La dirección de Vox intentó contener la crisis interna abierta en Baleares silenciando a la dirigente que podía aportar información. El escándalo tenía su origen en unas presuntas irregularidades en las cuentas que habían saltado de la vida interna del partido a los medios de comunicación. La cúpula de Vox apostó por acallar las voces que podían posicionarse. La ya exdiputada por Baleares Malena Contestí recibió amenazas de expedientes para que no aportase su visión de los hechos en la prensa.
“Malena, que permanezcas en silencio”. De esta forma emplazó a enmudecer la secretaria general del grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados, Macarena Olona, a Contestí después de que la dirigente insular anunciase que abandonaba la marca autonómica del partido, Actúa Baleares, alegando falta de explicaciones ante las presuntas irregularidades económicas.
“[La dirección nacional] te puede abrir un expediente por actuaciones propias, Malena. Será muy importante cómo reaccionas ahora”, le insistió Olona el pasado 8 de agosto, de acuerdo a las grabaciones a las que ha accedido eldiario.es. Contestí se marchó definitivamente de Vox el pasado 30 de septiembre con una dura carta de despedida. En el texto comunicaba que no iba a repetir como candidata a las próximas elecciones generales. “No es un partido, es demagogia, homofobia y proselitismo confesional”, apuntó.
Espinosa: “Tengo mucha confianza en ti”
En ese momento, desde el partido aseguraron que la política balear había adoptado esta postura tras conocer que “no repetía como candidata” a las elecciones del 10N. Así lo transmitió la propia Olona en su cuenta de Twitter y otros dirigentes del partido.
Sin embargo, cuatro días antes del anuncio de Contestí, el portavoz del grupo parlamentario de Vox, Ivan Espinosa de los Monteros, le transmitía por teléfono que “ni en Baleares ni en ninguna provincia” había “ninguna decisión tomada” sobre las listas. “Si la hubiera, te llamaría”, concluyó Espinosa de los Monteros. La ya exdiputada defendió desde su salida que “nunca” le habían comunicado que no iba a ser candidata y que su marcha está propiciada por sus discrepancias con el rumbo del partido.
En agosto, el líder de la formación de extrema derecha trasladó su confianza a su compañera de grupo. “Tengo mucha confianza en ti. Creo que tienes una gran capacidad y obviamente se te da bien la comunicación”, incide Espinosa de los Monteros en la misma llamada del 9 de agosto.
La presión de la formación de extrema derecha contra su representante había comenzado en agosto. En ese momento Contestí anunció que se daba de baja tras la publicación de las “trabas encontradas” para desarrollar su labor por la persona encargada de supervisar las cuentas del partido, así como de la existencia de supuestos cobros por parte de cinco miembros – entre ellos, la propia Contestí – de la cúpula de esta delegación de Vox, antes de la campaña electoral, por medio de facturas por asesorías jurídicas o financieras que presuntamente no se habían prestado.
La exdiputada aseguró en ese momento que no había recibido “explicaciones satisfactorias” por parte de la dirección autonómica. “No podía seguir en un sitio donde no me siento cómoda con ciertas informaciones y noticias”, aseguró entonces. Sus quejas públicas se toparon con las reproches de la dirección del grupo parlamentario en el Congreso.
“Si empiezas a ver un escándalo que no existe pero como consecuencia de él alguien dimite, ya se ha justificado su existencia”, le reprocha el secretario general, Iván Espinosa de los Monteros. A lo largo de los 20 minutos de una conversación mantenida el 9 de agosto, el dirigente de Vox resta credibilidad a las noticias publicadas por El Mundo y Ok Diario asegurando que no tienen “trasfondo”. “¿Que el concepto de la asesoría de uno pone asesoría jurídica cuando no es abogado? Joder, da igual”. Sin embargo, el político insiste en que “el problema” de esta situación consiste en “haber tomado unas decisiones sin haber avisado, sin haber consultado [al partido]”, en alusión a la baja de Contestí de sus cargos autonómicos.
En los días previos a estas llamadas, El Mundo informaba de que la extesorera de Actúa –filial de Vox en Baleares– había dejado constancia ante notario de las “trabas encontradas” al auditar las cuentas del partido de extrema derecha, así como de “la imposibilidad de acceder a los datos bancarios, facturas, certificado digital, datos de donantes”.
Por su parte, entre los nombres aportados por Okdiario a los que acusaban de haber facturado por asesorías jurídicas o financieras que presuntamente no se habrían prestado, citaban tanto al líder autonómico, Jorge Campos, como a Contestí. Sobre la exdiputada nacional, reseñaban que al ser letrada “al menos en este caso podría estar justificado el concepto de sus facturas”. Esto sería extrapolable también a Campos, quien también es abogado, como han confirmado fuentes de Vox Baleares a eldiario.es.
