículo de Pilar Cernuda en The Objective, titulado ‘Me he hecho guerrista’. Fue, a juicio de la periodista, una “escena” que “nunca tendría que haberse producido” y que Cernuda atribuye a la “falta autoridad en el PP”, que “se vio cuando los dirigentes regionales negociaban pactos de gobierno con Vox y se ve estos días de incertidumbre”.
Hablar gallego no es “hacer el canelo”
A media mañana, la secretaria general del PPdeG, Paula Prado, ha reivindicado que los populares gallegos “aman” el idioma y que “no” consideran que hablarlo sea “hacer el canelo”. Con todo, en declaraciones recogidas por Europa Press, Prado ha evitado críticas Sémper por usar esta expresión, y ha diferenciado este sentimiento del debate abierto sobre el uso en el Congreso de las lenguas oficiales, que ha identificado con una “política de distracción” del PSOE, que ha repudiado.
“Nosotros amamos el gallego, respetamos el gallego y compartimos el uso cordial del gallego, lo hacemos todos los días. Lo que entendemos es que usar el pinganillo para entenderse entre personas que hablan el mismo idioma es una medida de distracción para que no se hable de otras cosas”, ha esgrimido, en declaraciones a los medios en la sede autonómica del partido.
Sin embargo, el pasado 13 de septiembre el PP votó en el Parlamento de Galicia en contra de una iniciativa para respaldar el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso.