Susana Díaz fue de las primeras en apoyar la aplicación del artículo 155 antes de que Mariano Rajoy y Pedro Sánchez sellaran su acuerdo para ponerlo en marcha, aunque no lo expresó con la claridad con la que este lunes ha defendido que debería haberse aprobado antes. La presidenta andaluza cree que su activación tendría que haber precedido al 1-O para evitar el “daño” a la imagen exterior de Cayalunya y España.
Así lo ha expresado Díaz en una entrevista en Los Desayunos de TVE en la que ha asegurado que “si la aplicación hubiese sido anterior” al referéndum ilegal -que llegó a celebrarse porque se votó en centros electorales y hubo cargas policiales- se hubieran evitado situaciones “bochornosas”, a juicio de la líder andaluza: “No nos hubieran restado tanto prestigio internacional”, ha aseverado.
Díaz ha asegurado que la política catalana atraviesa una “locura” y ha acusado al sector independentista personificado en Calles Puigdemont de querer “hacer daño” al país. Así, ha pedido que se retome la normalidad y la legalidad. “El presidente del Parlament tiene que dejarse de historias de viajes a Bruselas e investiduras ficticias”, ha afirmado Díaz, que ha advertido de que “hay quien no descarta volver a elecciones”.
En el plano interno, la presidenta andaluza ha intentado restar importancia a su derrota en las primarias del PSOE frente a Pedro Sánchez: “Eso es el paleolítico”, ha bromeado sobre el enfrentamiento en el que los socialistas estaban inmersos por estas fechas el año pasado.
No obstante, Díaz ha evitado mostrar un respaldo total a la actuación de la nueva dirección del PSOE. Preguntada por las críticas que el expresidente Felipe González ha vertido últimamente al asegurar que tiene sentimiento de “orfandad” en la política actual y que no se siente representado por ningún partido -incluido el suyo que es el PSOE-, Díaz ha dicho que no quiere hacer de “comentarista” de González, pero que “toma nota” de los reproches.
Pero la presidenta ha eludido mojarse y defender la gestión de Ferraz. Así, ha asegurado que está centrada en la “responsabilidad” que tiene (“gobernar Andalucía”) y que a Sánchez le corresponde la posición del PSOE en “el ámbito del país”. “Son ellos los que tienen que marcar el camino”, ha reiterado. “Él [Sánchez] tiene su tarea y yo la mía y cuando me necesite ahí me va a tener”, ha dicho la presidenta andaluza, que tampoco ha querido decir que todo se arreglara con la visita de Sánchez a Sevilla hace unas semanas en las que ambos dirigentes mostraron que les interesa mostrar una alianza ante el primer examen de los socialistas en las elecciones andaluzas.
Díaz ha descartado que vaya a haber un adelanto electoral en Andalucía -los comicios serán, por tanto, en marzo del año que viene, dos meses antes de los comicios autonómicos y municipales-. La presidenta ha insistido en que tiene “estabilidad” y ha atribuido el rumor del adelanto al líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla. “Habrá que preguntarle a Rajoy -ha dicho tras recordar que ella ha conseguido sacar adelante los presupuestos con Ciudadanos, mientras que el Gobierno ha tenido que prorrogarlos-. Si alguien tiene que hablar de adelanto electoral es quien no tiene estabilidad”.
También ha reprochado a Rajoy que use el “dolor” de las familias de víctimas de asesinatos -como la de Diana Quer- y saque a relucir el debate de la prisión permanente revisable de la que no se muestra partidaria. “Esa imagen de los presidentes del gobierno usando el dolor de las familias porque estén con la debilidad que sea... yo no valgo para eso”, ha reprochado.