El primer ministro turco, Binali Yildirim, aseguró hoy que “no quedará sin respuesta” la muerte de tres soldados turcos en el norte de Siria en un bombardeo que atribuyó al Gobierno de Damasco.
“Es obvio que hay algunos que están descontentos con la lucha de Turquía contra el Dáesh (acrónimo árabe de Estado Islámico), pero este ataque y otros de este tipo (contra soldados turcos) serán vengados”, declaró hoy el primer ministro, según recoge el diario Hürriyet.
Además de los tres muertos, el ataque dejó diez militares turcos heridos, uno de ellos grave, que fueron evacuados en helicóptero a los hospitales de Gaziantep y Kilis, en el sur de Turquía.
El ataque tuvo lugar sobre las 00.30 GMT en la región siria de Al Bab y el Ejército turco indicó en un comunicado que “se estima que fue efectuado por las fuerzas del régimen sirio”.
Yildirim aseguró que continúan los esfuerzos de las Fuerzas Armadas turcas y de sus aliados sirios para expulsar a los yihadistas de esa región del norte de Siria.
“Estos ataques, vengan de donde vengan, no debilitarán la determinación de Turquía y de las Fuerzas Armadas turcas”, indicó.
El primer ministro turco también se ha pronunciado sobre la petición no vinculante del Parlamento Europeo de congelar la adhesión de Turquía a la Unión Europea (UE).
Yildirim dijo que las relaciones con la UE “no son de parentesco” y que el bloque deberían decidir si el país euroasiático tiene futuro o no dentro del club comunitario.
“Turquía es indispensable para la seguridad de la UE”, afirmó Yildirim.