La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Vox inaugura su convención con los teloneros ultras de Milei en un acto contra “la izquierda criminal”

Carmen Moraga

18 de mayo de 2024 19:16 h

0

9,45 de la mañana del sábado. En la puerta principal del Palacio de Vistalegre Arena, la antigua plaza de toros madrileña convertida hoy en un gran reciento para eventos de todo tipo, se agolpan apenas varias decenas de personas que aguardan a que los responsables de seguridad les dejen pasar para asistir a los actos de la segunda jornada del 'Viva 24', la “fiesta patriótica” organizada por Vox. Poco a poco, no obstante, fue llegando más gente, en su mayoría de la tercera edad, que desconocían que Santiago Abascal, para caldear el ambiente, tenía previsto dejarse caer por el evento para saludar a sus afiliados y simpatizantes y visitar los stand instalados en el recinto. Su llegada causó revuelo entre sus seguidores, que peleaban por sacarse un selfie con él, fotos que luego el propio líder subía a la red.

Pero el gran momento será este domingo cuándo el líder de la extrema derecha intervenga a media mañana y luego le secunde la gran estrella de la jornada de clausura, el presidente de Argentina, el ultra Javier Milei, que ayer ya hizo su primera aparición pública en Madrid para presentar su libro en la sede del periódico La Razón. A ese acto no faltó su “amigo Santiago” al que saludó efusivamente. Su agenda, sin embargo, no incluye ninguna entrevista con representantes del Gobierno de España, ni con el Jefe del Estado, ni con dirigentes de otros partidos, salvo Vox, además de un grupo de empresarios que el presidente argentino ha seleccionado a su gusto.

Milei será este domingo sin duda el plato fuerte del cierre del 'Viva 24', junto con el discurso que dará el líder de Vox, con el que se reencontró ayer por la tarde. También intervendrán los integrantes de la candidatura de Vox al Parlamento Europeo, que aprovecharán para presentar el programa del partido para las elecciones del 9 de junio.

A este 'Viva24' tampoco faltarán el ramillete de “invitados especiales”, habituales en los actos de Vox: los principales líderes ultraderechistas europeos e internacionales, como la francesa Marine Le Pen, la italiana Giorgia Meloni, el polaco Mateusz Morawiecki, el húngaro Viktor Orbán o el Chileno José Antonio Kast. Algunos intervendrán de forma telemática. También está invitados el ministro israelí de Lucha contra el Antisemitismo, Amijail Chikli, y el líder del partido portugués Chega, André Ventura.

Una fiesta aplazada por el batacazo de Vox en las generales

El año pasado el partido de Abascal se vio obligado a aplazar la tercera edición de su 'fiesta patriótica' con la disculpa de que España estaba inmersa en una “incertidumbre política” ante “la imposibilidad de conocer los acontecimientos de las próximas semanas”, es decir, si había o no nuevas elecciones generales en el caso de que fracasaran las investiduras de Alberto Núñez Feijóo y de Pedro Sánchez. La del líder del PP no salió adelante, pero sí la del dirigente del PSOE que logró continuar al frente del Gobierno.

Los motivos para no celebrarla, sin embargo, fueron otros: Vox había sufrido un gran batacazo en las elecciones del 23 de julio perdiendo 19 diputados -pasó de 52 a 33 escaños-. A su crisis interna se sumó la económica y la dirección del partido decidió esperar a tiempos mejores. Para ello Abascal adelantó la Asamblea Nacional y logró ser de nuevo entronizado como dirigente de Vox sin rivales ni votación interna antes de la celebración de las elecciones gallegas, que supusieron un nuevo fracaso para el partido, que volvió a quedarse en esa autonomía sin representación.

Ahora Vox quiere recuperar fuelle con la nueva convocatoria de este año de la 'fiesta patriótica' de Vistalegre, un lugar emblemático para Abascal ya que allí la formación de extrema derecha celebró en 2018 su primer congreso y logró llenar el recinto con creces, superando el aforo de mas 10.000 personas. La cita, evidentemente, está diseñada como el pistoletazo de salida a la campaña de las elecciones al Parlamento Europeo del 9 de junio, después de haber cosechado un discreto resultado en Catalunya en donde apenas han subido en apoyos y mantiene los 11 diputados que tenían, mientras se han visto ampliamente superados por un PP que partía de tres diputados y ha logrado en esos recientes comicios subir a15, desbancándoles como primera fuerza antiindependentista.

Según datos del partido, hay acreditados 160 periodistas de más de 90 medios y de16 países- entre los que no está elDiario.es ya que Vox ha vuelto a vetarnos denegando nuestra solicitud de asistencia-, y en un acto que esperan congregar a unas 30.000 personas a lo largo de todo el fin de semana. Para no pinchar, la dirección de Vox ha facilitado a la militancia de provincias el viaje hasta Madrid, fletando numerosos autobuses gratis.

