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Yolanda Díaz apela a la movilización de las mujeres en el inicio de la campaña para derrotar a Vox en provincias clave

Alberto Ortiz

8 de julio de 2023 22:02 h

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“Soplad hasta enterrarlos en el mar”. No hay remontada sin épica y quizás por eso Yolanda Díaz recurrió el pasado jueves en A Coruña a los versos que el poeta comunista Rafael Alberti dedicó a los soldados republicanos durante la Guerra Civil. La líder de Sumar cambió ligeramente las palabras del poema para adaptarlas al contexto de la ciudad costera en la que arrancó una campaña electoral con la que la coalición más amplia de la izquierda desde la vuelta de la democracia trata de impedir que el actual gobierno progresista quede relegado por una alianza entre el Partido Popular y la ultraderecha.

Díaz eligió un lugar simbólico. Una de las ciudades donde irrumpieron las mareas en 2015 que la líder de Sumar ayudó a poner en marcha y que consiguieron, al calor de la irrupción de Podemos, colocarse como la segunda fuerza de Galicia en las generales de 2015, además de tres alcaldías: A Coruña, Santiago y Ferrol. Seis escaños y un 25% de los votos. De aquello no quedan apenas restos, pero Díaz escogió empezar en casa, a 50 kilómetros de Ferrol, donde se crió y arrancó la carrera política que la ha llevado a ser ministra y vicepresidenta del Gobierno hasta enfrentar su reto más difícil: liderar la coalición de izquierdas a la izquierda del PSOE. “No estoy aquí por casualidad. Aquí está mi padre, mi hija, mis amigos. Una ciudad bien hermosa que abre las puertas al mar y que es capaz de hablar a través de los océanos”, defendió pocas horas antes del arranque oficial de la campaña.

La vicepresidenta segunda se sirvió en ese discurso de una idea que ha resonado en los siguientes actos que ha ido realizando. “Hay vientos de remontada, soplad esos vientos”, dijo. La consigna es una prueba de que en Sumar se van a resistir hasta el último minuto a considerar que la victoria del PP y Vox está ya escrita, como la derecha ha tratado de hacer ver desde que en las elecciones autonómicas y municipales el bloque progresista perdiese la mayor parte del poder institucional con el que había contado durante los últimos cuatro años. Y para dar la vuelta a ese pronóstico ha decidido apelar al voto de “las mujeres libres” y al de una España plural, un país de países que hablan diferentes lenguas frente a la idea unitaria que propugna la extrema derecha.

En Sumar cuentan desde hace varios días que han detectado un cambio en las encuestas, sobre todo desde que se apagó el ruido alrededor de las discusiones internas y comenzaron a lanzar algunas propuestas con las que han intentado imponer un marco distinto en la precampaña, como el bono para paliar la subida de las cuotas hipotecarias o la discutida herencia universal de 20.000 euros para los jóvenes. Los trackings que reciben con regularidad, sostienen, muestran cómo esa curva que ahora ronda el 13% de los votos, en empate técnico con Vox, ha empezado a repuntar y la afluencia de público a sus actos les sirve para confirmar que las sensaciones son buenas.

La idea de la remontada está diseñada alrededor de esos dos ejes: instalar la idea de que hay partido gracias a que Sumar ha empezado a cambiar el eje de la discusión en torno sus propuestas, a pesar de que según la mayoría de sondeos es el PSOE quien ha realmente ha conseguido doblegar la tendencia a la baja de su intención de voto. Sumar ha reflejado esta idea en los argumentarios que ha distribuido entre los diferentes partidos que componen la coalición: “Algunos, que pecaron de soberbios, llegaron a esta campaña con la lengua fuera; Sumar es la fuerza de la frescura; es el único partido que está generando debates y proponiendo medidas en positivo”.

Voto femenino para arrebatar a Vox el tercer puesto

El éxito de la coalición que lidera Yolanda Díaz depende sobre todo de cómo se desenvuelva en las provincias medianas, las que reparten entre cinco y ocho diputados y donde se pelea con Vox por conseguir los últimos escaños. Por eso las primeras paradas de Yolanda Díaz serán en este tipo de provincias donde tradicionalmente le ha ido bien a Unidas Podemos y donde necesita movilizar a los votantes para que no ocurra algo similar a lo de las pasadas autonómicas. Tras el arranque en A Coruña, el viernes estuvo en Zaragoza y el sábado celebró un acto central en Valencia.

Tanto la capital como Alicante son provincias más o menos proporcionales, donde el sistema electoral no perjudica tanto a los partidos que quedan en tercera o cuarta posición, pero en Castellón, por ejemplo, donde la vicepresidenta tenía un acto previsto que tuvo que anular por problemas de agenda, todas las encuestas apuntan a una apretada pugna entre Sumar y Vox por el quinto escaño.

“O nosotros o Vox. Vamos a ganar ese último escaño”, dijo este sábado el candidato de Sumar-Compromís en esa provincia, Francesc Mezquita, durante el acto que Díaz celebró con sus compañeros de lista por la Comunitat Valenciana en la capital. Desde ese escenario, la líder de la coalición apeló directamente a Santiago Abascal. “Dice que soy peligrosa”, comenzó. “Lo que sucede es que hay hombres que tienen miedo a las mujeres libres. Vamos a llenar las urnas de votos a Sumar para las mujeres libre de este país”, contestó. En la coalición entienden que no hay mejor respuesta contra el mensaje del extrema derecha que hacer presidenta a Yolanda Díaz.

