El Tribunal Supremo no da por zanjada la batalla legal por el ascenso de Dolores Delgado a la máxima categoría de la carrera fiscal. La sala tercera acaba de anunciar la anulación del proceso con el que el fiscal general ejecutó la sentencia que tumbó el nombramiento de Delgado como fiscal de sala de lo militar, alegando que retomó el proceso en un punto distinto al que le habían ordenado. El mismo aspirante al puesto que recurrió el ascenso de Delgado es quien recurrió también la ejecución de la sentencia, quejándose de que el proceso había permitido examinar de nuevo todas las candidaturas. Finalmente fue nombrada la fiscal Isabel Rodríguez, que defendió ante el Supremo que se elevara la condena de la Manada de Pamplona por violación, y en la Fiscalía interpretan que esa designación también queda anulada.
Los dos nombramientos de Dolores Delgado tras dejar el cargo de fiscal general han sido anulados por el Tribunal Supremo. El primero, como fiscal de sala togada, fue tumbado por la sala de lo contencioso-administrativo tras entender que Álvaro García Ortiz había incurrido en desviación de poder al darle el puesto por razones ajenas a las necesidades del Ministerio Público. El segundo, como fiscal de sala de memoria democrática, fue anulado también al entender los jueces que el Consejo Fiscal no había examinado un aspecto de su candidatura: si el trabajo de su marido, Baltasar Garzón, como abogado y al frente de una fundación especializada en derechos humanos, podía influir en su desempeño.
El fiscal general volvió a proponer ayer el nombramiento de Delgado como fiscal de memoria democrática. Pero el primer proceso todavía no ha quedado zanjado para el Supremo: el fiscal general volvió a plantear el nombramiento de un fiscal de lo militar y ese puesto fue para Isabel Rodríguez, después de que los vocales de la mayoritaria y conservadora Asociación de Fiscales decidieran no participar. La elegida fue Isabel Rodríguez, que tomó posesión del cargo hace un mes. Fiscal desde hace más de tres décadas, Rodríguez fue la fiscal que pidió con éxito al Supremo que aumentase la condena de los violadores de la Manada por agresión sexual.
El Supremo entiende que esa sentencia no se ejecutó correctamente y que el fiscal general devolvió el proceso para adjudicar la plaza más allá de lo que debía: volvió a convocar al Consejo Fiscal cuando, según los jueces, directamente tenía que hacer otra propuesta de nombramiento. El auto todavía no ha sido notificado a la Fiscalía pero fuentes del Ministerio Público interpretan que esto anula el nombramiento de Rodríguez y, además, “supone un ninguneo absoluto al Consejo Fiscal como órgano asesor del fiscal general”.
“Es evidente”, dice la sala, que la decisión del fiscal general de convocar al Consejo Fiscal para abordar el nombramiento “implica retroacción a un momento del procedimiento administrativo anterior al establecido”. Critican que esto implica que el Consejo Fiscal “examine y valore de nuevo todas las candidaturas, lo que podría tener influencia -aunque no sea vinculante- en la propuesta que finalmente eleve el fiscal general del Estado al Consejo de Ministros”.