Caracas, 21 nov (EFE).- Un segundo buque con 200 toneladas de ayuda humanitaria salió este jueves de Venezuela hacia Cuba, en respuesta al impacto de huracanes que afectaron al país insular, el más reciente Rafael, de categoría 3, informó el canciller venezolano, Yván Gil.
“Estamos hablando de más de 200 toneladas de ayuda en materiales de construcción y de apoyo para las comunidades. Esperamos que en los próximos cuatro o cinco días esté arribando al puerto de Santiago de Cuba”, señaló Gil citado en una nota de prensa.
El funcionario indicó que dentro del cargamento hay donaciones hechas por la empresa privada venezolana.
Entretanto, el embajador de Cuba en Venezuela, Dagoberto Rodríguez, resaltó la importancia de estos envíos hacia la isla.
“La historia y el destino nos han llevado en este caminar juntos para construir realmente un mundo diferente, un mundo mejor y que solamente puede estar basado en la solidaridad y la cooperación”, dijo el diplomático, de acuerdo a la nota de prensa.
El pasado 6 de noviembre, Venezuela envió un primer buque hacia Cuba con más de 300 toneladas de ayuda humanitaria con enseres de cocina, 10.000 colchones matrimoniales, 10.000 láminas de zinc galvanizado, 20.000 tubos de hierro y ganchos de techo, así como productos de higiene personal, según la Cancillería.
Rafael fue el segundo huracán que impactó Cuba en la actual temporada ciclónica, luego de que el pasado 21 de octubre, Óscar -con categoría 1- penetrara por la provincia de Guantánamo, la más oriental de la isla, que después se degradó a tormenta tropical, antes de abandonar el territorio cubano.
Anteriormente, a finales de septiembre y principios de octubre, los huracanes Helene y Milton transitaron cerca de la región occidental de la isla, donde causaron inundaciones ligeras en localidades costeras, cortes de la electricidad y daños a la agricultura.
Hasta el momento, Cuba ha recibido donativos enviados por organismos internacionales como el Sistema de las Naciones Unidas, la Unión Europea, Gobiernos como el de Venezuela, España y Rusia, y grupos de solidaridad de Estados Unidos, entre otros.