El sindicato CCOO, mayoritario en el país, ha denunciado y mostrado su preocupación por “la escalada de violencia política expresada ante las sedes del PSOE”, en una nota difundida este miércoles. Aunque responsabiliza a los autores directos de los ataques, el sindicato pone el foco también “sobre en qué clima político” se están dando estas protestas ultras y en las continuas referencias de la derecha al Ejecutivo de Pedro Sánchez como “gobierno ilegítimo” desde la pasada legislatura.
“En la normalización de esta retórica no es de extrañar que ideologías ultras, antidemocráticas y contra-constitucionales terminen por ocupar un escenario político central. Incluso que se manifiesten violentamente ante el supuesto estado de permanente excepción que, en esa permanente hipérbole, viviría España”, recoge el comunicado. El sindicato urge a “enmendar la deriva de deslegitimación institucional, en la que en alguna medida u otra, parte del arco parlamentario español lleva situado hace tiempo”.
Comisiones Obreras también alerta sobre el papel de agitación social de “algunos autodenominados medios de comunicación (incluso acreditados en el Congreso de los Diputados y que cuentan con subvenciones públicas desde el inicio de su andadura en la marginalidad mediática inicial)”, así como de “determinadas asociaciones de indisimulada estética y práctica parapolicial, que habitualmente cuentan con tribuna en algunos medios de comunicación”.
El sindicato hace “un llamamiento al sosiego, a la normalidad democrática y a la defensa de la Constitución y el ordenamiento jurídico, los valores democráticos y la convivencia, rechazando enérgicamente cualquier intento de desestabilización institucional”. Destaca que, tras la expresión democrática de las pasadas elecciones, es necesario que “cuanto antes” se forme un gobierno en plenas funciones para “afrontar los retos que tiene la mayoría social de España”.
Por Laura Olías
El vicepresidente de Vox de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha proclamado este miércoles cánticos racistas en la protesta contra la amnistía frente a la sede del PSOE en Valladolid. “Esas lecheras, a la frontera”, ha comenzado a gritar en referencia a los furgones policiales, para que después se le uniera un grupo de manifestantes.
En un momento de la protesta, las decenas de personas concentradas junto al vicepresidente autonómico cantaban: “Puto rojo el que no bote” y “Óscar Puente, delincuente”. Precisamente el exalcalde socialista Óscar Puente se ha hecho eco de este vídeo de García-Gallardo en X, antes Twitter. “¿Pero qué es esto?”, ha dicho:
Durante las protestas de este miércoles frente a la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid, varios periodistas han sido agredidos mientras hacían su trabajo. Un equipo de Antena 3 noticias ha recibido insultos durante la grabación de la manifestación, así como golpes por parte de algunos asistentes a la cámara.
También a una periodista de TVE, que ha intentado hacer un directo de las protestas con un grupo de personas de fondo haciendo la peineta y repitiendo en coro “prensa española, manipuladora”. “Periodistas, fuera de aquí”, era otra de las proclamas que gritaban.
Asimismo, un periodista de la CNN ha sido víctima de agresiones de los manifestantes. “Mentiroso”, “di la verdad”, “fuera”, “masones”, le han gritado. El profesional ha recibido empujones y ha tenido que abandonar el lugar.
El expresidente del Gobierno ha grabado un vídeo emitido por la fundación que lleva su nombre, en el que se opone a la amnistía y a cualquier pacto con Junts y acaba pidiendo la repetición electoral. El dirigente socialista, que ya se había mostrado contrario a la aprobación de la ley que negocia su partido con Junts: “¿De verdad vale la pena? ¿Por siete votos? Para ser investido, ni siquiera para gobernar”. En un discurso muy crítico con el cambio de posición de su partido, González ha asegurado que no está de acuerdo “con la tontería de que España se va a romper”, pero ha advertido sobre el deterioro de la convivencia.
En su larga declaración, de 27 minutos, el expresidente asegura que todas las reformas que necesita el país necesitan la participación de los partidos a los que votaron dos de cada tres personas el 23 de julio (el Partido Popular y el PSOE), carga contra la polarización y hace un llamamiento a acabar con las manifestaciones ante la sede de su partido y para defender el trabajo de la policía.
La sexta manifestación frente a Ferraz contra la amnistía ha perdido el fuelle de las anteriores. Cientos de personas se han concentrado en los alrededores de la sede del PSOE, protegida por un fuerte cordón policial. Las consignas, sin embargo, no han variado mucho. “Sánchez, hijo de puta” o “Puigdemont, a prisión”, han vuelto a cantar los manifestantes, enfundado en banderas de España, algunas preconstitucionales.
Desde el inicio de la concentración, convocada a las 20.00, los manifestantes trataban de mantener una protesta pacífica. Algunos han señalado a personas que iban encapuchadas y han pedido a la policía que se los lleve. “Fuera provocadores”, han gritado después, con el objetivo de evitar imágenes como las del día anterior, con cargas policiales, contenedores incendiados y siete detenidos por altercados.
Fuentes policiales aseguran que se han congregado entre 1.500 y 2.000 personas exclusivamente en Ferraz. Además, indican a elDiario.es que las supuestas detenciones de personas recriminadas por otros manifestantes consisten en agentes de la Policía que sacan a estos de las manifestaciones.
