Los nuevos 577 diputados de Francia, escogidos tras las elecciones del pasado 7 de julio, votan este jueves para elegir al que será el presidente de la Asamblea Nacional. Es una votación clave, seria, teniendo en cuenta que ningún partido consiguió la mayoría absoluta y que el Parlamento tiene difícil gobernabilidad —está dividido en tres grandes bloques: 182 escaños de la unión de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP), la coalición de Emmanuel Macron con 168 diputados, y los 143 del bloque ultraderechista de Marine Le Pen, Agrupación Nacional (RN)—, pero los franceses han dejado hueco para la reivindicación política a través del humor. Un pequeño troleo para no inclinarse ante la extrema derecha.

Junto a la urna en la que los diputados han depositado su voto se encontraba el diputado de RN Flavien Termet, miembro de la mesa de edad al ser el más benjamín de la Asamblea. Algunos de los representantes del bloque de izquierdas han decidido votar y pasar de largo, sin involucrarse con la agrupación ultra y sin saludar. Casi todos se han limitado a rechazar la mano tendida de Termet. Casi todos salvo uno: François Piquemal. El diputado de la Francia Insumisa —partido que se ha integrado en la coalición de izquierdas junto a los socialistas, ecologistas y el Partido Comunista Francés— ha decidido, por su cuenta, jugar al piedra papel o tijera con el objetivo de evitar estrechar la mano del compañero de Le Pen.

El vídeo de la sesión —retransmitido, evidentemente, en directo— muestra a Piquemal acercándose a Termet. El primero deposita su papeleta en la urna y, antes de levantar la cabeza, hace el popular gesto del juego infantil. El ultraderechista, mientras, espera con la mano tendida... como si hubiera sacado papel. Piquemal saca tijera, la tijera vence al papel y ante la confusa mirada de Termet, Piquemal le dedica una mueca al perdedor: “Lástima, quizás la próxima vez”, parece querer decir su cara.