Además, incluían al secretario general, Sergio Rodríguez, sobre el que planteaban que había prestado supuestos servicios de “asesoramiento legal”, a pesar de no tener “formación para ello, ya que es licenciado en Geografía e Historia y gestiona una administración de Lotería”. En el caso de Sandra Barceló, concejal de Vox en el Ayuntamiento de Palma, señalaban que también obtuvo una remuneración en concepto de “asesoría financiera”, aunque su “nivel de formación se limita a haber cursado el Bachillerato”.
En su conversación con Espinosa de los Monteros, Contestí asegura que desconocía estos últimos casos y continúa defendiendo que se da de baja “de un cargo orgánico, no institucional”. “Legítimamente tengo todo el derecho del mundo a dejar de ser una de las cuatro vicepresidencias”, insiste.
Ante Olona, Contestí remarca que ha tomado esta decisión por “dignidad de principios” y “por limpieza”. Estas argumentaciones no convencen a la secretaria general del grupo parlamentario que alega que “estos actos y decisiones” tienen “consecuencias”. “Si hubieras ido de la mano con la dirección nacional en tus reacciones no estaríamos en esta situación”, concluye.
Instada a ir “de la mano” con la dirección
Una vez que Constestí anunció que se desmarcaba de la marca autonómica del partido de extrema derecha, la dirección de ese partido territorial cargó contra ella y llegaron a decir que su decisión formaba parte de un “complot”. “La dirección nacional de Vox ha confirmado que Contestí ha sido presionada para renunciar a sus cargos en Actúa en una operación para intentar hacerse con el control del partido en Baleares”, apuntó Vox Baleares en un comunicado.
Asimismo, en esta nota de prensa, el partido aseguró que la dirección del partido también les había “comunicado que Contestí se ha mostrado arrepentida de su error y de haber cedido a las presiones, por lo que se ha disculpado”. Sin embargo, la política no confirmó ese mensaje horas después. “Me remito a mi comunicado”, explicó a eldiario.es. Estas declaraciones fueron reprobadas por Olona en la charla telefónica que mantuvieron: “Te pido por favor que ni siquiera para eso tengas contacto con los medios de comunicación”.
La dirección nacional también dio la espalda a Contestí. En un comunicado expresaban su “apoyo sin fisuras” a la delegación autonómica en Baleares y anunciaban la puesta en marcha de “una investigación interna para depurar responsabilidades”. Olona trató de tranquilizar a Contestí asegurando que desconocía “el alcance” que iba a tener esta actuación. “Dices que no tienes ningún tipo de información y hasta donde yo sé, el partido lo que tiene es una corroboración de que las cuentas son correctas, además deben de ser unas cuantas muy sencillas con apuntes de entrada y de salida”, añadió.
En esas llamadas, la exdiputada también deja constancia de que las declaraciones realizadas por Campos eran “mentira”. Ante las declaraciones del dirigente de Vox Baleares, Espinosa de los Monteros le llega a reconocer que a él también le pidieron “que no hiciera” una rueda de prensa y reconoce que esas declaraciones no han “ayudado”.
Aun así, Olona le plantea que “la dirección nacional” ha decidido cerrar “filas con la dirección regional”. “Ahora tú tienes que decidir si estás dentro o estás fuera de ese posicionamiento del partido. Yo te pediría que estés dentro. ¿Qué supone que estés dentro? que estés absolutamente en silencio”, remata.
“Presionada” para tuitear a favor de Campos
Aunque Olona insiste en que desde el partido no le han pedido que “mire hacia otro lado ante irregularidades”, sí le echa en cara haber dado “credibilidad a unas informaciones aparecidas en la prensa” al dimitir. En esas conversaciones, Contestí también confirma que fue “presionada” por la gerencia del partido “para poner tuits” a favor de Jorge Campos. De hecho, la dirección del partido le mandó un WhatsApp con varias indicaciones sobre el contenido. Sin embargo, la exdiputada no lo realizó y no siguió estas instrucciones. Finalmente, la secretaria general de Vox en el Congreso le deja claro a la política balear la posición que tiene que tener a partir de ese momento: “Nos tienes que dejar las manos libres para poder actuar”.
Esta redacción se ha puesto en contacto con Olona, Espinosa de los Monteros y la responsable de prensa del grupo parlamentario, sin haber recibido respuesta por el momento.