Sunak se va a una granja en un acto de campaña electoral a dar de comer a ovejas... que huyen de él

Llevaban sus botas de montaña y sus cubos preparados. Estaban en una granja y tenían una misión: conseguir la foto para la campaña electoral. Un político dando de comer a un animal, ¿hay algo más enternecedor? En la mente del equipo del primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, sonaba espectacular. Pero no contaban con un pequeño detalle, que ha acabado convirtiendo el vídeo en un meme que corre como la pólvora en redes: el político conservador agachado, junto al ministro David Cameron, con sus cubos en el suelo esperando que alguna pequeña oveja viniera a ellos. Y mientras, todo el rebaño corría al lado opuesto del corral. “Venga, vamos”, se escuchaba decir a Sunak.

La imagen ha provocado una oleada de reacciones en X, donde hasta el Partido Laborista, que podría apuntar una histórica victoria frente a los conservadores británicos estas próximas elecciones de este 4 de julio, ha entrado a comentar. “Rishi Sunak no puede parar el caos de los 'tories'”, han escrito en la red social, junto al vídeo editado, en el que equiparan las ovejas con los conservadores, huyendo del primer ministro.

Estos últimos días Sunak ha recibido múltiples críticas por su campaña. El pasado 7 de junio, el dirigente se vio obligado a disculparse por ausentarse de los actos que conmemoraban el 80º aniversario del desembarco de Normandía, en el que asistían algunos políticos como Joe Biden o Emmanuel Macron, para asistir a una entrevista. Allí dejó a su ministro de Exteriores, David Cameron, que también aparece en la visita a la granja:

“No quiero que se acaben nunca estas elecciones”

“Parece que los conservadores por fin se han dado cuenta de que necesitan alejar lo máximo posible a Sunak de los humanos, pero han olvidado que las ovejas pueden sentir el mal”, escribe otro usuario en X. “El equipo de relaciones públicas de Sunak merece un premio”, comenta otro, con emojis de risa.

Al inicio de la campaña, Sunak decidió que era buena idea irse al embarcadero del Titanic para arrancar con los actos electorales, algo que tanto la prensa como la sociedad británicas interpretaron como una metáfora del posible resultado de estos comicios: los conservadores hundiéndose, como el famoso barco.