Algunos de los convocantes, como el agitador de extrema derecha Javier Negre, han tratado de responsabilizar a “socialistas infiltrados” de los altercados. Uno de los que encabeza esta llamada a la “no violencia” es Miguel Frontera, uno de los agitadores que durante meses acosó a Pablo Iglesias e Irene Montero en su vivienda.
“Que no tengan razones para tirarnos gases lacrimógenos”, ha arengado con un megáfono en una mano y un escudo del Capitán América con los colores de Vox en la otra. “Ese presidente es un delincuente”, “Socialista el que no vote”, gritaban.
Los asistentes siguen, eso sí, aprovechando su rechazo a la amnistía para lanzar consignas racistas.
“Con los moros no tenéis cojones”; “Esas lecheras [furgones policiales] a la frontera”; o “España cristiana, nunca musulmana”, han gritado los manifestantes en varios momentos de la protesta. También han gritado consignas falangistas: “Ni izquierda ni derecha, el yugo y las flechas”.
Escribe Alberto Ortiz
El eurodiputado de Vox Hermann Tertsch, Jorge Buxadé y otros cargos del partido de extrema derecha se han reunido a las puertas del hotel en el que se aloja el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, en Bruselas. Ahí le han increpado con cánticos de “Puigdemont, a prisión” y una pancarta.
Cerdán ha extendido su estancia en la capital belga un día más por las negociaciones con Junts para la investidura de Pedro Sánchez.
Centenares de personas se dan cita en Ferraz para protestar contra la amnistía, en una movilización por el momento mucho menos multitudinaria que las de días anteriores. Los asistentes siguen, eso sí, aprovechando su rechazo a la amnistía para lanzar consignas racistas.
“Con los moros no tenéis cojones”; “Esas lecheras [furgones policiales] a la frontera”; o “España cristiana, nunca musulmana”, “sí comemos jamón”, han gritado los manifestantes en varios momentos de la protesta.
Informa Alberto Ortiz
Fuentes de la dirección del PSOE han restado importancia este miércoles a la carta que ha enviado el comisario de Justicia de la UE, Didier Reynders, al Gobierno, pidiendo explicaciones sobre la ley de amnistía que los socialistas están negociando con Junts para garantizar su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez. La norma ni siquiera se ha registrado en el Parlamento.
De hecho, las fuentes socialistas recuerdan a Reynders que la competencia sobre el texto la tendrá, en su momento, el Congreso y, por tanto, el poder legislativo, y que no es un asunto del que pueda dar explicaciones el Gobierno en funciones.
Por Irene Castro
La mayoría de los manifestantes que se concentran a estas horas en Ferraz trata de que la manifestación transcurra sin violencia. Algunos de los asistentes han comenzado a señalar a encapuchados o embozados para pedirles que descubran sus caras.
“Fuera provocadores”, “ultras no”, gritan cuando ven a manifestantes con el rostro cubierto. Las llamadas a la no violencia contrastan con el tono de las consignas que lanza la multitud. “Esto es un golpe de Estado”, han protestado en un momento. Incluso han llamado a los agentes a sumarse a la protesta: “Policía, únete”.
Las llamadas a la protesta pacífica se producen después de que la manifestación del martes terminase con graves altercados. La policía detuvo a seis personas y los manifestantes llegaron a lanzar piedras y a quemar contenedores. Algunos de los convocantes, como el agitador de extrema derecha Javier Negre, han tratado de responsabilizar a “socialistas infiltrados” de los altercados.
Por Alberto Ortiz
Cerca de 2.000 personas se reúnen esta tarde en el centro de Santander, frente a la sede del PSOE de Cantabria, en una concentración no autorizada y no comunicada previamente a la Delegación del Gobierno en la que los manifestantes han mostrado su rechazo a la amnistía que se está negociando dentro de las conversaciones para la posible investidura de Pedro Sánchez.
La concentración se ha convocado a través de las redes sociales bajo el lema 'No a la amnistía' y ha estado rodeada de fuertes medidas de seguridad, ya que Delegación del Gobierno ha establecido un dispositivo especial para evitar disturbios, y durante las protestas se han escuchado lemas contra los líderes políticos de los partidos independentistas en Cataluña e insultos contra Carles Puigdemont y Pedro Sánchez.
Entre los cánticos y gritos de los manifestantes que han participado en esta concentración no autorizada se han escuchado consignas como “Pedro Sánchez, hijo de puta”, “Son comunistas, no son socialistas”, “Puigdemont a prisión”, “Que te vote Txapote” o “Sánchez, cabrón, eres un traidor”.
Informa Andrés Hermosa
Un centenar de personas se ha congregado frente a la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid. Con gritos de “Sánchez, hijo de puta” y “Puigdemont, a prisión”, los manifestantes se han citado a pocos metros de la sede socialista, blindada con vallas y un fuerte dispositivo policial.
Las personas que se concentran a esta hora tratan de expulsar de la movilización a las personas encapuchadas, para tratar de que la protesta no torne en violencia. Uno de los que encabeza esta llamada a la “no violencia” es Miguel Frontera, uno de los agitadores que durante meses acosó a Pablo Iglesias e Irene Montero en su vivienda.
“Que no tengan razones para tirarnos gases lacrimógenos”, ha arengado con un megáfono en una mano y un escudo del Capitán América con los colores de Vox en la otra. “Ese presidente es un delincuente”, “Socialista el que no vote”, gritaban otros mientras tanto.
Lo cuenta Alberto Ortiz