Casado se burla del plan del Gobierno para crear una eléctrica pública obviando que la mayoría de países la tienen

El líder del PP, Pablo Casado, ha ironizado este viernes sobre la propuesta del Gobierno de crear una empresa pública de energía con el objetivo de controlar el mercado eléctrico. En un tuit publicado esta mañana, acompañado de una fotografía con la portada del diario El Mundo con el titular “Ribera plantea nacionalizar la hidroeléctrica al estilo Podemos”, Casado ha escrito: “Exprópiese”.

El dirigente popular ha recurrido a esa palabra en referencia al fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, quien usó esa expresión en 2010 para sacar de una céntrica plaza de Caracas a tradicionales comercios de joyería, en un vídeo que se popularizó posteriormente.

Casado ha asociado así la idea planteada este jueves por la vicepresidenta tercera y titular de Transición Energética, Teresa Ribera, y confirmada hoy por el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, de crear una compañía pública para gestionar las centrales eléctricas una vez que se vayan venciendo las actuales concesiones. El líder de la oposición ha coincidido con la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, de Ciudadanos, quien ha dicho esta mañana que una idea “populista” propia de países como “Venezuela”.

No obstante, y pese a que desde la privatización de Endesa la presencia del Estado en el sector energético desapareció en España, numerosos países como Estados Unidos, Francia, Italia o Austria cuentan con compañías energéticas con participación pública en mayor o menor grado.

En la generación de electricidad, los inversores privados son minoría a escala global. Aunque concentran tres cuartas partes de las inversiones en energías limpias, su cuota se ha reducido en los últimos años, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

Mientras, las empresas con participación pública “contabilizaban en torno al 61% de la capacidad eléctrica instalada en 2016 y cerca del 52% de la potencia prevista o en construcción” a escala mundial, según un documento de trabajo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicado en abril de 2018. Dicho de otra forma, solo un 38% de la potencia eléctrica instalada o en construcción está en manos completamente privadas.

Este estudio subrayaba el “importante” papel de los operadores públicos en el sector eléctrico en el mundo, “incluyendo a varios países de la OCDE” como Canadá, Noruega, Francia o Israel, y recordaba que 32 de las 50 mayores empresas del sector eléctrico a nivel mundial tienen participación pública, en un listado que incluye empresas energéticas de países como China o Venezuela, México y Rusia, pero también de Canadá (Hydro-Quebec, 100% propiedad de ese Estado), Estados Unidos (Tennessee Valley Authority o TVA, un gigante que opera en los estados de Alabama, Georgia, Kentucky, Misisipi, Carolina del Norte y Tennessee), Suecia (Vattenfall), Francia (EDF y Engie), Brasil (Electrobras), Japón (Tepco, que tuvo que ser rescatada por el Estado nipón tras el desastre nuclear de Fukushima) e Italia (Enel).