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El micro abierto de los líderes del G7 sobre posar como Putin: “A torso descubierto, tenemos que enseñar nuestros pectorales”
Un micro abierto en la mesa donde se sientan las personas más poderosas del mundo, la cumbre del G7 que se celebra estos días en Alemania, ha permitido escuchar las bromas y risas de los grandes mandatarios, jugando con la posibilidad de reproducir aquella célebre imagen del Vladímir Putin cabalgando a torso descubierto.
El más entusiasta con la idea ha sido Boris Johnson. El primer ministro británico escala rápidamente del “¿nos quitamos la chaqueta?” al ‘¿nos quitamos la ropa?’, entre las risas de sus colegas y de los periodistas.
Ahí interviene su homólogo canadiense, Justin Trudeau, quien sugiere “esperar a la foto [oficial]”. El italiano Mario Draghi celebra la ocurrencia y una media sonrisa se dibuja en el rostro del francés Emmanuel Macron.
Entre tanto, Joe Biden, va desdibujando su sonrisa inicial mientras se esfuerza por leer unos documentos. La actitud del presidente de EEUU es incluso más contenida que la del tradicionalmente reservado primer ministro japonés, Fumio Kishida.
Es entonces cuando Johnson retoma la voz cantante: “Tenemos que demostrar que somos más duros que Putin”, y ahí viene la feliz idea de Trudeau –“Vamos a tener que montar el numerito de la cabalgada con el torso desnudo”–; una ocurrencia que es saludada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: “¡Oh, sí! ¡Lo de montar a caballo es lo mejor!”. “Tenemos que enseñarles nuestros pectorales”, remata Johnson.
El álbum de fotografías de Putin haciendo cosas es muy variado y digno de un catálogo de figuras de acción, tipo Madelman: paracaidismo, vuelo en ultraligero, caza, pesas, kárate, motero, buzo... En el caso de la foto a pecho descubierto montando a caballo, la imagen fue captada en Siberia, en 2010.
Un micro abierto en la mesa donde se sientan las personas más poderosas del mundo, la cumbre del G7 que se celebra estos días en Alemania, ha permitido escuchar las bromas y risas de los grandes mandatarios, jugando con la posibilidad de reproducir aquella célebre imagen del Vladímir Putin cabalgando a torso descubierto.
El más entusiasta con la idea ha sido Boris Johnson. El primer ministro británico escala rápidamente del “¿nos quitamos la chaqueta?” al ‘¿nos quitamos la ropa?’, entre las risas de sus colegas y de los periodistas.