Una edil socialista en Segovia sustrajo 2.000 euros a una mujer incapacitada en la residencia donde trabaja

La segunda teniente de alcalde del Ayuntamiento de La Granja de San Ildefonso (Segovia), Beatriz Marcos García (PSOE), sustrajo más de 2.000 euros a una mujer en la residencia donde trabaja y lo hizo porque pasaba por “una mala racha económica”. Así se refleja en la documentación del centro a la que ha tenido acceso eldiario.es.

Marcos, auxiliar administrativo en la Junta de Castilla y León, en la Residencia de Asistida de Personas Mayores de Segovia, además de ser concejala y teniente de alcalde. Una de sus funciones era retirar de las cuentas de algunos ancianos las cantidades que ellos les indicasen para sus gastos de bolsillo. Este cometido se acordó verbalmente con el banco después de que dejase de enviar personal al  centro para facilitar las transacciones a los residentes.

La víctima era una mujer incapacitada tutelada por una Fundación que, en una rendición de cuentas en agosto de 2016, detectó reintegros “anormales”. La mujer disponía cada semana de 25 euros y en el año 2015 se habían retirado 915 euros de más, mientras que en 2016 la cantidad ascendía a 1.400 euros más de la cantidad acordada.

Según recoge la residencia en un informe remitido a la Gerencia Territorial de Servicios Sociales de Segovia, la residente entró en el geriátrico en 2011. La Fundación acordó con el trabajador social del centro que semanalmente se le proporcionasen 25 euros de su cuenta de Bankia. Beatriz García Marcos, personal fijo del centro de la Junta de Castilla y León desde 1985 en la categoría de administrativo, era la persona encargada, previa firma del documento de reintegro por parte de la residente, de acudir a por el dinero. La víctima iba después al departamento de Administración de la residencia y se le entregaba la cantidad tras firmar un recibo. En agosto de 2016, la Fundación alertó a la residencia de que estaba observando movimientos en la cuenta de la tutelada que no se correspondían con lo acordado.

El trabajador social del centro fue al banco con la mujer para solicitar un extracto de la cuenta. Fue entonces cuando se comprobó que desde enero de 2016 se sacaban 125 euros cada mes, habiendo meses en que se sacaba esa cantidad dos veces, además de los 25 euros semanales que se le entregaban a la víctima.

Los trabajadores sociales preguntaron varias veces a la concejala, que no dio ninguna respuesta o explicación y trasladaron la situación a la dirección del centro. Es en ese momento cuando Marcos García “reconoce que ha pasado por una mala racha económica, por lo que ha estado sacando algo más de dinero de la cuenta de esta residente” y que lo cogió con la intención de reponerlo. Esa misma tarde se ofreció a ingresar 800 euros, la cantidad defraudada detectada hasta el momento. La dirección le comunicó que daría parte de los hechos a la Gerencia Territorial. Además contactó con la Fundación para comunicar que la trabajadora devolvería 800 euros, pero la Fundación se negó puesto que la cantidad debía revisarse: no era desde enero cuando se había empezado a sacar más dinero del acordado. Inmediatamente se relevó a la auxiliar administrativa de la tarea de acudir al banco y se comunicó a los residentes que debían ir ellos mismos acompañados del personal del centro. Finalmente, la Fundación cuadró cuentas. Beatriz Marcos García reconoció los hechos si bien discutió la cantidad: la Fundación había detectado un agujero de 2.315 euros y ella aseguró que eran 2.215. A pesar de que devolvió el dinero, la dirección del centro propuso la apertura de un expediente disciplinario.

La versión que Beatriz Marcos García da a eldiario.es, tiene algunos matices. La edil aseguró que el expediente se paró, que tiene un escrito que lo demuestra, aunque no desvela su contenido, y que ha seguido trabajando normalmente en la residencia. Sobre la sustracción del dinero, comentó que “estaba en un sobre dentro una caja en la residencia” y que había sacado dinero de más porque “no trabajaba todas las semanas”. Sin embargo, no pudo precisar por qué  habiendo sacado 900 euros de más en 2015 que no fueron a parar a manos de la dueña, siguió extrayendo más dinero del requerido en 2016. La edil admitió que era cierto que había pasado por un mal momento económico y que a veces, de esa caja cogía dinero que reponía. También advirtió que los hechos se habían producido dentro del “ámbito privado” (la residencia es de la Junta de Castilla y León y ella es funcionaria además de tener un cargo público) y que consultaría a su abogado.

Beatriz Marcos García trabajó desde 1985 hasta 1995 como administrativo en el Inserso y pasó en 1996 a la Junta de Castilla y León, tal y como explica ella misma en el currículo colgado en la web municipal. En algunos periodos asegura haber tenido tareas de “jefa de Administración”. Desembarcó en la política en 2007, con el cargo de concejala de Cultura. Desde 2011 es segunda teniente de Alcalde y concejal de Educación y Cultura.