En ese mismo escenario había hablado pocos minutos antes el líder de Más País y número 4 de las listas de Sumar por Madrid, Íñigo Errejón, que también se refirió a las palabras del líder de la extrema derecha. “No es casualidad que Feijóo y Abascal hayan decidido atacar a Yolanda. Es un indicador tan fiable como las encuestas. Cuando Abascal dice que es peligrosa, es verdad; es una mujer peligrosa para los fascistas, para quienes quieren seguir pagando salarios de miseria”, replicó.

Aunque desde Sumar se esfuerzan en centrar el eje de sus discursos en el aspecto más propositivo y en desgranar, acto por acto, el extenso programa electoral que han diseñado sus equipos, lo cierto es que Díaz y sus acompañantes en los escenarios han azuzado una y otra vez el miedo a un gobierno de la derecha con la extrema. Y han aprovechado en concreto una de las primeras consecuencias de la llegada de Vox a los gobiernos locales y autonómicos: la censura de obras culturales y artísticas por motivos ideológicos en diferentes puntos del país.

Como respuesta, Díaz invitó en el acto de A Coruña a la actriz Marisa Paredes, que invocó a la memoria para defender la “libertad”. “Hay una historia que tenemos que defender y hay un momento por la historia de la libertad que tenemos que sentir nuestra porque somos libres, no nos pueden quitar eso, no podemos volver atrás”, dijo. “Hay una situación grave. No podemos permitir que algo tan inmenso como la libertad sea aplastada y lo será si dejamos que una serie de energúmenos vuelvan a ocupar un sitio que nos costó tanto conseguir”, añadió. “Vuelven a censurar, vuelven a quitar obras de teatro, a decir que hay determinadas cosas que no pueden decir (…). Ahí están los enemigos de la libertad. No podemos permitirlo. El día 23 de tenemos que ir todos con todo el alma a votar”, clamó.

“Una campaña de propuestas”

Al mismo tiempo que Vox presentaba un programa electoral en el que volvía a defender la eliminación de las autonomías, Yolanda Díaz comenzó la campaña en su tierra hablando en galego, siguió en Zaragoza donde acompañó a Jorge Pueyo, el candidato de esa provincia, como parte de la Chunta Aragonesista, un presentador de la TV regional conocido por su activismo en redes sociales a favor del aragonés, y lo ha seguido este sábado en Valencia, donde incluso Errejón pronunció todo su discurso en valenciano.

“Fui criticada hoy por algunas voces que decían que no era correcto que hablara en gallego. Hoy lo quiero repetir en Zaragoza. España es un país de países. Es plural, es diversa, habla euskera, aragonés, catalán. Un país diverso. Es un país plurinacional, un país rico. La democracia también se juega el 23J. Salgamos a tener un país de países”, dijo desde el auditorio de la capital aragonesa. “Sueño con un país en el que mis hijos puedan estudiar si quieren catalán, euskera, aragonés o lo que nos dé la gana en la escuela”, prosiguió.

Una premisa que le agradeció la exalcaldesa de Barcelona y líder de los comuns, Ada Colau, en el acto de inicio de la campaña en A Coruña, en el que de paso tuvo un recuerdo para los alcaldes del cambio como ella Xulio Ferreiro y Martiño Noriega. “Creo que toda la gente de Galicia, igual que la de Catalunya necesitamos un gobierno a España que esté a favor del reconocimiento de la diversidad como un valor positivo. Sé que Yolanda quiere nuestras lenguas, las diferentes culturas, por eso hemos de ir a votar en masa el 23 de julio. A votar a favor de una España diversa en todos los sentidos, no solo a favor de lenguas, de las culturas. Nos gusta la diversidad, no nos da miedo. No queremos esa España en blanco y negro”, defendió.

Además de la apuesta por un modelo de país plurinacional, como ha dejado plasmado Sumar en el programa, Yolanda Díaz está convencida de que una de las formas de contrarrestar a la derecha y de movilizar a la izquierda es plantear propuestas que, dicen, sirvan para mejorar la vida de la gente. Desde Sumar están convencidos de que esta será la forma de que la campaña no vuelva a girar alrededor de los ejes que la derecha consiguió imponer el 28M, como ETA o la okupación, sino de medidas que propongan salir una hora antes del trabajo, limitar los precios del alquiler o incluir la salud mental en el sistema público.

Este sábado, Yolanda Díaz habló por ejemplo sobre una cuestión que afecta especialmente a la Comunitat Valenciana, como la financiación autonómica o de democratizar el mercado energético, trocear las eléctricas para evitar que cuatro multinacionales se repartan la tarta. “Las grandes energéticas han tenido unos beneficios de 19.000 millones cuando la factura de la luz es imposible para muchas personas, para muchos autónomos que no son capaces de soportar los costes que tienen”, dijo. “No es justo que un país dependa de cuatro o cinco multinacionales, un auténtico oligopolio, donde el mismo que produce es el mismo que la comercializa, este enorme negocio suculento”, insistió.

Díaz viajará este domingo a Sevilla y luego a Cádiz donde pondrá el foco en el cambio climático y las medidas para promover una energía verde y donde seguramente aprovechará para volver a confrontar el programa de la extrema derecha y su negacionismo sobre el calentamiento global, aunque también contra el Partido Popular por la ley sobre los regadíos de Doñana, uno de los primeros lugares que visitó tras el cierre de la coalición el pasado mes de junio.

Tras esta primera gira de actos, que cierra el lunes en Mallorca, Díaz regresará a Madrid para la reunión con los ministros europeos de Empleo, que se celebra la semana que viene en la capital española y que le obligará a interrumpir la gira que luego reanudará con actos en Euskadi y Asturias, plazas clave donde la coalición ha obtenido tradicionalmente buenos resultados y donde ahora debe al menos conservar los escaños que obtuvo allí Unidas Podemos en 2019 para mantener sus opciones electorales.