Ayuso cree que el caso Rubiales es “un embrollo entre socialistas que han intentado tapar con un beso”

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cree que el caso Rubiales es “un embrollo entre socialistas que han intentado tapar con un beso”, según ha expresado en una entrevista en ABC. Es la segunda vez que se posiciona al respecto tras pasar una semana en escrupuloso silencio sobre el beso forzado que dio el presidente de la Federación a la futbolista Jennifer Hermoso.

En ninguna de las dos ocasiones en las que se ha pronunciado ha hablado sobre lo ocurrido en sí mismo ni ha tenido palabras para la jugadora afectada. Si esta vez apunta a un “embrollo entre socialistas”, la vez anterior sospechaba de una conspiración entre los medios internacionales para darle mucho peso al caso Rubiales.

En un tuit, Ayuso denunciaba la “manipulación total” en la que vivimos porque la prensa internacional ha dedicado una amplia cobertura al beso y al rechazo de Rubiales a dimitir en un discurso en el que cargó contra el “falso feminismo” y contra parte del Gobierno. Para Ayuso, es sospechoso que todos los focos se hayan centrado en Rubiales mientras “nadie” denuncia “el boicot a la vuelta ciclista por parte de los independentistas” que “negocian con Sánchez”. A la vez, la semana anterior el vicesecretario de Asuntos Institucionales de su propio partido, Esteban González Pons, se refirió a Junts como un partido “cuya tradición y legalidad no están en duda”.

El Gobierno pide al TAD que suspenda a Rubiales

El Consejo Superior de Deportes remitió el viernes mismo al Tribunal Administrativo del Deporte un escrito en el que le pide que sea el TAD quien adopte de oficio la medida cautelar de suspensión temporal de Luis Rubiales. Lo hizo, tal y como había anunciado el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, tras la decisión del TAD de considerar que el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, actualmente suspendido por la FIFA, cometió durante la final de la selección femenina en Australia dos “faltas graves” por “conducta indecorosa”. El hecho de que no estimara una falta muy grave, tal y como solicitaba el CSD, impide al Gobierno suspender provisionalmente a Rubiales.

En el escrito, el Consejo Superior de Deportes considera que el comportamiento de Rubiales durante y después de la final del Mundial femenino de fútbol afecta a la imagen del deporte español y de España. “No sólo por la enorme repercusión nacional e internacional que está teniendo, sino también por los efectos que pueda tener en las relaciones con federaciones internacionales”. Cabe recordar, señala el CSD en un comunicado, que España aspira a organizar el Mundial masculino de fútbol de 2030.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cree que el caso Rubiales es “un embrollo entre socialistas que han intentado tapar con un beso”, según ha expresado en una entrevista en ABC. Es la segunda vez que se posiciona al respecto tras pasar una semana en escrupuloso silencio sobre el beso forzado que dio el presidente de la Federación a la futbolista Jennifer Hermoso.

En ninguna de las dos ocasiones en las que se ha pronunciado ha hablado sobre lo ocurrido en sí mismo ni ha tenido palabras para la jugadora afectada. Si esta vez apunta a un “embrollo entre socialistas”, la vez anterior sospechaba de una conspiración entre los medios internacionales para darle mucho peso al caso Rubiales.