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Jamal Khashoggi y otros periodistas perseguidos, personas del año para Time

La revista Time ha querido reconocer este año a los periodistas perseguidos por hacer su trabajo. El semanario estadounidense ha nombrado “persona del año” a varios de ellos, de entre los que destaca Jamal Khashoggi, que fue asesinado durante una visita a la embajada de Arabia Saudí en Estambul. Junto a él están los que Time define como “guardianes” de “la guerra contra la verdad”, como son las periodistas de Reuters encarceladas en Myanmar Wa Lone y Kyaw Soe Oo, la filipina Maria Ressa o el medio The Capital Gazzette, que sufrió un tiroteo en su redacción.

La revista reconoce así a cinco ejemplos de reporteros que han sufrido represalias por informar. El de Khashoggi ha sido el caso más mediático, especialmente desde que empezaron a conocerse todos los detalles sobre cómo fue asesinado en las oficinas de la embajada de su propio país. A lo que se sumaron las sospechas de que el responsable de dar la orden fue el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman. Un crimen cometido porque, como apunta Time, Khashoggi “dijo la verdad al mundo de la brutalidad” del régimen saudí.

Decir la verdad también fue el supuesto delito que cometieron Wa Lone y Kyaw Soe Oo. Los reporteros de Reuters están en la cárcel cumpliendo una pena de siete años de cárcel por publicar que las fuerzas de seguridad de Myanmar participaron en el asesinato de 10 musulmanes. Contar esa masacre fue el pretexto para condenarles por vulnerar el Acta de Secretos Oficiales del país que está dirigido por la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi. Los asesinos a los que descubrieron fueron condenados solo a tres años más que ellos.

Las represalias por informar son algo que también conoce la filipina Maria Ressa, que está al frente de Rappler. Desde este medio, ha documentado la guerra contra las drogas del presidente de su país, Rodrigo Duterte, y los asesinatos extrajudiciales cometidos bajo ésta. Una decisión política por la que han muerto hasta 12.000 personas, según Human Rights Watch. Contar lo que está pasando en Filipinas provocó el veto del gobierno de Duterte a los periodistas de Rappler, a lo que siguió una acusación de fraude fiscal contra Ressa. Un crimen que está penado hasta con 10 años de cárcel. Y que la periodista tiene claro que es un intento de acosarla e intimidarla.

Junto a estos casos particulares Time también incluye en su lista a The Capital Gazzette, que fue atacado por un hombre que asesinó a cinco trabajadores de su redacción. El periódico de Maryland sufrió el ataque el 28 de junio por parte de Jarrod Ramos, que en 2015 perdió una batalla judicial con el medio. Ramos presentó una demanda por difamación después de que The Capital Gazzette le señalara como un acosador en redes sociales citando documentos judiciales. Tres años después, llevó a cabo su venganza, matando a cuatro periodistas y un agente de ventas.

Este reconocimiento de Time también se extiende a otros periodistas que no aparecen en su portada. Por ejemplo, a Nguyen Ngoc Nhu Quynh, que fue condenada a 10 años de cárcel en Vietnam por sus críticas al gobierno comunista de su país. Fue puesta en libertad a cambio de que se exiliase. También aparecen reseñadas investigaciones como la de The Observer sobre Cambridge Analytica, el escándalo en el que esta empresa robó datos de redes como Facebook a millones de personas que luego llegaron a manos de la candidatura de Donald Trump. Con esta información, se intentó influir en el voto de estos estadounidenses a través de noticias falsas.

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La revista Time ha querido reconocer este año a los periodistas perseguidos por hacer su trabajo. El semanario estadounidense ha nombrado “persona del año” a varios de ellos, de entre los que destaca Jamal Khashoggi, que fue asesinado durante una visita a la embajada de Arabia Saudí en Estambul. Junto a él están los que Time define como “guardianes” de “la guerra contra la verdad”, como son las periodistas de Reuters encarceladas en Myanmar Wa Lone y Kyaw Soe Oo, la filipina Maria Ressa o el medio The Capital Gazzette, que sufrió un tiroteo en su redacción.

La revista reconoce así a cinco ejemplos de reporteros que han sufrido represalias por informar. El de Khashoggi ha sido el caso más mediático, especialmente desde que empezaron a conocerse todos los detalles sobre cómo fue asesinado en las oficinas de la embajada de su propio país. A lo que se sumaron las sospechas de que el responsable de dar la orden fue el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman. Un crimen cometido porque, como apunta Time, Khashoggi “dijo la verdad al mundo de la brutalidad” del régimen saudí.