El partido, que no las tenía todas consigo, decidió ampliar un día más la fiesta, y ayer, viernes, convocó a los jóvenes afiliados y simpatizantes “menores de 30 años” a acudir al evento, pero no logró un gran aforo. Tampoco este sábado, aunque la formación se ha cuidado mucho de que el auditorio principal, en donde tendrán lugar este domingo la clausura y los discursos más esperados, se vea repleto de público. Desde allí los asistentes han seguido este sábado los coloquios y las mesas redondas programadas. Una de ellas versaba sobre “Medios de comunicación y poder político” y ha estado moderado por Rebeca Crespo, de Periodista Digital. En ese coloquio han participado Antonio O’Mullony, director de La Gaceta de la Iberosfera –el medio de cabecera de Vox- ; Hughes, uno de sus columnistas; y  Alonso de Mendoza, periodista y asesor de comunicación en el Grupo ECR. Los tres han alertado de “la situación crítica y muy complicada” que viven los medios de comunicación, y de las “fake news” y “propagación de bulos” que atribuyen al Gobierno de Sánchez y a sus medios afines. Una situación de la no culpan solo a la izquierda, sino también “a la derecha tradicional”, a la prensa “que leían nuestros abuelos”, a la que acusan sin paños calientes de “blanquear fenómenos como la transexualidad o la inmigración ilegal”, algo que les parece “gravísimo”. Por ejemplo, han citado el hecho de que “se normalice” que “Manolo de repente es una mujer, que es algo que nadie entiende”. También han opinado que el Gobierno de Sánchez, en su afán por controlar a la prensa, “intenta acallar hasta a Trancas y Barrancas” -los muñecos de El Hormiguero- porque les parece que son monigotes “con demasiada capacidad crítica”. Los ponentes han lamentado además el “maltrato generalizado” que los periodistas dispensan a Vox. Pero han advertido de que “la serpiente moribunda al final es la más peligrosa,” “por eso están con tantas ganas de censurar, insultar y acabar con nosotros”. “Pero estamos ganando y ellos lo saben”, han avisado. 

Contra la “izquierda criminal”

Otro de los coloquios ha versado sobre “Voces de libertad contra la izquierda criminal”, que ha presentado Eduardo Cader, director de Foro Madrid y responsable del Área Internacional de la fundación de Vox, Disenso, quien ha dado paso, entre otros invitados latinoamericanos, a Francisco Sánchez, secretario de Culto de la República Argentina y a Santiago Santurio, diputado también argentino. Cader ha iniciado su intervención sentenciando que “España, como Europa, ha entrado en un cambio de época, lo que la izquierda criminal llamó en su momento brisa bolivariana” y que ahora son “vientos huracanados que van en la dirección contraria, vientos de esperanza y vientos de libertad”, como los que creen que trae a Argentina Milei.

También han augurado que en Venezuela, “esa izquierda” que lidera Nicolás Maduro “que ha trabajado en bloque y ha gozado de amplia impunidad en los últimos treinta y tanto años, sabe muy bien que su tiempo ha terminado”. Los dos representantes argentinos han lanzado grandes elogios al presidente de su país. Según creen ambos, “la izquierda criminal no acepta el cambio de rumbo” que ellos ven en Europa y América, “y quiere dar una patada al tablero, hacer trampas, cometer más crímenes y acabar con las voces de libertad”. “Pero no podrán, no pasarán”, han dicho, porque “las fuerza patrióticas y de sentido común agrupadas en Foro Madrid, gracias a Vox y a Santiago Abascal han decidido dar la batalla y han decidido ganar la guerra”, han sentenciado, mientras lanzaban duras críticas contra la aprobación del “divorcio vincular” por parte “del gobierno alfonsinista”, la “legalización del aborto” del exmandatario Alberto Fernández, o la aprobación del “matrimonio homosexual”, que promovió a su vez Cristina Kirchner.

Después han recordado que “también se aprobaron leyes para que la ideología de género se impartiera en las escuelas para pervertir a nuestros hijos y para hacer daño a nuestra sociedad”.

En su intervención, la senadora colombiana María Fernanda Cabal, también ha ensalzado al presidente ultra argentino, sobre el que ha dicho que les “estrechó el paso para defender la libertad y ahora nosotros tenemos ese reto”. “La realidad de la historia de la izquierda solamente es fracaso, exilio, pobreza, miedo y muerte”, ha añadido.

Mientras, en la calle, Magdalena, una jubilada que se confesaba “muy católica”, lucía una camiseta “a favor de la vida” en cuyo reverso recordaba algunos de los temas de los inicios del cantautor Víctor Manuel, de 1966, “cuando todavía no era comunista”.

Ruletas de la suerte y venta de banderas preconstitucionales

Por el recinto de Vistalegre se han visto este sábado numerosa indumentaria de ensalzamiento a los símbolos nacionales. Mujeres y hombres mayores envueltos en la bandera de España a modo de capa, gorras y muchas pulseritas y merchandising de Vox, que un grupo de voluntarios vendía a la entrada del Palacio en una carpa del partido. Entre ellos una pareja de octogenarios, Antonio y Domingo, que acudían al 'Viva24' desde Móstoles con intención de “no perderse nada”, mucho menos a Abascal y a Milei. “Mañana va a ser un gran día”, vaticinaban.

En uno de los tenderetes el visitante también podía probar suerte en una ruleta con la imagen de principales líderes de los partidos del espectro político: si caías en uno de Vox, premio, una pulserita patriótica. Si no, pues te ibas con las manos vacías

Los amantes de las banderas también pueden elegir entre una amplia gama, entre ellas la enseña española preconstitucional franquista, que podía verse camuflada entre muchas otras.

Todo con tal de hacer 'caja'. Según publicó en su día El Español, en la anterior edición del Viva22, el partido de extrema derecha cobraba 200 euros por ocupar una mesa del mercadillo popular y 2.000 euros a las empresas por sus stands en un espacio destacado.

Mientras mañana Abascal y Milei se dirijan a sus simpatizantes, en la Plaza de Colón de Madrid transcurrirá una manifestación convocada por diversas asociaciones y colectivos “antifascistas” de la “sociedad civil” para protestar por la presencia en Madrid de los líderes de la extrema derecha que han viajado hasta la capital para arropar a Abascal e impulsar su candidatura europea. Entre los asistentes a la marcha habrá también activistas de la comunidad LGBTIQ+, como Franek Broda, sobrino del ex primer ministro polaco Mateusz Morawiecki, uno de los invitados de Abascal.