A 24 horas de que se cierre el plazo legal para registras las coaliciones electorales para las europeas del 26 de mayo, la dirección de Equo ha saltado por los aires tras conocerse el resultado de un referéndum convocado entre las bases del partido ecologista y cuyo resultado apuesta por romper la alianza sellada con Podemos e IU y apostar por una nueva con la coalición liderada por Compromís. La división es tal que una parte de la Comisión Ejecutiva Federal se plantea impugnar la consulta al no haberse seguido, en su opinión, los cauces estatutarios marcados para su convocatoria. La otra mitad busca la fórmula para levantar el acuerdo de Unidas Podemos ya presentado ante la Junta Electoral y registrar uno nuevo.
Equo firmó en 2018 con Podemos e IU un acuerdo marco electoral para las elecciones previstas en 2019. En junio de hace un año, las bases ratificaron el documento, que establecía una fórmula general para que los tres partidos a nivel autonómico y municipal tuvieran una guía con la que negociar las diferentes alianzas.
El resultado de las negociaciones ha sido desigual, algo que ya preveía ese acuerdo. La alianza entre Podemos, IU y Equo saldrá adelante en algunos lugares. En otros, como Madrid, no.
La IV Asamblea Federal del partido ecologista ratificó la estrategia de alianza con Podemos e IU en octubre de 2018. El cónclave sirvió además para marcar el adiós del fundador del partido, Juan López de Uralde, de los órganos de dirección de Equo. Uralde repetirá como candidato al Congreso, pero la coportavocía federal del partido recayó en Carmen Molina y Löic Alejandro.
Para entonces, el partido verde arrastraba una fuerte división estratégica interna entre la rama más puramente ecologista, que rechazaba la alianza con Podemos e IU ya en 2015 y 2016, y quienes desde la fundación han apostado por que Equo sirva de aglutinante de todos los partidos verdes de España y que defienden que la coalición de Unidas Podemos ha permitido que el ecologismo político tenga una visibilidad inaudita hasta ahora.
Esta división se ha mantenido soterrada y ha estallado ahora. El pasado lunes, la coportavoz federal Carmen Molina firmó el acuerdo de coalición con Podemos e IU, que fue registrado ante la Junta Electoral Central. Mientras, el otro sector promovía una consulta para valorar la opción de aliarse con el partido valenciano Compromís.
Las versiones a partir de aquí difieren. En conversación con eldiario.es, el otro coportavoz federal, Löic Alejandro, asegura que la consulta es perfectamente legal y que se ajusta a los Estatutos del partido. El artículo 32.2 establece que la Mesa Federal (órgano de representación territorial) puede demandar la realización de “consultas no vinculantes para recabar el sentir de la organización en alguna cuestión en particular”.
Alejandro, quien asegura que el registro de la coalición con Podemos e IU del pasado lunes es ilegal, sostiene que este trámite se cumplió y que la consulta es legal. El gabinete de comunicación oficial de Equo ha remitido este jueves por la mañana los resultados del referéndum: un 75,1% de los votantes apostaba por Compromís en lugar de por Unidas Podemos.
Tras varias consultas, eldiario.es ha podido saber que el número de votantes ha sido 1.144. El censo, según las mismas fuentes, era de 4.337 personas. Es la participación más alta desde 2014, señalan desde el sector de Equo que apoya la alianza con Compromís.
El candidato a las europeas elegido por las bases, Florent Marcellesi, es partidario de reeditar la alianza con Compromís de hace cinco años.
El acuerdo con Podemos e IU le relegaba al número 13 de la lista de Unidas Podemos, lejos de tener garantizado salir elegido. Compromís le ha ofrecido el número 3 y un acuerdo de repartirse la legislatura con el candidato número 2 en caso de que no se logren los tres eurodiputados, algo que Compromís nunca ha logrado. En 2014, obtuvo solo un representante, Jordi Sebastià, con quien se turnó precisamente Marcellesi.
eldiario.es se ha puesto en contacto también con Carmen Molina. La coportavoz asegura que la votación no cumple los estatutos porque la petición que se hizo en la Mesa Federal fue que se votara si se iniciaba una negociación con Compromís. Y lo que se ha votado es una alianza con el partido valencianista.
Molina también lamenta que esta alianza relega a Equo a ser un partido aliado de una coalición de formaciones regionalistas (Chunta, Nueva Canarias, el Partido Castellano y otros), mientras el partido verde tiene vocación estatal.